Los únicos partidos que han existido por siempre en el mundo
En la revolución francesa, en 1789. Los líderes de la época, se agruparon en un parlamento, que llamaron “convención” donde se agrupaban todos. Espontáneamente se reunieron según las afinidades de sus ideas.: los que proponían la libertad, igualdad y fraternidad, se ubicaron en el lado izquierdo del salón y los que luchaban por impedir que cambiaran el sistema, que todo siguiera como siempre había sido. Según ellos “como Dios lo había dispuesto”, se colocaron en el lado derecho de la Asamblea.
Desde ese momento para referirse a la gente de ideología igualitaria los llamaban “los de izquierda” y a los otros, “los de derecha”. No está demás decir que ambos grupos siempre se han sentido muy orgullosos de pertenecer a el, y es bueno recordar que todo el mundo estaba cundido de monarquías e imperios. Apenas si había alguna experiencia primitiva de democracia en algunos puntos, como en Grecia, (los griegos conservaron la esclavitud como algo normal, aún sintiéndose demócratas) lo cual se veía como un experimento excéntrico, que nadie se imaginó, que con el tiempo, la democracia se abriría paso desplazando a los reyes y emperadores, a la vez que se perfeccionaría poco a poco hasta aspirar al comunismo.
Para ese momento prevalecía la ausencia total de las virtudes que proclamaban unos cuantos escritores visionarios, con gran sensibilidad humana, como fueron los enciclopedistas. Igualdad, fraternidad y libertad eran solo palabras de diccionario. La brecha entre pobres y ricos era brutal, Tanto los unos como los otros pensaban que esa era la forma natural de vida de los seres humanos, de acuerdo con los designios celestiales.
No es ninguna agudeza decir de qué lado estaba la poderosa iglesia. El hambre, el frío en esas latitudes y las enfermedades que diezmaban la sociedad era tan escandalosas que fue recogida por Víctor Hugo en ese monumento que se llama “Los Miserables”. La iglesia predicaba que la pobreza, mientras mas extrema era, acercaba mas a la vida eterna a la gente, hasta el punto de que se consideraba pecado pretender dejar de ser pobre.
La falta de recurso es implacable, es tan pertinaz y obsesiva como la muerte. (Frase tomada de Grace Metalius. Payton Place). La pobreza envilece tanto como la riqueza, convirtiendo al ser humano en un guiñapo.
En el momento actual que vivimos en Venezuela se debaten ferozmente ambas tendencias. Así como en el pasado francés, ambos se sienten orgullosos de lo que procuran. La ignorancia, cultivada tan diligentemente en los pobres, por la clase satisfecha ciega a los unos y a los otros. Así vemos la paradoja trágica, de pobres y medios dando la vida por el triunfo de los poderosos. Algunos jóvenes se sienten ufanos de que los llamen pitiyanquis, piensan que ser lacayos es algo bueno si es para tumbar a Chávez
La fuerza de las ideas socialistas, tan maravillosamente impulsadas por Chávez, ha contagiado y despertado a una mayoría muy notable en este país; pero el gigante mediático mundial, actuando a todo vapor y asesorado por gente muy talentosa que trabaja para el maligno, una vez mas con una gran destreza, producto de su uso durante siglos es un enemigo que subyuga a una buena parte del mundo. Acabamos de ver como los griegos votaron por sus verdugos, por esa cautela incrustado en sus mentes por siglos, que les confiere el temor a ser felices.
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