Resulta paradójica la relación que ha establecido Nicolás Maduro con el imperio estadounidense que no cesa de arremeter de diversas maneras contra el proceso revolucionario venezolano para afectar los logros del mismo.
En el 2014, cuando el imperio seguía presionando al proceso y la banca internacional exigía el pago de la deuda (Maduro ha podido plantear una moratoria), esta fue su respuesta, según la agencia Reuters: El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo el miércoles que su administración está preparada para cumplir con sus compromisos de deuda externa en momentos en que se acerca la fecha de pago de poco más de 5.000 millones de dólares en vencimientos de títulos valores del país petrolero. La deuda venezolana ha tenido una racha de malos resultados en las jornadas recientes dada la inquietud de los inversores ante la escasez de dólares en el país, que ha empeorado sus variables económicas y agudizado el desabastecimiento de productos básicos. "Estamos listos para cumplir nuestros compromisos internacionales completos. Hasta el último dólar", dijo Maduro. https://www.reuters.com/article/business/venezuela-tiene-la-capacidad-de-honrar-su-deuda-internacional-maduro-idUSL1N0RC09K/.
Luego, en el 2018, en plena crisis generada tanto por las acciones terroristas de la derecha venezolana durante las llamadas, como por los efectos del Decreto de Obama en el 2015 declarando a Venezuela como una amenaza inusual y extraordinaria contra la seguridad de los Estados Unidos y aplicar sanciones contra la economía y los gobernantes, la réplica del gobierno, fue la de pagar 1.400 millones de dólares, tal como se lee en el siguiente reportaje:
Milton D’LeónCaracas. Miércoles 31 de octubre de 2018. “El gobierno de Venezuela pagó casi 1.400 millones de dólares los últimos días por deuda externa e indemnizaciones en plena catástrofe económica. El gobierno desembolsó el pasado jueves 435 millones de dólares y la entrega de materia prima de PDVSA a ConocoPhillips como parte de la primera cuota de un acuerdo para cumplir con un laudo arbitral que otorgó 2.000 millones de dólares a dicha petrolera y la que espera recibir también 155 millones de dólares que faltan del primer pago de PDVSA este trimestre. Y este martes se dio a conocer que habría concretado otro desembolso por 949 millones de dólares para cancelar el cupón y amortización de 25% de capital del bono 2020 emitido por PDVSA. Todo esto mientras la catástrofe económica y social arrasa en el país y las calamidades del pueblo aumentan”. Eso no evitó que la burguesía venezolana y el imperialismo norteamericano intensificaran sus medidas de presión y asfixia hacia la sociedad venezolana, inerme con las medidas que toma regularmente el gobierno a favor de los sectores privilegiados internacionales y nacionales y en detrimento de la clase trabajadora. Recordemos que a partir del 2018 se vivió en Venezuela una de las peores crisis de desabastecimiento, escasez, encarecimiento de todos los productos, escasez del dinero en efectivo, ataques a la moneda venezolana e informáticos llevando a la nación y al pueblo a una situación de caotización generalizada por las enormes colas que había que hacer para obtener los productos necesarios de la dieta básica.
En el 2019, el articulista Eric Toussaint planteaba que la respuesta del gobierno de Maduro ante las políticas agresivas de Trump (primer gobierno de ese sujeto), una de las cuales era apoyar al gobierno fraudulento de Guaidó e intensificar las sanciones y el bloqueo contra el pueblo venezolano, debían ser, entre otras: “Frente a las medidas agresivas tomadas por las potencias extranjeras que no dudan en apropiarse de los bienes de la República de Venezuela depositados en el extranjero y necesarios para mantener intercambios comerciales, el gobierno debe 1.- Declarar una suspensión del pago de la deuda externa.
Agreguemos que el derecho internacional permite a un país confrontado a una situación de urgencia, por ejemplo una crisis humanitaria, a decretar una moratoria unilateral del pago de la deuda (sin acumulación de intereses o de penalidades por retraso). Si, además, ese gobierno está confrontado a medidas del tipo de las tomadas por Washington sin ningún acuerdo con las Naciones Unidas, un acto unilateral de suspensión del pago de la deuda es aún más justificado. 2.- En lugar de utilizar la escasa reserva de divisas en el pago de la deuda, el gobierno las debe utilizar para satisfacer las necesidades básicas de la población. Como lo afirma el artículo: «La salud y la alimentación del pueblo deben tener prioridad sobre el pago de la deuda externa»….
Sin embargo, el gobierno de Nicolás Maduro mantuvo su posición de pagar la deuda externa, a pesar de los enormes sacrificios que pasaba el pueblo venezolano.
El gobierno venezolano (antes chavista y revolucionario, hoy procapitalista y reaccionario) ha tenido una conducta contradictoria respecto al capitalismo y al imperialismo) de lo cual ya habíamos advertido previamente: https://www.aporrea.org/actualidad/a338345.html.
Ahora, en este 2025, en medio de otra atroz arremetida imperial donde se da el absurdo, la paradoja que:
1.-Mientras Estados Unidos nos roba aviones, barcos llenos de petróleo,
2.- Se apropian de la gran empresa CITGO y de miles de millones de dólares en activos en el extranjero,
3.- Persigue todo tipo de embarcaciones energéticas,
4.- bloquea por aire y por mar a nuestra Patria,
5.- Nos sanciona y pone precio a la cabeza de los gobernantes venezolanos y los califica como integrantes de grupos terroristas y del narcotráfico internacional,
6.- Han atacado más de 30 lanchas entre el Caribe y el Pacífico y asesinado a más de un centenar de personas en ejecuciones extrajudiciales.
