En estos momentos de angustia y tristeza, la frase de moda para los chacales de mentira, los mercaderes de la ignorancia es “la Esperanza de Vida de Hugo Chávez”. Es paradójico, porque, aunque a mi alma hoy le cueste, mi rostro dibuja una sonrisa al oírlos hablar de esto y mi mente piensa, Hugo Chávez, el que rompió la historia aquel 4 de febrero. El que nos enseño a darnos Constituyente, Constitución y Patria. El que resucitó de la mano de su pueblo aquel 13 de abril. El que nos sanó de la desidia política inoculada por 200 años. El que nos enseño a amar La Patria y Nuestra Historia. El que rescató la Bandera, El Escudo y El Himno Nacional de la ignominia y el tedio. El que nos despertó al hecho de no merecer ser pobres en uno de los países mas ricos del planeta. El hijo pródigo de Miranda, Bolívar, Rodríguez y Zamora. El que vino a terminar la labor incompleta de nuestra independencia. El Emilio, El Maestro que con cada discurso, con cada historia que contaba, nos enseñaba de la vida, del Amor, de nosotros mismos. El “hijo del pueblo” el padre de una era. El necesario. El que junto a Bolívar, juró no dar descanso a su brazo y reposo a su alma y lo cumplió hasta sus últimas consecuencias hoy. El referente. El que encendió la mecha de "Los Indignados" del mundo. “El que No se cayó”, El Justo, El defensor de los oprimidos, de los pobres, de los descalzos, de los hambrientos, de los olvidados, de los que, antes de su llegada, veían con rabia e impotencia la injusticia de una sociedad groseramente desigual. El “Tribilín” que con su irreverente “torpeza” diplomática le dijo lo necesario a quien debía y cuando debía. El Verdadero “Látigo Chávez” contra los enemigos de La República. El bisnieto de Maisanta. El que tocó la diana, rompiendo el silencio de nuestro apacible sueño. El que sacó a nuestros hermanos de la oscuridad del analfabetismo en el que permanecían convenientemente sumidos. El bueno, que con un cristo azul en la mano, perdonó a quienes intentaron asesinarlo y robarnos la esperanza. El que ponía lágrimas hasta en los ojos del “más macho”. El que reconoció la Gravedad de Nuestra Madre Tierra y colocó su salvación como prioridad en todas las decisiones. El que lo entregó todo…
Entonces, no esperen más “noticias”. Anuncio oficialmente, que la “Esperanza de Vida” del Presidente es TODA, es mil por ciento, porque ¿cómo muere una idea, un sentimiento, un motivo, una historia, un pueblo despierto? Chávez Vivirá señores, para tormento de los egoístas, de los vacíos, de los ignaros, de los superfluos. Chávez vivirá siempre porque está sembrado en nuestros corazones, porque se hizo millones. Porque, aunque jamás lo reconozcan, Gracias a Hugo Chávez, sus hijos y los hijos de sus hijos tendrán una Patria Libre, Soberana e Independiente y llena de oportunidades, con Conciencia, Igualdad, Libertad y Justicia por los siglos de los siglos y como nunca ninguno de nosotros tuvimos.
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