Pareciera que el mundo está a punto de ser controlado por un mentiroso contumaz, sin que haya organización internacional que le ponga freno a sus ambiciones desmedidas.
Las últimas joyas de su alucinada mente, es que Venezuela, le ha robado petróleo y territorio a los Estados Unidos, sin poder presentar la mínima prueba de esa falsedad, pero con ellas justifica el crimen y la intervención militar.
Hasta por los poros le brota a Donald Trump la ambición de apoderarse del petróleo venezolano y sus riquezas naturales, expresándolo a los cuatro vientos, cayéndosele estrepitosamente los pretextos que inicialmente utilizó para intentar justificar ante su pueblo y el mundo sus agresiones contra la República de Venezuela.
Supuestamente para contener el flujo de drogas hacia su sociedad adicta, fue el pretexto inicial.
Pero lo inicio enviando acorazados y marines al Caribe, precisamente a la zona adyacente a Venezuela, cuando todos los estudios especializados y mapeos sobre el tráfico de droga lo ubicaban hacia la zona del pacífico.
¿Error? Ni lo piensen, la jugada, poco a poco se fue aclarando, el verdadero objetivo era Venezuela, país donde no solo pretende cambiar de gobierno, por uno complaciente a sus intereses, sino, apoderarse del Petróleo y las riquezas naturales de nuestro país, que requieren con urgencia para subsanar su maltrecha economía (Ya puede apreciarse por las redes miles de familias haciendo cola para recibir alimentos gratuitos, cosa que criticaban y hasta se burlaban de otros).
El pretexto de la lucha contra las drogas se les desmoronó y eso fue demostrado por analistas internacionales que abordaron el tema.
La guinda que puso al descubierto la farsa trama de lucha contra las drogas, fue el indulto al ex presidente Hernández, condenado y acusado por los propios tribunales de los Estados Unidos de introducir 500 kilogramos de Cocaína, a los Estados Unidos:
"El ex presidente hondureño Juan Orlando Hernández recibió este miércoles una condena de 45 años de prisión por delitos de narcotráfico en Estados Unidos".
Con esta medida, cuestionada interna e internacionalmente, demostró Trump, que su lucha contra las drogas en pura falsedad y que para él, sus amigos, independientemente que sean narcotraficantes o delincuentes son sus amigos.
Así se desvaneció frente a sus propias narices que el bloqueo contra Venezuela, no era por contener las drogas, sino, su propósito oculto. Cambiar de gobierno en Venezuela, por uno que le sea complaciente y robar el petróleo y los recursos naturales de nuestro país.
Fracasado y desenmascarado, en medio de sus delirios de grandeza y ambición, ha declarado a través de sus propias redes que:
"El presidente Donald Trump designa al régimen de Nicolás Maduro como una organización terrorista. Señala que Venezuela está totalmente rodeada y que Maduro debe devolver todo el petróleo, territorio y otros activos que le han robado a EEUU"
Tamaña ridiculez no la puede justificar ni ante su propio pueblo ni en ninguna instancia internacional.
Con ningún hecho, ni documento alguno, puede demostrar este alucinado presidente estadounidense que Venezuela, le ha robado petróleo y territorio a los Estados Unidos.
Este nuevo Few New, a que nos tienen acostumbrados, no podrán imponerlo sus poderosos medios de comunicación a la opinión pública internacional, ni siquiera aplicando la metodología , de repetir sostenidamente una mentira hasta convertirla en verdad(Joseph Goebbels "una mentira mil veces dicha se convierte en verdad").
Todo lo contario se han llevado a precio de gallina flacas, billones de barriles de petróleo de Venezuela, a través de la historia.
La (IA), no los resume de la siguiente manera:
"Estados Unidos ha importado enormes volúmenes de petróleo de Venezuela a lo largo de la historia, siendo uno de sus principales proveedores, especialmente en la década de 1970 y recientemente con aumentos significativos desde 2023-2024 tras flexibilizaciones de sanciones, con cifras que han fluctuado entre cientos de miles de barriles diarios (bpd) y superando los 8 millones de barriles en un solo mes (como en agosto 2024), aunque no hay una cifra histórica total simple, sí se sabe que ha sido una relación crucial, con el crudo venezolano siendo vital para sus refinerías".
Y no sólo es petróleo, está documentado que con el Asfalto venezolana, se repavimentaron las calles de New York
"Lago de asfalto de Guanoco, Venezuela, explotado históricamente por la New York & Bermúdez Company (una filial de General Asphalt Company).
¿Y cuál es el territorio que Venezuela, robó a los Estados Unidos y que debe devolver?
Esta es otra mentira, del tamaño del cielo, sólo elucubrada por una mente enferma como la de Donald Trump:
"Recientemente, la jefa de gabinete de Donald Trump, Susie Wiles, declaró a
Vanity Fair que Trump tiene una "personalidad de alcohólico", explicando que opera con una creencia desmesurada en sus capacidades, similar a la que ella observó en alcohólicos funcionales"
Vean a lo que nos enfrentamos, a una persona capaz de inventar las más descabelladas mentiras para justificar sus ansias de grandeza y dominio.
Ni Rusia, Ni China Ni la Europa, ahora obediente a los intereses estadounidenses, están a salvo de caer en las redes de mentiras, de este mitómano, con aires de reyezuelo que hoy, dirige los Estados Unidos.
El mundo atraviesa hoy por un grave riesgo. Una persona que no está en sus cabales, con delirios de grandeza, mentiroso contumaz, chantajea a toda la ha todo el mundo. El liderazgo mundial sensato, si lo hay, debería considerar con toda seriedad y entereza estos graves hechos y promover un frente común en defensa de toda la humanidad, hoy gravemente amenazada