El reto superior de la Clase Trabajadora en Venezuela es ASUMIR ahora, en medio de la Guerra Económica, la producción con el rumbo y el ritmo que exigen las necesidades humanas, no las necesidades "creadas" por el consumismo.
Todo empieza por visualizar y construir un Gran Plan de Producción Nacional (GPPN), del que ya tenemos parte esencial en el Plan de la Patria que nos legó el Comandante Eterno Hugo Chávez. Se requiere una estratégia que organice los medios de producción (en todas sus modalidades, coberturas y ubicaciones) en sintonía y a la disposición del GPPN. Tambien hay que tejer una Red de Organizaciones que con espíritu de Clase Trabajadora, eficacia política y calidad revolucionaria, se enfrente al rentismo y asuma un Modelo de Gestión para una Cultura del Trabajo.
El desarrollo del GPPN es oxigeno puro para la vitalidad de revolución bolivariana en marcha.


II.
Estamos convencidos que reorientar nuestra sociedad hacia la Cultura del Trabajo y como tal hacia la Producción, pasa por conjugar una filosofia, una economia politica y un tipo de socialismo, como elementos básicos para salir del consumismo que nos mantiene postrados ante el saqueo.
En Venezuela, no hay mejores tesis filosoficas sobre la Producción, que las presentadas, defendidas y puestas en práctica por el Maestro Simón Rodriguez, durante el siglo 19.
En términos de economía política, en la Venezuela Pre-Petrolera y hasta hace 40 años, nuestra Patria fue pionera en la producción local o endógena. Ni Venezuela ni el mundo vivían del Petróleo. Cada pueblo de Venezuela producía con calidad el 80 % de lo que consumía, aunque no se reflejara en el PIB. Esas raices están intactas.
Siendo una realidad el resurgimiento del socialismo a nivel mundial, producto de la fuerza de los postulados del Comandante Eterno Hugo Chávez Frías, que se condensaron como Socialismo del Siglo XXI, entonces ese socialismo debemos asumirlo al pie de la letra para impulsar la Cultura del Trabajo.
Estamos en el tiempo y el espacio precisos para que la Clase Obrera dirija la economía del país. Cosa que es compleja pero no imposible, si se asume el GPPN con grandes esfuerzos en: formación y autoformación de la Clase Trabajadora; comunicación alternativa; lucha constante contra la corrupción y el burocratismo (tanto en el gobierno como en las organizaciones populares); propulsar vocerias revolucionarias en las instancias de poder popular y por último, unidad irreductible entre las organizaciones tácticas de la Clase Trabajadora (UBTJR, Sindicatos, Milicia, Delegados de Prevención y Consejos de Trabajadores, entre otros).
El Plan Guayana Socialista en su Nueva Etapa, una gran oportunidad para el ensayo necesario.


III.
ASUMIR la Producción Nacional con fines de Independencia y Soberanía toca, tanto la doctrina como las estructuras, viejas y nuevas, que existen en el campo de la política venezolana, abre el debate, impulsa la construcción de un plan de lucha y la ejecución de acciones sobre asuntos como:

1. Difusión del Pensamiento Obrero de Hugo Chávez.
2. El GPPN como bandera de lucha por la sociedad justa y amante de la paz.
3. Programa de formación para la Cultura del Trabajo.
4. Burocracia anti-producción.
5. Objetivos especificos de un sindicato revolucionario.
6. Necesidad de un Partido Político del Trabajo.
7. Legalización de los Consejos de Trabajadores.
8. La aristocracia sindical chavista y escuálida.
9. El reporte como mercancia de vida o muerte.
10. El pensamiento del No-Trabajo.
11. Escuela del Trabajo Liberado.