30-09-13.-En Puerto Rico, los más acomodados y poderosos lo llamarían un incordio. Un tipo que no se ajusta, que siempre tiene un señalamiento o riposta, un tipo que no baila al compás que le toquen.
Y eso precisamente es su mayor fuente de orgullo. Igual que la maestría de un músico puede medirse por cuánto puede improvisar sin perderse en la melodía, por cuánto puede elevarse sin levantar los pies de la tierra, el Dr. Cornel West es un músico del intelecto, de la libertad, de la justicia. Y, como conocedor del poder libertador que tuvo para su raza la música, el jazz, el blues, West está siempre presto a enfrascarse en el diálogo que le permita chocar ideas para producir chispa, para producir ovaciones.
West nunca deja el escenario vacío.
Por eso en intervenciones que van desde la serie de películas The Matrix, hasta los ‘talk shows’ como el de Bill Maher en HBO, el profesor de Filosofía y Práctica Cristiana del Union Theological Seminary de Nueva York, West se ha convertido en uno de los intelectuales más conocidos no sólo en Estados Unidos sino en el Mundo.
Al abordar a West durante su visita a la Isla esta semana, NotiCel tomó una ruta distinta, y decidimos ser anfitriones de un encuentro entre West y la intelectualidad puertorriqueña que vive y suda el país, igual que West vive y suda el escenario en el que se desenvuelve. Así que cedimos nuestro espacio al antropólogo Dr. Gabriel de la Luz Rodríguez, profesor de la Facultad de Estudios Generales de la Universidad de Puerto Rico.
Las piezas sobre las cuales este trio, junto al Dr. Samuel Cruz, improvisó incluyeron el status de Puerto Rico, la estadidad, las posibilidades de la democracia en un mundo acaparado por intereses, y la lucha del individuo contra la catástrofe y la melancolía de la vida diaria.
Para el pueblo que vive y sufre la crisis política y económica que nos azota, West tuvo un mensaje directo, y que va a molestar a los acomodados: hay que tirarse a la calle, hay que arriesgar la libertad y la integridad física con el propósito de “que sus voces sean escuchadas en el proceso de toma de decisiones que moldean su destino”.
A continuación, reproducimos este diálogo.
Gabriel De La Luz Rodríguez: Frecuentemente usted se describe como un ‘bluesman’ de la mente, y yo sé que para usted el blues es una manera de expresar el sentido tragicómico de la vida. ¿En qué formas sus vivencias como profesor y como activista dan testimonio de eso?
Cornel West: Una es que hay que mantener el pulso en varias formas de catástrofe, porque el blues es bregar con esa intersección de lo catastrófico con lo melancólico; y en cómo se mantiene suficiente distancia de lo melancólico de manera tal que no te sientas paralizado o debilitado. Cómo se confronta lo catastrófico de manera tal que no te resignas completamente. O tener una ausencia de resignación que te mantiene continuamente luchando, combatiendo, tratando de prevalecer, y eso puede ser individual, muchas veces el blues es individual, ‘mi chica se fue’, ‘mi papacito no me busca’, ¿no? Y así sucesivamente, a veces es estructural en términos del poder imperial, en términos del poder económico, y poder político, y varias formas de opresión y explotación. Así que como intelectual tú dices, soy primero y por encima de todo un bluesman porque quiero ser cándido sobre mis luchas con lo catastrófico y lo melancólico. En la academia uno pregunta, ok, ¿está la academia abierta a bregar con estos temas? ¿O está la academia demasiado acomodada, demasiado estrecha en los paradigmas que usa para no tener que afrontar el Imperio, la supremacía blanca, la supremacía masculina, y demás.
GDLLR: ¿Así que eso ata con sus nociones sobre la democracia profunda?
CW: Absolutamente, absolutamente. Porque usualmente aquellos que pagan el precio de las catástrofes sociales son los débiles y vulnerables. Y como testigo cristiano también: es un asunto de los menos de estos dos, de los débiles y vulnerables. Pero eso acaba siendo la gente pobre, la gente trabajadora, los niños, los envejecientes, los discapacitados, y así sucesivamente.
