Un verdadero acuerdo

Se llegó al momento que la Casa Blanca y el gobierno Colombiano esquivaron tanto, pero la presión internacional y la de los propios familiares de los secuestrados pudieron más, claro todo comienza a tomar forma cuando el propio Uribe Vélez muy en contra de la orden de su amo Bush aceptó la solicitud hecha por los familiares y la propia guerrilla de nombrar a la Senadora Piedad Córdoba como mediadora para lograr un acuerdo humanitario con los grupos guerrilleros y el gobierno Colombiano.

El propio pueblo Colombiano sabe de las intenciones del Presidente Hugo Chávez y de su especialísimo interés en resolver lo mas pronto posible este gran problema que ya data de 60 años tras la muerte Jorge Eliécer Gaitan. No va a ser fácil, pero las intenciones sobran y ya el Comandante Raúl reyes portavoz de las FARC y otros del ELN han dicho que ven con buenos ojos y están dispuestos a colaborar para lograr el acuerdo con un vocero para los dos sectores como el presidente venezolano Hugo Chávez.

La reunión efectuada la semana pasada en Miraflores con el propio Chávez y los familiares de los secuestrados, canalizada esta por Piedad Córdoba ha servido como el inicio para esta gran cruzada por la vida y por la paz, que debe tener un fin satisfactorio para todas las partes donde el gran beneficiado sea el pueblo Colombiano. Claro es necesario que todos pongan de sus partes, que la guerrilla colabore y deje a un lado algunas acciones por un periodo de tiempo como muestra de su disposición, y que el gobierno deje a un lado la sumisión a los EEUU y coloque como principal interés el querer llegar a una solución sin la intromisión norteamericana disfrazada bajo el “Plan Colombia”.

Hace ya algunos años el Comandante Fidel Castro jugó un papel importantísimo en la búsqueda del mismo acuerdo pero pudieron mas las pretensiones Yankees y la oligarquía colombiana que el propio pueblo de Nariño y tan adorado por nuestro libertador Simón Bolívar; pero hoy tiene que ser diferente y no solo para lograr un acuerdo, sino para acabar con el gran negocio de la droga, que los paramilitares dejen de recibir financiamiento del gobierno, que se garantice la seguridad al colombiano, que hayan mayores posibilidades de desarrollo para evitar que hayan tantos refugiados en países hermanos como Venezuela, Brasil y Ecuador por citar algunos, es decir, un acuerdo general que garanticen el desarrollo y la convivencia de todos los sectores.

Esperaremos a ver que pasa, pero estamos seguros que Colombia no aguanta un tiempo mas la división en la cual se encuentra sumergida bajo la pantalla de un gobierno electo, cuando en verdad esta carcomiéndose por dentro y viviendo bajo otra realidad.

¡Oh gloria inmarcesible!

¡Oh jubilo inmortal!

¡En surco de dolores

El bien germina ya!

¡Viva Colombia!

¡Viva nuestra América!

msilva27@cantv.net



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Miguel Silva


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