WASHINGTON, 5 de septiembre de 2025, — El secretario de Defensa, Pete Hegseth, aprobó el envío de hasta 600 abogados militares al Departamento de Justicia para que actúen como jueces temporales de inmigración, según un memorando al que tuvo acceso Prensa Asociada.com,
Las fuerzas armadas comenzarán a enviar grupos de 150 abogados, tanto militares como civiles, al Departamento de Justicia "tan pronto como sea posible", y las fuerzas armadas deberían tener la primera ronda de personas identificadas para la próxima semana, según el memorando del 27 de agosto.
Esta iniciativa surge a medida que el gobierno de Trump recurre con mayor frecuencia a las fuerzas armadas en su lucha contra la inmigración ilegal mediante el aumento de arrestos y deportaciones.
Su creciente papel en esta iniciativa incluye tropas que patrullan la frontera entre Estados Unidos y México, el envío de miembros de la Guardia Nacional a ciudades estadounidenses para apoyar las medidas de control migratorio, el alojamiento en bases militares de personas en espera de deportación y el uso de aeronaves militares para llevar a cabo las deportaciones.
El enfoque de la administración en la inmigración ilegal ha aumentado la presión sobre los tribunales de inmigración, que ya lidiaban con una enorme acumulación de aproximadamente 3,5 millones de casos, que se ha disparado en los últimos años.
Una organización de abogados de inmigración calificó la nueva directiva como una medida "destructiva" destinada a debilitar a los tribunales.
Numerosos jueces de inmigración han sido despedidos.
Al mismo tiempo, más de 100 jueces de inmigración han sido despedidos o han renunciado voluntariamente tras aceptar renuncias diferidas ofrecidas por la administración Trump, según su sindicato. En la ronda más reciente de despidos, la Federación Internacional de Ingenieros Profesionales y Técnicos informó en julio que al menos 17 jueces de inmigración habían sido despedidos "sin causa" en tribunales de todo el país.
Esto ha dejado a unos 600 jueces de inmigración, según cifras sindicales, lo que significa que la medida del Pentágono duplicaría sus filas.
El Departamento de Justicia, que supervisa los tribunales de inmigración, solicitó la asistencia del Departamento de Defensa, según el memorando enviado por el secretario ejecutivo del Pentágono a su homólogo del Departamento de Justicia. Las funciones de los abogados militares como jueces de inmigración no durarán inicialmente más de 179 días, pero podrán renovarse, indicó.