Reflexiones para promover una cultura por la paz y la vida

En este momento en que nuestra patria Venezuela demanda unidad de todos los actores sociales para construir propuestas que le permitan al gobierno nacional, generar políticas que nazcan del seno de todos los venezolanos donde al unísono, clamamos “ya basta de violencia, construyamos las bases de la paz”; Maduro, N. (2014).

En el marco de la corresponsabilidad, la participación y el protagonismo el llamado es a la cooperación y a mancomunar esfuerzos entre el Estado y la sociedad con miras a determinar alternativas viables que nos permita revertir el fenómeno de la violencia y antivalores que se imponen y contravienen el equilibrio y armonía en las relaciones humanas. Si bien es cierto, que el problema es muy delicado dada la complejidad al tratar de darle significado a la magnitud de esta situación, en virtud a ello se asume la violencia como una problema donde intervienen múltiples factores que nos convoca a la integración y a la unidad ministerial donde cada uno asuma competencias para redefinir algunas herramientas que den respuestas en un corto, mediano y largo plazo con el objeto de ir construyendo una cultura por la paz y la vida.
Venezuela en este transitar busca el consenso de propuestas que se fundamenten en la Constitución Nacional, que reza tácitamente en el preámbulo y en los principios fundamentales la filosofía del país que queremos. Por ende, la carta magna no es letra muerta ella cimenta todas las políticas públicas. En efecto, es necesario que en lo específico el Ministerio del Poder Popular para la Educación Básica, como órgano rector en materia educativa reimpulse en revolución cambios que nos permita en esencia y en la práctica una verdadera transformación social,donde la escuela como institución sea mediadora de procesos de aprendizaje y desarrollo sobre la base de potenciadora de una cultura por la paz y la vida.

En este particular, mi contribución está sustentada además de la CRBV (1999), en la LOPNNA (1998) y en la Ley Orgánica de Educación (2009), específicamente en esta ordenanza en materia educativa en lo tocante al Estado Docente y a sus competencias;es prioritario que las instancias que regulan, controlan y garantizan las políticas educativas en el ámbito nacional, regional, municipal e institucional. En concordancia con los basamentos legales y curriculares, es de fundamental el despertar de la consciencia educativa para hacer una mirada crítica y reflexiva que conlleve a repensar el accionar docente desde los planos del conocimiento ontológico, epistemológico y metodológico. Para develar la gran responsabilidad de los niveles de supervisión, ello muestra un alto contenido axiológico de los procesos de Dirección, donde la Supervisión Educativa y la Supervisión Curricular revela la necesidad de profundizar en el Sistema Educativo Bolivariano, lo que conlleva a determinar la efectividad de las Políticas de Supervisión y Formación Permanente al valorar el alcance e impacto a través de un verdadero seguimiento y control a la política educativa y su concreción en la praxis pedagógica a través de los planes, programas y proyectos del Sistema Educativo Bolivariano.

En este sentido, el docente investigador juega un papel determinante en esta época de cambios políticos y sociales. De ahí la importancia de la integración y trabajo mancomunado entreel Mpp Educación Universitaria, Mpp Educación Básica, Mpp Comunas y Movimientos Sociales y MppComunicación e Información; con miras a articular acciones con objetivos comunes en pro de potenciar una cultura por la paz y la vida. Donde el docente sea formado para generar espacios educativos de investigación desde la cotidianidad de su praxis pedagógica, que le permita a su vez hacer un trabajo en colectivos con los demás actores que hacen vida directa e indirectamente en el ámbito educativo, para contribuir y redimensionar la educación para que en la práctica tenga correspondencia con la normativa curricular, con el basamento jurídico y con el legado del máximo líder de la Revolución venezolana y precursor del Socialismo del Siglo XXI quien nos dejó claramente definido un Plan de la Patria, donde el pueblo lo aprobó en la Asamblea Nacional y lo hizo ley de la República Bolivariana de Venezuela.

Al respecto, elMpp de Educación Universitaria a través del Centro Nacional de Investigaciones Educativas (CNIE) coordine acciones con el Mpp Educación Básica para reimpulsar la investigación educativa desde los escenarios propios de la acción docente, los cuales viene a dar respuestas a tópicos de interés curricular que conlleve a la construcción y reconstrucción de teorías pedagógicas y didácticas que tengan vigencia en el tiempo y pertenencia contextualizada; ello obedece al criterio de diversidad y a lo heterogéneo de los escenarios y de los actores a quienes va dirigida la educación, por ello la didáctica va asumiendo particularidades propias a su naturaleza donde se desarrolla el acto pedagógico; lo que revela una nueva concepción de la investigación educativa.

Aunado a ello, aplaudo la decisiones del nuestro Comandante Presidente Nicolás Maduro al intensificar su política en materia de las programaciones de los medios de comunicación social, es fundamental que dichos medios se constituyan además de informativo tengan carácter educativo; porque para nadie es un secreto el poder que ejercen los medios al desvirtuar a la familia y demás instituciones a través de la promoción de antivalores que se imponen al generar una cultura de violencia y muerte entre otros que se hacen presente.

Como consecuencia, al promover la participación de las instituciones del Estado y de la Sociedad Civil en la presentación de propuestas por la construcción de una cultura por la paz y la vida; le da un carácter especial y de gran valor al protagonismo al promover principios de corresponsabilidad y participación. Estas reflexiones nos llevan a visionar la sociedad que queremos y que demanda nuestra patria Venezuela. En las palabras del Comandante Supremo, el gigante “la autocritica debe ser para revisar, para rectificar y para reimpulsar siempre la revolución por dentro de ella misma”. Ello nos lleva a asumir la corresponsabilidad en lo que sea necesario para poder cumplir con la misión de educar para la vida, lo que nos invita a aprender a desaprender y reaprender para potenciar una cultura por la paz y la vida.

El gobierno nacional ha implementado mecanismo a través del gobierno de calle en el esfuerzo de dar respuestas in situ a la demanda de situaciones propias de cada contexto. Y en este sentido, el llamado a la activación de todas las instancias gubernamentales regionales y municipales donde el poder comunal es de gran valía en la activación de un solo colectivo que busca la mayor suma de felicidad posible para todos y todas en igualdad de oportunidades y condiciones. Donde la unidad, disciplina, trabajo y compromiso conllevan al rol protagónico en la lucha contra la violencia y la construcción de una cultura por la paz y la vida; ello solo es posible en una revolución socialista de ahí la importancia de hacer de la sociedad más humanista por ello el carácter transformador de la Educación Bolivariana.
Unidad, lucha, batalla y victoria. Chávez vive la patria sigue.




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Arlene Vergaras

Doctora en Ciencias de la Educación. Docente Directora del MPPE y Docente Universitaria. Investigadora, miembro del Centro Nacional de Investigación Educativa del Centro Internacional Miranda. Escritora de artículos educativos.

 arlenevergarasm@gmail.com      @arlenevergaras

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