7.- Mantienen intactas las más de 1.000 sanciones o Medidas Coercitivas Unilaterales;
Entonces la respuesta del gobierno (aparte de marchas, concentraciones, comunicados, seguir derrochando recursos públicos adelantando navidades, rumba, rumba y más rumba en una incoherencia digna de Ionesco, el del teatro del absurdo y movilizar a la milicia) nosotros le enviamos barcos de la Chevrón llenos de petróleo con todo un despliegue periodístico. Es así como la vicepresidenta Delcy Rodríguez anuncia: Zarpó de Venezuela buque de la compañía Chevrón con petróleo hacia Estados Unidos. En la embarcación de nombre “Canopus Voyager” se enviaron 500.000 barriles de petróleo y Delcy lo informa como si fuera un triunfo: “Venezuela siempre ha sido y seguirá siendo respetuosa de la legalidad nacional e internacional. Nada ni nadie detendrá a nuestra patria en su camino de avance y victoria”. https://www.telesurtv.net/venezuela-buque-chevron-petroleo-eeuu/. Extraña victoria esta.
Pero para más INRI (como decía Cabrujas), el mismo día Nicolás maduro también declaró exultante: “Nosotros somos gente seria, cuando firmamos un contrato, de acuerdo a la Constitución y la ley, eso se cumple, llueva, truene o relampaguee, como está pasando con Chevrón. ¡Llueva, truene y relampaguee!”, dijo Maduro durante por el canal estatal VTV. “Más allá de los conflictos circunstanciales, momentáneos, que podamos tener con la administración, con Chevrón se cumple a rajatabla el contrato. Somos gente seria, porque somos gente digna”.
Capciosamente, un analista expone que desde una óptica estratégica, esto equivale a anunciar públicamente el fortalecimiento del aparato económico del adversario, oxigenándolo con un recurso energético que, además, no es efectivamente pagado. Desde la teoría militar y de la disuasión, resulta difícil interpretar esta conducta como una maniobra racional. O bien estaríamos presenciando una conducción político-militar de supuesta genialidad, cuyas lógicas aún no son evidentes, o asistimos a una estrategia de subordinación, basada en la concesión sistemática de ventajas al agresor con la expectativa de obtener tolerancia política, indulgencia estratégica o simple supervivencia de los gobernantes.
En etapas previas, el chavismo sostuvo reiteradamente que la suspensión del suministro de hidrocarburos a Estados Unidos sería utilizada como arma de presión estratégica ante cualquier agresión directa. Bajo esa narrativa, la sola presencia de un buque de guerra estadounidense en aguas cercanas al territorio nacional habría bastado para activar un embargo energético con impacto significativo sobre la mayor economía consumidora de hidrocarburos del planeta. En términos de guerra económica, se trataba de un instrumento clásico de coerción. Lo que hoy queda en evidencia es que la estrategia real de gobierno no responde a criterios de disuasión ni de confrontación asimétrica, sino a una lógica de cesión total. En lugar de imponer costos al adversario, opta por transferirle recursos estratégicos y márgenes de maniobra, con la esperanza de que el poder hegemónico —en este caso, la administración Trump— les permita continuar ejerciendo el control interno sin restricciones.
¿No es eso COLABORAR CON EL ENEMIGO O TRAICIONAR LOS PRINCIPIOS antiimperialistas de los cuales tanto se hace gala? Sobre todo, desde el programa de Diosdado Cabello y el ya tradicional discurso de Chávez en la Avenida Bolívar cuando hablaba de las montañas, los ríos, el pueblo y los cojones que bastantes hay aquí. Nicolás y Delcy ahora dicen, en contrario: “¡¡Bastante petróleo que hay aquí, Trump!!”. un territorio funcional a su supervivencia política, pero crecientemente subordinado a intereses externos, así en el discuros hacia afeura se diga lo contrario.
O es que el gobierno está tan ávido de recursos que no nos importa a quien se le venda como manifestación de un pragmatismo ramplón. Es otra gran contradicción del gobierno y de Maduro. DEFINITIVAMENTE, ES UNA RELACIÓN MASOQUISTA. Como decía la canción de “Trigo Limpio” en uno de sus versos aplicables a esta actitud del gobierno venezolano respecto al imperio:
“Tus manos son dos cadenas, mi placer y mi agonía
Con una me das cariño, con la otra me dominas
Prefiero sentir la espuela que me hincas cada día
A ser la flor que en un vaso olvidaste en una esquina”
REITERAMOS, EN SÍNTESIS: ¿Es esto alta política, "real politik", traición al pueblo, o pendejada política?
Ante esto debemos decir: ¡¡Basta de entreguismo, de claudicación de sumisión y asumamos el pensamiento y el accionar verdaderamente antiimperialista de Bolívar, del Ché y de Chávez.
(*) Ernesto “Che” Guevara. 1964. Discurso pronunciado por Ernesto Che Guevara en la inauguración combinado industrial de Santiago de Cuba. https://cubarte.cult.cu/centro-che-cuba/no-se-puede-confiar-en-el-imperialismo-ni-tantito-asi-nada/.