Vivir con una condición de discapacidad, es algo que nadie desea, menos aún en una sociedad excluyente, con muy poco conocimiento sobre la materia y en ciudades con miles y miles de barreras arquitectónicas que hacen aún más difícil el desenvolvimiento de una persona con discapacidad.

Enterarnos en el marco del Congreso de la Patria que el camarada Héctor Rodríguez presenta una condición de discapacidad motora, fue algo que realmente nos sorprendió y que verdaderamente lamentamos, pues los que vivimos en el mundo de la discapacidad, lo que más deseáramos, es que no hubiese una persona más con una condición de discapacidad.

Sin embargo, la forma como asume su condición y el conocimiento que tiene sobre la materia, es digno de admirar, sobre todo para los que hemos seguido la trayectoria de este joven Venezolano, reconociendo en él, además de su destacado actuar en el mundo complicado de la política, su entrega y disposición a dar lo mejor de sí, en cada cargo que le ha tocado desempeñar, lo que dejó bien acentuado, a su paso por el Ministerio del Poder Popular para la Educación, junto a un equipo formado y con amplia experiencia en el mundo de la educación.

Para los que por una u otra causa vivimos la discapacidad, el que uno de los nuestros se destaque, siempre será motivo de orgullo y satisfacción, pues nos permite demostrarle a la sociedad, lo valioso que somos y lo dispuesto que estamos a trabajar por la construcción de un mundo mejor, justo, productivo y con amplia conciencia del rol que a cada uno le toca asumir en esta tarea.

No obstante, para nadie es un secreto, que esta complicada situación económica que vivimos actualmente, donde debemos luchar día a día en busca de alimentos, medicinas y demás productos de aseo personal, nos golpea con más dureza a las personas con discapacidad, no tanto por nuestra condición, sino por la falta de conciencia de los funcionarios del orden público, que en vez de apoyarnos y hacernos más llevadera la situación, optan por maltratarnos y hasta burlarse de nosotros, sin pensar, que la discapacidad se hace presente en cualquier momento, por la razón que sea y que al igual que nosotros, pudiera vivir las mismas situaciones a las cuales ellos hoy nos someten.

Todo este atropello que sufrimos día a día a nivel nacional, lo hemos denunciado en diferentes instancias gubernamentales, sin que exista autoridad alguna que nos oiga.

Es por ello, que desde este espacio, como uno más de los nuestros, hacemos un llamado al camarada Héctor Rodríguez, para que sea nuestra voz, ante las altas esferas del gobierno, donde sabemos es escuchado, para que de una vez por todas, cesen los maltratos y atropellos a las personas con discapacidad sobre todo visual, por parte de funcionarios civiles y militares a lo largo y ancho del País.

Debemos acotar, que solo exigimos, que se cumpla la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, la Convención Internacional Sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y la Ley para las Personas con Discapacidad, ordenamiento jurídico, promovido y defendido durante este proceso revolucionario, en el marco del modelo democrático y social de derecho y de justicia, consagrado en el artículo número dos de nuestra Constitución.