Guerra Biológica y Plan de la Patria de Venezuela 2025–2031. 7 Transformaciones y 5 Dimensiones

En Abya Yala, la salud mental debe dejar de ser un asunto singular y exclusivamente clínico para convertirse en un campo de disputa social, política y geopolítica. En Venezuela, la Ley Orgánica Plan de la Patria 2025–2031, formulado como Plan de las 7 Transformaciones (7T), busca articular soberanía, bienestar y reconstrucción institucional con un enfoque territorial y decolonial socialista, como Derechos de la Ciudad (2T), Fortalecer el Poder Popular (5T) y desarrollar una Geopolítica de la Paz y la Integración (7T), en el contexto de una Patria asediada y sometida desde hace una década a una “Guerra asímétrica e híbrida”. 

Comprender el Plan de la Patria 2025 – 2031 desde esta perspectiva, implica un debate nacional que exige leerla y debatir a fondo, temas y categorías como: biopolítica y necropolítica, eugenesia, guerra biológica y la urgencia de una Salud Mental Colectiva Decolonial que coloque a los territorios: comunas, consejos comunales, Áreas de Salud Integral Comunitarias (ASUC), ciudades y zonas rurales, como nivel básico de decisión y cuidado integrales de la vida, salud y naturaleza.

De la clínica al territorio: Salud Mental Colectiva Decolonial

La Salud Mental Colectiva Decolonial tiene el propósito de sanar memorias históricas de violencia, sufrimiento, injusticias, desigualdades y exclusiones mediante el racismo, explotación, extractivismo, patriarcado; es decir, malestares humanos colectivos, desplazar el foco de atención desde el “trastorno individual” hacia la determinación social de la vida y los procesos de salud/enfermedad territoriales. Organismos como la OPS/OMS desde la última década del siglo XX sostienen que la promoción de la salud mental y la prevención de los trastornos mentales deben migrar del hospital psiquiátrico a lo comunitario y familiar, con poco éxito hasta hoy.

Es un giro que demanda equipos de salud territoriales móviles, a través de la integración intersectorial e interinstitucional de salud, alimentación, educación, trabajo, cultura, recreación y deporte, vivienda, lo ecoambiental, lo militar y el sector privado, para garantizar corresponsablemente, la vida y la salud como derechos sociales, según el mandato constitucional.

Ese desplazamiento es, también, decolonial: reconocer al otro, sin subalternizarlo e inferiorizarlo, escucha y encuentro entre saberes ancestrales y conocimientos académicos territoriales, que promueve reparación histórica simbólica y refuerce la soberanía, seguridad y defensa nacional territorial (3T), históricamente conquistadas, colonizadas y colonializadas en la actualidad. La huella de Frantz Fanon, psiquiatra y referente anticolonial, es ineludible: mostrar cómo el orden colonial y la colonialidad produce psicopatologías sociales y subjetivas como falsa conciencia (Marx & Engels), cómo la emancipación y liberación pasa por reconstruir identidad personal y colectiva, dignidad y organización popular.

Biopolítica, necropolítica y políticas tanáticas

Desde Michel Foucault, la biopolítica describe cómo el “poder moderno gestiona la vida y la salud” administrando pueblos, cuerpos y procesos territoriales nocivos a la vida y la salud. Esta lógica racional, se degenera y deslizarse hacia la necropolítica según Achille Mbembe, cuando el poder expone a pueblos a la muerte o a la “muerte lenta” mediante abandono, exclusión, violencia estructural, medidas coercitivas unilaterales, todos estos componentes son expresión de guerras asimétricas e híbridas, empujando a pueblos y gobiernos a forzar  las llamadas políticas públicas tanáticas, como la cara oculta del Estado colonial y colonializado, mediante  normalización de cartografías sociales de zonas de sacrificio, criminalización de la pobreza, desmantelar redes de cuidado integrales territoriales, con impactos directos en la Salud Mental Colectiva Decolonial como el encuentro intersubjetivo del Ser, Amar y Tener-Estar. 