GDLLR: Uno de sus queridos mentores, el profesor Sheldon Wolin, una vez definió la democracia como algo episódico, como un proceso en fuga. Me preguntaba si puedo tener una reacción de ambos si, primero, comparten esa visión, y, segundo, si la comparten, ¿cómo podemos institucionalizar los procesos democráticos si son episódicos?
CW: Creo que Sheldon Wolin está correcto, eso es lo que hace lo tragicómico de la historia humana; que los poderes que son tienden a ser tan avasalladores en su poder, que hacen difícil que la gente de a pie sostenga unos niveles de organización, y responden en la forma de represión viciosa. Piensa en la radiación del hermano [Pedro] Albizu Campos, mira su piel y todos esos años de lucha, ese es el tipo de trato que le dan los poderes imperiales, ¿ves? Eso es bien real, de eso hablaba Wolin, de alguna manera sigue sucediendo. Pero es difícil de institucionalizar. Lo que están institucionalizadas son las concesiones que los poderes que son tienen que hacer para de alguna forma cooptar la organización de la gente de a pie, y han habido concesiones del imperio estadounidense al movimiento libertador de Puerto Rico, han habido concesiones, y es justo que, a la vez, han habido algunas pérdidas y algunas asquerosas fuerzas de opresión.
Samuel Cruz: Si es cierto que la democracia es episódica, lo que eso me hace hacer en mi activismo social es creer que tenemos que ser constantemente vigilantes y organizarnos. No es asunto de una sola oportunidad y ya, es un tipo de experiencia de toda la vida, que tenemos que estar ahí para que podamos mantener el sistema democrático trabajando para los menos de nosotros.
GDLLR: Así que, volviendo a algo que se dijo en su charla, Dr. West, sobre su crítica abierta al Presidente Obama, y a ciertas figuras de la comunidad afroamericana como el Reverendo Al Sharpton y el Dr. Michael Eric Dyson, ¿qué ha cambiado durante la última década en la política progresista negra de los Estados Unidos? ¿En qué están fallando? Y, para extender la pregunta al Dr. Cruz también, ¿usted coincide y encuentra que está pasando algo similar en la política de otros grupos minoritarios en los Estados Unidos hoy?
CW: Lo que está fallando estos días es que no tenemos suficientes portavoces, hombres o mujeres, libres, [y] valientes. Demasiados de ellos dependen del dinero corporativo, de la NAACP (National Association for the Advancement of Colored Persons), la Urban League, están básicamente sujetados por las corporaciones. Así que no ofrecen una crítica a la América corporativa porque no pueden sobrevivir sin el dinero corporativo. Todavía pueden hacer algunas buenas cosas en términos de programas aquí y allá, pero no pueden decir la verdad completa y ser libres. Soy crítico de Al Sharpton y lo llamo el negro doméstico bonafide de la plantación de Obama. Lo que quiero decir con eso es que él dijo públicamente “yo nunca diría una palabra crítica del Presidente”, y, tú ves, eso va en contra de cada principio del movimiento de Libertad Negra. ¿Cómo tú vas a tener a un movimiento de Libertad Negra que no puede ser crítico de la autoridad? Caramba, eso no es nada como Jesús, ¿no?, cuando estaba corriendo a los mercaderes del Templo. Así que, tú ves, tienes que ser libre. Ahora bien, un músico de jazz, cuando levanta sus trompetas, es libre.
GDLLR: ¿Esa es como lo define Duke Ellington, no?
CW: Así mismo es.
GDLLR: Libertad.
CW: Libertad, ¡el jazz es libertad! Hace de la disonancia una forma de vida. ¿Qué es disonancia? Una cierta libertad de la armonía.
GDLLR: ¿Dr. Cruz?
SC: Coincido con Dr. West en su apreciación de los periodistas negros, desafortunadamente si tú sintonizas cualquier cadena de noticas importante, periodistas afroamericanos, gente buena, están apoyando todo lo que dice y hace Obama y eso es un problema para las comunidades de color. En los medios latinos, pasa lo mismo con sus medios corporativos. Las corporaciones están a cargo y no se están abordando ninguno de los temas serios, incluyendo algunos de nuestros mejores periodistas, en el Daily News Juan González afronta muchas historias serias pero, asumo, no lo dejan afrontar temas latinos. Es un exmiembro de los Young Lords, creo que es un independentista, y sé que quiere la excarcelación de Oscar López Rivera pero no lo he visto hacer lo suficiente, y yo sé que sus manos están atadas, pero creo que estamos en unos momentos tan críticos de nuestra vida como gente de color que la gente tiene que decidir si quieren mantener su estatus o tomar una posición a favor de la justicia.
