El gobierno de España está hundiéndose cada día más y pierde credibilidad política mundial luego de observar la posición con respecto al tema de sus relaciones con la República Bolivariana de Venezuela.
Mientras sus máximas autoridades avalan que ese país sea escondite de sujetos prófugos de la justicia venezolana como Antonio Ledezma, Leopoldo López y ahora Edmundo Gonzáles Urrutia, contradictoriamente uno de los más pesados cargos políticos, como lo es el Ministro de Asuntos Exteriores español asegura que Venezuela es un país soberano y su gobierno "Nada tiene que comentar".
En esta oportunidad el Ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares aseguró que respeta la "decisión soberana" de Venezuela al convocar al embajador español en Caracas y llamar a consultas a su representante diplomática en Madrid. Esto supone un punto de inflexión en la complicada e incoherente política española. Además Albares se abstuvo de calificar al gobierno venezolano como "dictadura", tal como si lo hizo la ministra de Defensa Margarita Robles.
Esta última funcionaria ofreció declaraciones que profundizaron la crisis diplomática que viven ambas naciones luego que la ministra Robles emitiera críticas y calificativos con respecto a los asuntos exclusivos de los venezolanos. La respuesta venezolana no se hizo esperar y el canciller bolivariano llamó a consultas a su representante en el país europeo.
También el Ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares está muy claro y asegura a la prensa española que: "Convocar a un embajador y llamar a consulta, resulta decisión soberana de cada Estado, y por tanto no hay nada que comentar". Al mismo tiempo afirmó el ministro Albares que en su gobierno hay esfuerzos para "tener las mejores relaciones posibles con el pueblo hermano de Venezuela, del que el pueblo español se siente tremendamente cercano", agregó.