En Abya Yala, el lenguaje necropolítico aparece cuando bloqueos económicos o comerciales, medidas coercitivas unilaterales, colapsos de servicios públicos o violencias armadas, erosionan la vida cotidiana: aumentan el trauma, la ansiedad, el sufrimiento físico y emocional, la desconfianza, se debilitan los vínculos afectivos que sostienen la resiliencia colectiva. De ahí que una Política Pública de Salud Mental Colectiva Decolonial territorial, es una Política Pública de Soberanía Nacional y Defensa Integral (3T),

Guerra biológica y eugenesia: el reverso de la Salud Colectiva y de la Salud Mental Colectiva Decolonial

La guerra biológica y la eugenesia representan extremos de la instrumentalización de la vida y la salud. La guerra biológica, prohibida por la Convención sobre Armas Biológicas (CABT) desde 1975, plantea el uso de microorganismos y toxinas como armas; la eugenesia, históricamente asociada a proyectos de “mejora” de la población mediante exclusión y jerarquización de vidas. Aunque la CABT fija normas, las tensiones producidas por guerras asimétricas e híbridas continúan siendo un componente subjetivo fundamental de miedo, el sufrimiento emocional, estigmatización y daño psicosocial. Para la Salud Mental Colectiva Decolonial, ambos hechos, la guerra biológica y la eugenesia, importan no solo por su letalidad potencial, sino por su capacidad de desestructurar subjetividades, sentipensares, cuerpos y  territorios.

El Plan de la Patria 2025–2031. 7 Transformaciones, 5 Dimensiones

El gobierno venezolano enmarca el período 2025–2031 en el Plan de las 7 Transformaciones (7T): Economía, Derechos de la Ciudad, Seguridad y Defensa Integral, Protección Social, Fortalecimiento del Poder Popular, Ecosocialismo, Ciencia & Tecnología, Geopolítica de la Paz e Integración,  presentado como construcción corresponsable y colectiva del pueblo organizado en comunas, consejos comunales, territorios socialistas y otras formas de organización social, con una mirada “otra” dialéctica de “cinco dimensiones: económica, política, social, cultural-ética y espacial, ya formuladas en el anterior Plan de la Patria 2019 – 2025: ¿Qué significa esto para la Salud Mental Colectiva con enfoque territorial y decolonial?

1. Territorio como unidad de Gestión participativa corresponsable y de cuidados para garantizar la vida y la salud como derechos sociales constitucionales (Dimensión espacial/social). Impulsar redes territoriales promoción de vida y Salud Mental Colectiva, Prevención y Cuidados Integrales de Malestares Humanos Colectivos, articuladas con misiones sociales, escuelas, cultura, trabajo en cada consejo comunal y comuna; fortalecer los cuidados comunitarios  y dispositivos móviles con participación corresponsable del pueblo formado, organizado y movilizado territorialmente.

2. Soberanía, Seguridad y Defensa Integral (3T): Preparación sanitaria del pueblo en Monitoreo Estratégico Participativo en Salud Colectiva y Epidemiología Crítica de procesos territoriales biológicos nocivos, con formación científica y responsabilidad ético moral del pueblo participante, sin alarmismo, alineadas como defensa popular integral, frente a guerras biológicas posibles.

3. Economía para la formación, organización y movilización del pueblo en tiempos de contingencias y conflictos por guerra biológica (1T, 5T): Economía, Fortalecimiento del Poder Popular y Dimensión social. Invertir en Fortalecimiento del Poder Popular para la defensa y cuidados en Salud Mental Colectiva Decolonial en las 593 ASIC del país, no es inversión “blanda” es necesaria para: cerrar brechas que eviten la guerra biológica que produzca pérdidas económicas territoriales, caída de la productividad, aumento de morbilidad y mortalidad de la fuerza de trabajo y de población económicamente activa en los territorios.

4. Cultura y Dimensión cultural-ética: Programas de memoria y reparación simbólica, arte, rituales, historia oral, por duelos colectivos, violencia armada y estigmas, en clave de justicia social, línea coherente con la crítica anticolonial de Fanon.

