En las últimas amenazas de Trump a Venezuela, con acciones para atemorizar y meter miedo; están más bien dirigidos para distraer la atención hacia problemas medulares donde aparece Donald Trump en archivos vinculados con Jefferey Epstein condenado por delitos sexuales que involucraban a menores. De ahí que apela a situaciones presentadas en el 2019, en su primera presidencia. Eso de criminalizar al presidente Nicolas Maduro al incrementar la recompensa a 50 millones de dólares por su cabeza; tiene una direccionalidad, como es la de meter miedo al gobierno y al alto mando militar. DE ahí la contundencia y el fragor que utiliza la fiscal Pam Bont cuando ataca a Maduro, buscando afanosamente ocultar el fantasma de Epstein; Donde expresa sin el menor rubor, que dos aviones pertenecientes al Estado venezolano, que fueron robados en complicidad con Luis Abinader, presidente de Republica Republicana Dominicana y luego fueron entregados a Estados Unidos, era de propiedad de Maduro. Dentro de este estilo de acusaciones, pretenden involucrar al presidente Maduro con un Cartel de los Soles, cuando bien se sabe que una de las operaciones que lo ha caracterizado y a quienes no les ha dado cuartel es el ataque frontal contra las drogas. Hoy en medio de este escenario, aparece Marcos Rubio, se ha unido a este coro de atacantes gratuitos; lanzando la puñalada trapera de las drogas.
Si lanzamos la mirada al campo sancionatorio, emprendidas por Obama, luego primer Trump y después Biden; no quedan en el espacio otra sanción para aplicarlas a nuestro país. Si lanzamos la mirada a la economía, esta ha enderezado su rumbo, se aprecia un notable crecimiento
En la cumbre de Alaska donde se dieron cita Putin y Trump; saltó a la palestra pública, buscando protagonismo, un senador republicano, expresando a viva voz que “Maduro no pasa de diciembre” llamado Denis Moreno. Estos señalamientos de esta estirpe de funcionarios salen a veces con expresiones lapidarias, como lo dicho por el exsecretario de Estado Mike Pompeo, por allá en el 2019, en compañía del expresidente interino Juan Guaido; expresó que: “Maduro no dura mucho”.
Existe un informe de la ONU y la ONUDD ( OFICINAS DE LAS NACIONES UNIDAS CONTRA LA DROGA Y EL DELITO) que declara libre de cultivos de coca, marihuana y procesamiento de la coca a Venezuela. El epicentro, según lo señala el informe esta en Colombia, Ecuador, Peru y Bolivia. Donde Colombia con nueve bases militares gringas, registra el 67% de cultivos en el mundo de la hoja de la coca; mientras que los Estados Unidos se ubica como el país de mayor consumo de drogas y el principal destino de la cocaína. En ese pais la crisis se eleva a situaciones realmente irreversibles el consumo de fentanilo. Dice el informe que en el 2024 se reportaron 48.000 decesos a consecuencia de sobredosis. El crimen organizado actúa en EEUU por la puerta grande, sin mayores obstáculos, con sus consabidos lavados de capitales. Según la ONUDD, los crímenes se han incrementado. Además, el Pacifico colombiano y el Pacifico ecuatoriano es la gran vía del narcotráfico rumbo a Centroamérica, México, EEUU y Europa. Solo un 5% intenta pasar por Venezuela, que ha sido fuertemente controlada; pero aquí está el pero, a Venezuela pretenden criminalizarla en un campo donde no tiene ni arte, ni parte. En el informe para nada hace mención del Cartel de los Soles, que tanto se afinca la fiscal gringa Pam Bond. La misma Unión Europea menciona a Venezuela como corredor irrelevante en el trafico internacional