Presupuesto Soberano

La oposición venezolana en su ofuscada terquedad de intentar acabar con la revolución bolivariana y sacar a como del lugar al Presidente Nicolás Maduro del poder que el pueblo le ha otorgado, sigue cometiendo errores tras errores. No sólo han desperdiciado la acumulación de fuerzas que lograron alcanzar producto de su plan de guerra económica que les permitió un impacto considerable en el descontento de algunos sectores, y que hoy han perdido de forma considerable debido a sus torpezas, sino, que han logrado la "magia" de neutralizar un poder constitucional, volviéndolo ilegítimo y, además, ineficiente. Nos referimos a la Asamblea Nacional.

El desacato a la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia respecto a la suspensión de los tres diputados de Amazonas, sobre los cuales apuntan pruebas contundentes de haber sido electos de forma fraudulenta, es un acto de absoluta bravuconería infantil, que lejos de parecerse a un hecho de sublevación, es un absurdo político que los deja fuera del jugo legal, de las normas constitucionales y de los argumentos propios del ejercicio democrático. No obstante, siguen sirviéndose del fuero que sus curules les confieren y su tono de arrogancia propia de la clase a la cual representan, sus expresiones de odio, misoginia, racismo y anhelo de represalias, se les salen por las costuras.

Como dice el adagio popular: "no hay mal que por bien no venga". Si para algo ha servido que la derecha haya logrado la mayoría en la Asamblea Nacional, ha sido para que el pueblo los vuelva a recordar tal como son… Hoy se batuquean contra el suelo por la decisión tomada por la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia de solicitar al Presidente el decreto del Presupuesto Nacional para el ejercicio fiscal de 2017. Para ellos, no se trata de ir en defensa de una supuesta competencia que perdieron desde el momento en que se declararon en desacato. De lo que se trata para esa élite de la oposición venezolana, es que con este decreto con rango y fuerza de ley, no van a poder cumplir con las concesiones que tenían ofrecidas a sus dueños, a los amos de la política de la MUD. Es decir, a los grandes intereses económicos nacionales y transnacionales.

El carácter participativo que la discusión de este presupuesto tomó en el momento en que el Presidente lo sometió a la construcción colectiva es otra de las razones por las cuales la derecha se opone. No les gusta que la gente opine, ellos menosprecian las virtudes del pueblo. Mientras tanto, la mayoría popular pone de manifiesto su respaldo al talante socialista que se recoge en este documento histórico. Nunca antes un presupuesto Nacional había tenido tan alto porcentaje destinado a la inversión social para garantizar el derecho al trabajo del pueblo, al salario, a la vivienda, a la alimentación, a la educación, a la salud; más del 73%. Nunca antes se había diseñado un presupuesto basado en la visión de romper con el modelo de rentismo petrolero que tanto daño ha causado a nuestro país; sólo el 17% de financiamiento a través de los hidrocarburos. Pero, especialmente, nunca antes, en medio de tantas dificultades y, a pesar de las mismas, había sido tan claro el camino a transitar: El Plan de la Patria legado por el Comandante Eterno. El presupuesto 2017 se convierte entonces en un arma poderosísima de lucha y construcción de socialismo, de soberanía y de esperanzas.

 

lilienavargas@yahoo.es

 



Esta nota ha sido leída aproximadamente 969 veces.



Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter