Así exclamaba "Tatú" (Hervé Villechaize), luego de tocar la Campana en la Torre, cuando un avión lleno de huéspedes, cruzaba los cielos para llegar a la Isla de la Fantasía, donde los recibía Ricardo Montalban, para que disfrutaran de máximas comodidades en esta Isla, que la serie nos presentaba como paradisiaca.
Y así, también exclamaron y saltaron en los Estados Unidos, los funcionarios, con la anuencia de Joe Biden, cuando el Avión de Carga propiedad de Venezuela, cruzó los cielos para aterrizar en la República Argentina y vieron la posibilidad de secuestrarlo, como un acto más de piratería internacional.
¡El AVION! ¡EL AVION!, se frotaron la manos y vieron una gran oportunidad, de robarse una nueva propiedad perteneciente al pueblo venezolano; como lo habían hecho ya con CITGO, congelando miles de millones de dólares en bienes y dinero que nos pertenecen. El ejemplo lo secundan los ingleses, que pretenden robarse el Oro de Venezuela, configurando lo que podríamos catalogar como la Nueva Piratería del Siglo XXI.
Y es que estas acciones no tienen nombre, escapan de cualquier capacidad de asombro, países que antes apuntalaron su desarrollo con base a la piratería mundial, el robo de recursos naturales a otras naciones y la apropiación indebida de bienes culturales y dinero depositados en bancos, por países que ellos intervienen o sancionan. Ahora pretenden, sobre la base del Robo descarado, porque no se puede llamar de otra manera, continuar asaltando a otros países, apoderándose de sus bienes, dineros depositados en bancos y cualquier otro recurso, para mejorar sus menguadas economías, hoy resentidas por la incapacidad gubernamental del mantenerlas equilibradamente.
A ese estado de Delincuencia Organizada Internacional está llegando el liderazgo mundial, con los Estados Unidos como mentor, que viola incluso el Orden Internacional en su afán de obtener a como dé lugar recursos vengan de donde vengan y por cualquier medio, incluyendo y en primer lugar, los ilícitos.
La amoralidad del liderazgo internacional queda al descubierto, porque siendo incapaces de solventar los graves problemas por los que atraviesan sus países, recurren al recurso del pillaje sin el menor rubor, por el contrario, tratándolo de justificar con criterios políticos manidos, que solo obedecen a su voracidad imperial.
Es en ese contexto, es que debe enmarcarse, lo que actualmente sucede en la República de Argentina, donde se encuentra secuestrado un Avión propiedad de Venezuela, por orden de los Estados Unidos.
Esto raya en lo insólito: en un gobierno que se dice soberano, supuestamente dirigido por sectores progresistas y de izquierda, recibe sin el menor recato ordenes de la Casa Blanca, para retener un avión de una país de nuestra región, donde también existe un gobierno progresista, al que por cierto, le deben respeto no solamente por ser soberano y tener años de historia en sus relaciones diplomáticas, sino, porque, cuando Argentina necesitó de la Ayuda del Pueblo venezolano para salir de la Deuda que había contraído con el Fondo Monetario Internacional. Allí estuvo el amplio corazón de Venezuela, solidarizándose, para auxiliarlos y ayudar a que superaran la crisis y equilibrar sus cuentas.
Así Paga el Diablo, dice un refrán muy popular. El Presidente Hugo Chávez Frías, compró más de Cinco Mil Millones de Dólares de los Bonos de la Deuda Argentina, para contribuir a estabilizar su economía y hoy devuelven el amistoso gesto, permitiendo que la llamada "Justicia Argentina", se presta a Secuestrar el Avión de Carga venezolano, por órdenes de la Casa Blanca.
Pero no es solamente eso, sino, que sus medios de comunicación se prestan, igualmente, a elaborar bodrios informativos para enlodar más el panorama y justificar el secuestro, vinculando, como lo han hecho últimamente, el Avión, con el asesinato de un Fiscal de Drogas Paraguayo, que se encontraba en Colombia, de vacaciones junto a su esposa. Por esa vía, pronto dirán, que el avión venezolano antes de llegar a la Argentina, habría dejado una bomba nuclear en cualquier país que se les antoje, y a lo mejor escogen a Cuba o Nicaragua. ¡Oh¡ , albricias, trataran de decir, que el avión, se prestó para ocultar las armas de destrucción masiva, falso positivo, utilizado, para Invadir a Irak.
Por supuesto, lo que está detrás de esta burda maniobra, es muy claro, la disposición del gobierno de los Estados Unidos de continuar presionando y bloqueando al gobierno venezolano, al mismo tiempo que le roba bienes propiedad de nuestro pueblo. Lo lamentable, es que el Gobierno de Argentina, se preste a estas maniobras, permitiendo que en su propio territorio, se haga más valer más el derecho arbitrario imperial, que su propia justicia, causándole graves daños a un gobierno como el venezolano, con el cual la República Argentina, tiene años de historia diplomática. ¿Será que este gobierno, que se dice progresista, convertirá a la Argentina en una Isla de la Fantasía, para que los Estados Unidos, anden a sus anchas, manipulen jueces y apliquen la justicia del garrote contra los países que adversan?
La pregunta queda al aire, los acontecimientos futuros, se encargaran de darle respuesta. Por lo pronto, desde Venezuela, se actúa con firmeza y tanto el gobierno como la inmensa mayoría de su población, reclaman sus derechos y exigen respecto al Derecho Internacional y la devolución de todos los bienes ilegalmente secuestrados en manos de quien estén.