28 Mar. 2017.- Desde la Organización de Estados Americanos (OEA) factores imperiales promueven un golpe de Estado en Venezuela denunció el embajador venezolano ante este organismo, Samuel Moncada.
La denuncia la formuló en el Consejo Permanente de la OEA durante una sesión este martes para tratar "asuntos internos de Venezuela" efectuada sin el consentimiento de Venezuela (como lo estipula las normas del organismo) y en clara violación al principio de defensa a la soberanía de los países miembros del organismo.
“Con la realización de esta sesión se demostró que se ha consumado un acto de injerencia sin autorización de Venezuela. Están destruyendo el principio, la igualdad jurídica de los Estados y la defensa de la soberanía", denunció Moncada.
Los países promotores de realizarse la sesión (Belice, Guyana, Canadá, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay, Barbados, Bahamas, Santa Lucía y Jamaica) presentaron un documento previamente elaborado en el que trajeron a colación un argumento para justificar su acción: "la OEA es el principal foro para resolver los conflictos en el hemisferio", tal como lo planteó en su informe el secretario general de esta organización, Luis Almagro.
“Le agradezco a todos las naciones que han participado de manera constructiva con la mejor voluntad, pero rechazamos categórica y enérgicamente al grupo países que participaron en la realización de este comunicado que no tiene justificación legal en el seno de la OEA, más bien representa una violación del derecho internacional, por eso no los podemos reconocer con participantes de buena voluntad, porque ustedes con ese comunicado están promoviendo un golpe de Estado en el el país”, respondió Moncada tras la presentación del documento.
El diplomático venezolano lamentó que el gobierno estadounidense haya presionado a miembros de la OEA para emprender esta medida injerencista contra Venezuela. “Buena parte de lo que ha ocurrido aquí es por presiones. Si Estados Unidos quiere ayudar, que derogue el decreto de Barack Obama”, señaló.
Tras intervenir los representantes de los países miembros, la sesión culminó con el derecho de palabra del presidente del Consejo Permanente, Patrick Andrews, quien dijo que todas las intervenciones de las delegaciones serán incluidas en el acta final. Luego se levantó la sesión.
Al igual que en junio de 2016 (la primera sesión sobre Venezuela solicitada por Almagro para inmiscuirse en asuntos internos), esta vez tampoco hubo activación de Carta Democrática, ni hubo votación de los países miembros sobre el informe injerencista que Almagro presentó con antelación en el seno del Consejo Permanente, como amplio volumen mediático y una agresiva ofensiva diplomática emprendida desde Estados Unidos.