GDLLR: Finalmente, a usted se le conoce como un defensor férreo de la autodeterminación. En la cultura política de la izquierda en Puerto Rico existe una idea de que la autodeterminación es sólo conmesurable con la independencia nacional. Sin embargo, al menos la mitad de la población cree que la estadidad es la alternativa justa. Como intelectual de izquierda, ¿usted ve un vínculo necesario entre una preferencia de status particular y una solución progresista?
CW: Yo sí creo en la libertad de opción de la autodeterminación. No hay duda. Como seguidor del legado de [Pedro Albizu] Campos y [Lolita] Lebrón, yo me enfrascaría en persuasión moral y lucha ideológica para convencer a mis hermanos puertorriqueños que la estadidad no les va a traer lo que buscan. Convertirse en parte del Imperio Americano no va a traer lo que quieren. Pero [los estadistas] tienen derecho a su propia opinión. Yo sólo creo que no es una opinión persuasiva. Así que en el discurso público se trajo esa pregunta en la charla. Tú sabes, alguien cree que no somos una colonia, que la estadidad es mejor. Vamos a escuchar los argumentos, y vamos para adelante y para atrás, para adelante y para atrás, y hablemos.
SC: Yo creo que hay, diría yo, incluso una falacia y un simplismo en esta idea que se ha perpetuado con esta noción de que el cincuenta porciento quiere la estadidad. Y lo que quiero decir con eso es que, en los movimientos feministas, al menos dentro de la Iglesia, la mayoría de las mujeres hubieran votado en contra de que las mujeres fueran ministros o sacerdotes, pero eso no detuvo a nadie de abogar por la causa justa de la igualdad de las mujeres. Probablemente había algunos afroamericanos que, durante la esclavitud y después, durante Jim Crow, que estaban en desacuerdo con [Martin Luther] King porque se sentían estables y asentados en su situación. Pero no creo que alguien hubiera hecho el argumento de que la esclavitud tenía que continuar porque algunos negros querían mantenerse esclavos… ¿Por qué usamos esa idea cuando venimos al status de Puerto Rico? Desde mi perspectiva, simplemente no se justifica. Creo que es un mecanismo sutil que se utiliza para seguir con la discusión y no bregar con los temas verdaderos. Y si es así, démosle de todos modos la oportunidad a la gente para declararse y votar. No puedes votar bajo la esclavitud. Primero hay que darle independencia a la Isla, porque eso es lo que la ONU ha dicho. Y la gente no tiene capacidad para decidir de todos modos, es el Congreso el que lo determina. Si noventa y nueve porciento de los puertorriqueños votaran mañana a favor de la independencia de Puerto Rico, ¡comoquiera no estaría en sus manos! El Congreso determinaría.
GDLLR: Lo que es interesante, si puedo interrumpir, es que muchos en el movimiento estadista se consideran y se definen como anticolonialistas. En la charla, una de las preguntas era sobre el tema de la creación de coaliciones y alguien preguntó que cómo era posible hacer eso con colonialistas. Bueno, la mayoría hubiera pensado [que se trata de] la gente que prefiere el status quo, no necesariamente la gente que aboga por la estadidad. Y lo que es interesante es que hay una historia larga en Puerto Rico, tanto en la Isla como en la diáspora, de este debate. Pero dentro de nuestra cultura política de la izquierda, hay una idea casi automática de que sólo una opción particular es la que es progresista.
CW: De nuevo, eso es algo que a mí me deja perplejo. Quiero decir, ¿cómo pueden reclamar ser anticolonialistas, cuando su meta es unirse al Imperio? Sería como si los americanos en 1776 dijeran que somos anticolonialistas, y queremos ser parte aún más intrínseca del Imperio Británico. ¿Entiendes lo que digo? Yo no….
GDLLR: Ellos hablan de una ciudadanía de segunda categoría.