5. Geopolítica de Paz y participación (7T y 5 Dimensiones). Consejos comunales, comunas y organizaciones territoriales de base con formación, organización, movilización y participación en la toma de decisiones en la planificación de Servicios territoriales de Salud Mental Colectiva Decolonial, presupuestos participativos y contraloría social de la institucionalidad pública de las ACIS.

6. Ecosocialismo, Ciencia & Tecnología (6T y 5 Dimensiones). La Salud Mental Colectiva Decolonial, es sensible a la desprotección y destrucción de la naturaleza, a la contaminación ambiental, desplazamientos y crisis climática. La planificación urbana y rural debe garantizar procesos territoriales seguros, saludables, con facilidades de movilidad, áreas verdes y acceso a fuentes de agua para consumo humano, agrícola y producción de alimentos.

7. Geopolítica del conocimiento, Ciencia & Tecnología (6 y 7T, 5 Dimensiones). Promover cooperación Sur–Sur en Salud Mental Colectiva Decolonial, intercambio de  modelos exitosos,  desinstitucionalización y Promoción de los Cuidados Integrales en las 593 ASIC. 

Reflexiones finales

• Utilizar el lenguaje de  Geopolítica, Seguridad y Defensa Integral por el poder constituido, institucionalidad pública y gobernar sin escuchar y revisar repensar y reimpulsar los saberes territoriales del pueblo, para el diseño e implantación de Políticas Públicas con participación popular, sustentadas en el Plan de la Patria 2025 – 2031. 7T. 

• Recentralizar las decisiones políticas, medicalizar malestares humanos colectivos y territoriales, sin tomar en cuenta la pluriversidad geográfica, demográfica y cultural de regiones y territorios

• Intrusismo político: Centralización burocrática, demagogia política, clientelismo partidista, cooptación partidista del poder popular, no escuchar la voz del pueblo, para la formulación de Planes, Programas y Proyectos que deben ser territorializados tomando en cuenta el Plan de la Patria 2025 – 2031. 7T, la pluriversidad, heterogenicidad geográfica, demográfica y cultural, de los territorios de las 593 ASIC existentes en el país.

• Oportunidades para enlazar 7T y 5 Dimensiones con metas medibles de Salud Mental Colectiva Decolonial, para lograr perfiles de salud/enfermedad y procesos epidemiológicos críticos territorializados, que permitan una planificación estratégica situacional, presupuestario, programación y proyectos ajustado a las distintas realidades de los ASIC, sustentadas en el Plan de la Patria 2025 – 2031. 7T.  que permitan la utilización eficaz, eficiente y efectiva de los recursos e inversión financiera en salud, que logre las transformaciones deseadas, evite el despilfarro, la malversación y la corrupción que hoy existe en el sector salud y sus otras complementaciones sectoriales.

• Integración y desempeño institucional intersectorial, interinstitucional, funcionamiento en redes de gestión, cuidados integrales, rehabilitación e investigación, mediante  encuentro, conversatorios e integración de conocimientos científicos y saberes populares territoriales, para lograr las transformaciones del Plan de la Patria 2025 – 2031. 7T.

• Cuánto del presupuesto territorial se asigna a Servicios de Salud Mental Colectiva Decolonial y Promoción de Salud y Cuidados Integrales y acordes con el Plan de la Patria 2025 – 2031. 7T.

• Cómo se articula la respuesta a procesos territoriales biológicos compatibles con una guerra biológica y la formación, organización y movilización del poder popular como actor protagónico de su vida, salud y defensa de su territorio. 

• Qué indicadores de desinstitucionalización se han construido de Salud Mental Colectiva Decolonial y los cuidados integrales a malestares humanos colectivos.

• Existen en las comunas y consejos comunales comités de memoria, arte y reparación para los cuidados integrales de malestares humanos colectivos. 

• Qué mecanismos de contraloría social y transparencia monitorean calidad y trato digno de la gestión territorial en salud y logros del Plan de la Patria 2025 – 2031. 7T.

• Qué avances hay en la gestión, implantación y  aplicación territorial del Plan de la Patria 2025 -2031. 7T en las 593 ASIC existentes en la Re