Christian Pereira, Secretario General del Sindicato de Chrysler FCA

“FCA Venezuela, prefiere producir hambre a sus trabajadores antes que producir vehículos”

Christian Pereira, Secretario General del Sindicato de Trabajadores  de FCA Chrysler Venezuela

Christian Pereira, Secretario General del Sindicato de Trabajadores de FCA Chrysler Venezuela

Credito: aporrea tvi

El viernes 10 de febrero, los trabajadores de la ensambladora de vehículos Jeep, Chrysler y Dodge, ubicada en la zona industrial norte de la ciudad de Valencia, amanecieron con la esperanza de que por lo menos apareciera en sus cuentas nómina el depósito de su pago semanal, que si así fuese, los recibirían como una señal de que la representación patronal comprendía que son sus trabajadores el principal recurso, capaz de acompañar, como lo ha demostrado durante estos últimos tres años de baja producción, a los más importantes desafíos para mantener más de un mil doscientos puestos de trabajo. Pero no fue así, y la trasnacional ensambladora de vehículos, a través de su gerencia, continuó con su actitud soberbia e inhumana y por segunda semana corrida, deja sin la posibilidad de que sus trabajadores y sus familiares puedan comer; así nos relató el Secretario General del Sindicato de Trabajadores de Chrysler de Venezuela Christian Pereira.

El dirigente automotriz continuó diciendo: “La verdadera guerra económica es la que sufre un trabajador cuando no tiene nada como comprar alimentos para llevar a casa, siendo una trasnacional que recibió más de un mil novecientos millones de dólares durante los años 2004 al 2012", "Estoy seguro,- prosiguió explicando Pereira -, esta corporación ha recibido ganancias proporcionalmente a su producción, más que en ninguna parte del planeta en estos 70 años que tiene de establecida en Venezuela. Sabiendo que estamos en una situación complicada, fundamentalmente por la caída de los precios del petróleo, le da la espalda al país y a sus trabajadores”

“Estamos reclamando que lo que nos paga FCA Venezuela son 10 mil bolívares semanales, que no alcanza para comprar una harina de maíz y un kilo de queso. Nos ha impuesto estos salarios de hambre, siendo que nuestra Convención Colectiva establece un ajuste salarial semestral de acuerdo al Índice Nacional de Precios al Consumidor INPC, pero este derecho lo están incumpliendo desde febrero de 2016. Son 18 meses que con mucha paciencia hemos estado esperando una propuesta satisfactoria para compensar este deterioro descomunal de nuestro salario, pero hasta ahora, sólo nos han dado evasivas, Y, ya, hemos dicho no aguantamos más. Sin embargo, la empresa para castigarnos por protestar, nos quita todo y nos deja en la calle sin nada a merced del hambre; FCA nos quiere obligar a trabajar y ensamblar 110 camionetas Grand Cherokee que venderán a 60 mil dólares y pagarnos menos de 3 dólares por la semana de trabajo”.

“Vamos a llevar esta lucha hasta donde tenga que llegar, los trabajadores no vamos a seguir pagando una crisis que no generamos, ya se están sumando los Sindicatos legítimos de las ensambladoras General Motors, Ford, Toyota, MMC, Chery, Encava, Civetchi, autopartistas como: Afinia, Tuboauto, entre otras, por una cruzada por nuestro derecho constitucional y humano a poder obtener un salario digno y suficiente” terminó Pereira, no sin dejar de solicitarnos que no perdamos de vista la lucha de los Trabajadores automotrices.



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