Cosas no Contadas

El Desnocido

Estaba leyendo un periódico prestado  -porque en realidad dejé de comprarlos- cuando de pronto se sentó un señor mayor al lado mío. Entre mi dije, será que no hay mas bancas en este parque sino donde estoy sentado?... Sacó un cigarrillo de su paltó lo encendió con dificultad por el viento que soplaba lo aspiro y me miro con curiosidad.

Que vainas lees –dijo con autoridad-

No se aun, lo preste para leer algo mientras abren la tienda –le respondí-

Sabes una cosa, yo no leo esa prensa enfermiza y carroñera de los emporios mediáticos privados –dijo con tono de desaprobación- eso no es periodismo. Lo único bueno que tienen esos pasquines son los clasificados, ni aun así dejan de ser basura.

Me causo gracia y reí con disimulo, pero en el fondo yo decía tiene razón este señor… le pregunte a que se debía tanta enfado,  por decir así, con los medios impresos.

No es enfado, sino que la gente tiene que darse cuenta de eso, que no solo son los medios impresos, también la televisión y la radio-me respondió-. Los que hacen las noticias no son libres… ahí no hay libertad de expresión. Frase empleada por algunas oficinas gringas llamadas ONG´s… El hecho esta en que ellos viven de los intereses económicos de la clase dominante, si se les puede llamara así… Pero como eso se acabo en este país, en que los medios eran los que ponían la pauta. Ahora les cuesta muy cuesta arriba que la gente les crea. Entonces los dueños, y quien sabe si en verdad son propietarios de esos circos, han desatado toda su furia contra un estado que les corto la vía respiratoria de los negocios a gran escala.

Te explico una cosa  -con tono catedrático prosiguió- en Latinoamérica los mandatarios eran elegidos con el consentimiento del Norte, en otras palabras por la Casa Blanca. Tenían que seguir la línea y si no lo hacían le aplicaban la receta.

Y eso de la receta que es? –pregunte-

Pues hijo un Golpe de Estado… con eso lo arreglaban todo y decían llego la democracia para ahora sí servirle al pueblo... Y al que no les convino los desterraban y lo juzgaban. Ahí jugaba, juega y jugará el poder mediático… Lo que se ha hecho en este país no lo ha logrado otro país en el planeta… darle al pueblo los medios, para que ellos hagan de verdad sus propias noticias, como dicen, dejaron de ser invisibles… Por eso es la lloradera y la invención de noticias sin fundamento, hasta eso han llegado de mentir sobre cosas inauditas.

Digamos que esa gente perdió el control… ya no pueden ser los monopolios de antes, la brecha ahora es mínima. Por eso tienen un precandidato producto de los laboratorios de medios… a ver que sí  con ese tipo pueden obtener el poder. Pero lo veo difícil, muy difícil.

Otro ejemplo te doy con el caso de las encuestas… antes ellos manejaban a su antojo lo que les convenía. Los números arrojaban cifras maquilladas sobre la preferencia de su candidato y de Washington. La empresas de maletín habían por montón al igual con los asesores de medios. Todo era un carnaval donde se inyectaba mucho billete verde. Estaban en juego muchos intereses desde las transnacionales, multinacionales, grandes empresarios hasta la supervivencia de algún político corrupto.

Usted cree que eso se acabo? –objete-

No, no crea que se acabado…  eso seria una gran mentira –siguió explicándome- La revolución empieza por el individuo y sino hay conciencia revolucionaria es difícil transitar por sus senderos…  Por eso el estado ha creado una estructura para el debate de ideas, eso les duelo mucho a los del imperio. Un pueblo culto y crítico  es el peor enemigo de ellos… Bueno amigo, ahora me voy y gracias por haberme oído un rato.

Aquel desconocido se despidió con un apretón de manos y quedó en mi una lluvia de preguntas que solo yo mismo me las tenia que responder. Quise llamarlo pero se perdió entre la gente que caminaba por el parque. Ay! –dije- se me había olvidado que esperaba que abrieran la tienda.

susenoria@hotmail.com



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Marco Pedraza


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