Marx y su familia vivieron toda su vida en la pobreza. La riqueza y la pobreza no fue un tema tratado solo en sus obras por Carlos Marx, sino también una experiencia vivida profundamente por él y su familia, por lo que el dinero que Friedrich Engels proporcionaba a Karl Marx fueron significativos y fundamentales para la supervivencia y el trabajo teórico y practico de Marx. Sin la ayuda financiera de Engels, la vida de Marx y su capacidad para escribir "El Capital" habrían sido considerablemente más difíciles, algunos dicen que imposible.
Karl Marx y su esposa Jenny von Westphalen tuvieron siete hijos, pero solo tres—Jenny Caroline, Laura y Eleanor llegaron a la edad adulta pues la familia Marx vivió largos periodos de extrema precariedad, especialmente durante su exilio en Londres. De hecho, varios de sus hijos murieron en la infancia por enfermedades agravadas por las condiciones de pobreza, y en al menos en un caso, no tenían dinero ni para el ataúd
Estas son algunas de las razones por las cuales la ayuda de Engels fue tan importante. Las hijas que sobrevivieron también enfrentaron vidas determinadas por dificultades económicas y tragedias personales. Eleanor, por ejemplo, fue una destacada activista socialista y feminista, pero terminó su vida en circunstancias trágicas, afectada por traiciones amorosas y tensiones emocionales.
El apoyo económico que Friedrich Engels brindó fue sostenido y decisivo para Karl Marx y lo atendió durante más de dos décadas, convirtiéndose en el sostén económico que permitió a Marx dedicarse plenamente a su labor intelectual. Desde mediados de la década de 1850, Engels, quien trabajaba en la empresa textil de su familia en Mánchester, destinó una parte considerable de sus ingresos para cubrir las necesidades básicas de Marx y su familia, quienes vivían en Londres en condiciones precarias.
Este respaldo no fue esporádico ni simbólico: Engels asumió con disciplina y compromiso el rol de mecenas revolucionario. Se estima que entre 1850 y 1870, Engels transfirió regularmente sumas que permitieron a Marx pagar alquileres, deudas, alimentación, educación de sus hijas y, sobre todo, continuar su investigación sin la presión de buscar ingresos. En una carta de 1869, Engels incluso le comunica a Marx que ha dispuesto una pensión vitalicia para él, asegurando su manutención hasta el final de sus días.
Estos fondos de Engels cubrían necesidades básicas como comida, vivienda y ropa, lo que como ya dijimos, permitió a Marx dedicarse a sus investigaciones y escritura, especialmente en su obra principal, "El Capital". Sin la presión constante de la necesidad económica, Marx pudo concentrarse en sus ideas y desarrollar su teoría, la cual sin lugar a dudas cambió al mundo y a nosotros.
Además del apoyo financiero, Engels fue un amigo y colaborador intelectual esencial para Marx y mantenían un compromiso politico total, profundo, inquebrantable que les mantuvo juntos hasta la muerte. Inclusive Engels le ayudó a encontrar editores y a preparar sus manuscritos. Y destaca la humildad en esa relación de amistad y compañerismo, que se manifiesta en la expresión de Engels, persona de gran proyección intelectual, que dijo que él ante las ideas de Marx siempre le correspondió ser el segundo violín.
Para finalizar utilizaré una frase que no me pertenece; sin Engels, Marx no habría sido el mismo. Y sin Marx, Engels tampoco. Fueron, en el sentido más profundo, una unidad dialéctica.