¿Ley de Amnistía? ¡Perdono pero nunca olvido!

La amnistía es un acto jurídico emanado, por lo general, del poder legislativo. Dicha acción consiste en desaparecer la figura delictiva de una persona considerada culpable, quedando ésta totalmente absuelta de pena y delito ante la ley. Para resumirlo en términos menos complejos, se puede decir que la amnistía significa eliminar por completo los antecedentes penales, la culpabilidad y la responsabilidad, ante la ley, de una persona que haya cometido delitos, como participar en un Golpe de Estado, estar implicado en el asesinato de un funcionario público o ser protagonista de obvios actos de corrupción.

A Venezuela se le acusa de ser un país que, tanto nacional e internacionalmente, viola los derechos humanos del hombre y la mujer. Esto se debe a una gran campaña mediática, promovida por diversos factores de la derecha venezolana y mundial. La única intención de estas acciones es deslegitimar el proyecto de país que lleva a cabo el Presidente Chávez de la mano de los ciudadanos venezolanos, quienes lo han ratificado en innumerables eventos democráticos, a lo largo de 14 años de gestión bolivariana.

Nuestro país, rompiendo con el estatus de nación con régimen político dictatorial, ingresó, el pasado 12 de Noviembre, al Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas. 154 naciones votaron por la adjunción de Venezuela a este organismo de la ONU, organización que integra a 193 estados; por lo tanto, el apoyo a esta medida fue mayoritario y considerado "abrumador" por Jorge Valero, Embajador venezolano ante la instancia. Este es, sin duda, un logro político que echa por tierra las intenciones de los gobiernos más opresores del mundo de hacer ver a nuestro país como un lugar hostil e inhabitable.

Una de las mentiras difundidas por la oposición venezolana, es la persecución política, la cual, según ellos, se ha llevado a cabo contra personas "nobles" e "inocentes", cuyo único delito es adversar a Hugo Chávez. ¡Qué falsedad tan grande e indignante!

Ahora la Mesa de la Unidad Democrática, coalición ultraderechista y conservadora, pretende que se liberen los políticos presos, que ellos califican de "presos políticos", pese a los crímenes terribles que la mayoría de ellos han cometido. Por esta razón, el Diputado de la MUD, Edgar Zambrano, insertó ante la Asamblea Nacional, el pasado 15 de Noviembre, una proyecto de Ley de Amnistía, que libere de culpa y de pena a unos cuantos malhechores y permita el regreso de varios exiliados a nuestra amada Venezuela.

Algunas de las "joyitas" que la oposición defiende del "Rrrrrégimen" castrochavista son (descripción muy breve):

María Lourdes Afiuni (presa):   Al estar encargada del Tribunal Trigésimo Primero de Primera Instancia en Funciones de Control del Circuito Judicial Penal del Área Metropolitana de Caracas, otorgó una cautelar de libertad al banquero estafador, Eligio Cedeño, quien era investigado por presunta vinculación en la tramitación de dólares preferenciales para la adquisición de equipos electrónicos que no llegaron al país. Cedeño tenía que presentarse cada 15 días ante el Ministerio Público antes de que se emitiera un conclusivo.

Iván  Simonovis, Lázaro Forero y Henry Vivas (presos): comisarios sentenciados a treinta años de prisión por los hechos del 11 de Abril de 2002. ¿Se acuerdan de estos tipos? Como miembros de la Policía Metropolitana, fueron responsables, según varias pruebas, de 3 de las 19 muertes ocurridas ese día. Respondan ustedes si deberían estar libres.

Los hermanos Otoniel y Rolando Guevara (presos): asesinos materiales del Fiscal Danilo Anderson. ¿Recuerdan lo horrible que fue presenciar por televisión como enterraban sus restos? ¿Dejaremos libre de culpa a Patricia Poleo?, presunta autora intelectual de dicho crimen.

Carmona Estanga (exiliado): Presidente de facto en el Golpe de Estado de 2002.

Nixon Moreno (exiliado): imputado por homicidio intencional en grado de frustración, intimidación pública, lesiones personales, actos lascivos y violentos. En pocas palabras: ¡Es un violador!

 Manuel Rosales: no hace falta decir mucho de este patético personaje. Suficientes pruebas de corrupción existen para enrejar a este ladrón.

 Olvidaba a Carlos Ortega, el especulador Guillermo Zuloaga; La gente de Petróleo, quienes, durante el paro petrolero y empresarial 2002-2003, nos dejaron sin agua, gasolina, comida y en una gran crisis económica, de la cual salimos, gracias a la eficiente labor del Gobierno Bolivariano y a los esfuerzos incansables de nuestro presidente; los asaltadores de la Embajada de Cuba; el de la Plaza Altamira, Felipe Rodríguez (el cuervo); los responsables de la acción de masacre frustrada con 160 paramilitares colombianos en la Finca Daktari; y pare de contar.

Bastan y sobran razones para que muchas venezolanas y venezolanos, que presenciamos estas injusticias, estemos totalmente en contra de cualquier tipo de diálogo para la liberación de delincuentes como estos, o el regreso a nuestra sagrada y soberana patria de malandros como Rosales.

Suficiente es tener que calarnos a Henrique Capriles Radonski y a Leopoldo López, quienes fungen actualmente como dos de los principales líderes opositores del país; todo esto luego de haber allanado la vivienda de un funcionario público en 2002 y haber sido protagonistas del Golpe de Estado, ese mismo año. ¿Ahora también permitiremos que los desastrosos que nombramos en párrafos anteriores se paseen por nuestras calles, disfrutando de los placeres de la vida, que ellos mismos se cansaron de restringir a miles de venezolanos y venezolanas?

Yo sé que el Presidente llamó al diálogo, y sé también que la intención del Ejecutivo y la Asamblea Nacional es investigar y discutir de forma responsable la propuesta de amnistía hecha por los partidos de derecha, antes de tomar decisiones filantrópicas y de reconciliación injustificada. No creo que se vaya a propiciar nuevamente algún acto de impunidad por parte de los organismos del Estado, pero previendo que esto ocurra, pido revisar la  etimología (origen de la palabra) de "amnistía".

René Pérez, cantante del grupo puertorriqueño Calle 13, se ha ganado la admiración de muchos dentro de la Revolución Venezolana, por sus letras rebeldes; de hecho fue invitado al concierto del nacimiento de la CELAC. En su emblemática interpretación, "Latinoamérica", el rapero esgrime la siguiente frase, a nombre de la dignidad de los pueblos: "Operación Cóndor invadiendo mi nido, perdono pero nunca olvido". Amnistía: del griego oamnestia, significa "olvido".

Si el diálogo con la oposición venezolana compromete nuestra dignidad y nuestro sistema de justicia, pues muchos preferiremos volvernos mudos.

Twitter: @rafiiortega



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