CW: ¡Así que quieren ciudadanía de primera categoría!
GDLLR: Sí.
CW: ¡Oh! Así que sería como esos en América de 1776 que dijeron no estamos por George Washington ni por Thomas Jefferson, ¡estamos por ciudadanía completa en el Imperio Británico!
GDLLR: Sí.
CW: Pero, verás, eso no es muy revolucionario.
GDLLR: Pero ha pasado en [otros contextos colonialistas como] Argelia, el debate quiero decir, así como en otras partes del Caribe.
SC: Quiero decir, ¿sabes lo que es la estadidad radical?
GDLLR: Sí.
SC: Lo que realmente quieren es un estado independiente, un país que es un estado. Porque todo lo que quieren es independencia sin llamarlo así, en cierto grado. Español como único lenguaje, o lenguaje principal. Y todo lo demás que exigieron de uno de los presidentes, el presidente dijo, lo que realmente estás pidiendo es independencia. Así que creo que hay una disonancia sicológica ahí con la que la gente tiene que bregar, pero no es inusual que la gente que ha sido oprimida por quinientos años se sienta confundida sobre cuál es la situación que están buscando.
GDLLR: Un punto adicional sobre Puerto Rico, porque los tenemos a ambos aquí y queremos capitalizar sobre eso. Como ambos saben, la economía puertorriqueña ha estado deteriorándose por décadas, y especialmente los últimos diez años han sido particularmente difíciles. La quiebra financiera del estado colonial es una realidad inminente. Eso se está discutiendo en distintas fuentes y medios. Así que mi pregunta es, tres años antes de una elección, ¿qué pueden hacer los ciudadanos de a pie para que las élites políticas le respondan? Porque la mayoría de las políticas que están siendo implantadas para manejar la crisis económica obviamente afectan a la gente ordinaria más que a los demás.
Oscar J. Serrano: Disculpe la interrupción, debo añadir que tenemos una historia, y ha sido acentuada por esta crisis, de una falta de procesos democráticos en términos de buscar soluciones. Quiero decir, Puerto Rico está camino a convertirse en lo que algunos llaman el Detroit del Caribe. Y las soluciones se le han dejado a las élites, mientras que el pueblo está completamente fuera de la ecuación.
CW: ¿Cómo es el proceso de toma de decisiones? Sí, sí. Y para añadir a la pregunta, ¿cómo los ciudadanos ordinarios se meten efectivamente en ese proceso de búsqueda de soluciones a la crisis?
SC: Parece que la situación demanda cambio radical. Y Puerto Rico no está, ni siquiera en su liderato, en control del sistema económico aquí en la Isla. Es totalmente dependiente de las políticas estadounidenses. Así que la gente va a tener que de verdad empezar a abordar el tema del sistema colonial. ¿Quieren seguir de esta manera y enfrentar las consecuencias? ¿O quieren buscar soluciones reales duraderas? La economía aquí siempre ha estado en problemas. Siempre hemos sido, no ciudadanos de segunda clase, ciudadanos de tercera clase en términos de salarios y derechos laborales comparados con el resto de los Estados Unidos. Así que yo creo que la gente pobre y marginalizada de aquí, y el liderato, tienen que empezar a buscar soluciones radicales, lo cual quiere decir mirar la raíz del problema, y la raíz principal del problema de la situación de Puerto Rico es el status colonial. No podemos decir nada sobre, incluso comercio con otros países o nada de eso, a menos que los Estados Unidos nos lo permitan.
CW: Yo creo que, tú sabes, la respuesta que da la gente negra en los Estados Unidos es levantar cada voz. Que todos los días los hermanos y hermanas aquí en Puerto Rico tienen que insistir, a riesgo de vida y hacienda, que sus voces sean escuchadas en el proceso de toma de decisiones que moldean su destino. Y eso quiere decir que a veces te tiras a la calle, vas a la cárcel, te organizas, te movilizas, pero tienes que insistir en que tu voz sea parte…
OJS: Así que lo que dice es que mecanismos como la desobediencia civil, que han sido usados en otras causas, bien contenidas o específicas, deben aplicarse a lo más amplio…
CW: Eso es así, eso es exactamente así.
OJS: Gracias.