Hay quienes piensan que estamos ahogándonos en el foso de un abismo. En lo más profundo de una sima. Hay otros que se rinden y huyen tan pronto el perro imperial le muestra los dientes. Otros indecisos o decididos, han optado por irse y emigrar del país. Respetamos enteramente su voluntaria decisión. Como decían nuestros abuelos y abuelas: "Cada quien hace de su camisa, un saco". Hay también quienes viven sembrando cizaña para provocar a otros que viven lamentándose de la provocada situación de guerra. Especialmente los menos formados ideológicamente. Principalmente los opositores que gratuitamente endosan el cheque en blanco para culpar al Presidente Maduro. "En la viña del señor, hay de todo". Pero los que más risa nos dan, son los que nos escriben por correo electrónico, burlándose de lo que escribimos. No entienden que nuestra sólida formación esta blindada contra mofas y burlas. Son lacayos escuálidos que viven en la dimensión de la mediocridad en su más alto nivel de incompetencia.
A lo mejor piensan que burlándose de lo que escribimos y banalizando los contenidos de nuestros artículos vamos a detenernos, dejar de escribir o sentir algún tipo de pena o efecto negativo. Nos banalizan por los términos que usamos, los cuales según ellos, están fuera de moda. En primer lugar, lo que llega al buzón del correo es algo externo. En consecuencia es foráneo. Y nada de lo que viene del exterior del cuerpo, puede perturbar la paz interior de una conciencia clara, absolutamente definida y vertical, en el cumplimiento y aplicación de principios y valores. Nuestra moral está a prueba de todo y así lo hemos demostrado en el transcurso de décadas. En nuestro país la historia no pasa de moda. Sigue vigente despues de 500 años. Ya dijimos que el tiempo en nuestra superficie es una ilusión. Y lo explicamos en el artículo anterior.
Ayer vinieron invasores de un imperio europeo. Nuestros padres ancestrales indígenas, dueños de todo lo que aquí existía y aun existe, casi fueron exterminados. Los sometieron a todos. Los obligaron a vivir en la indigencia y la miseria provocada por esos invasores. Y el "malparido" cura, obispo, monje, misionero o como lo quieran llamar a ese parásito, apadrinaba los crímenes contra nuestros padres, "bendiciendo" a los invasores y "condenando" a nuestros padres al "purgatorio" o "al infierno". Eran los dos destinos para quien o quienes se rebelaban contra los asesinos, ladrones y saqueadores de aquel imperio, incluyendo a su reptileano monarca.
Nuestros padres transmitieron oralmente y sembraron en nuestros genes un mensaje: "Resistir hasta vencer". Y eso es lo que hemos hecho durante los últimos 200 años. ¿Como olvidar lo que nos hicieron? ¿Como no apoyar a los precursores y libertadores como el Padre Bolivar? El siguiente imperio, aliado y sanguinario como aquel, se dijo "colonizarlos de nuevo, es pan comido". "Volveremos con espejitos y baratijas a hipnotizarlos y caerán nuevamente. Les hablaremos de Alianza para el Progreso y llevaremos el progreso con la explotación petrolera". "Y solo nos fueron dejando, miseria, sudor y obreros".
Con manipulaciones, mentiras y falsedades, han hecho que muchos olviden esa historia, de donde venimos. Para los que hoy no entienden: Es exactamente la misma pretensión imperial en este nuevo amanecer, para evitar que seamos verdaderamente libres, soberanos e independientes. Muchos lo vivimos recordando cada día, al levantarnos con el sol del nuevo día. Que es el mismo día de hace 500 años atrás. Solo ha cambiado la fecha calendaria y el nuevo emperador. Los que niegan la guerra que el imperio nos impone, son cómplices para que el propósito de dicha guerra logre sus objetivos: Tumbar al Gobierno, Destruir la Revolución, Eliminar la Constitución, Imponer el fascismo y exterminarnos a todos los revolucionarios que defendemos el legado del Comandante Eterno Hugo Chávez Frías.
Durante la guerra de independencia, las mismas prácticas de inflación inducida fueron impuestas por la oligarquía opositora. Aumentaron todos los bienes y productos de consumo contra la población. Y los "murciélagos" que apagan la luz de los pueblos, manipulaban a nuestros ancestros diciendo que si se unían a los rebeldes, vendría castigo del cielo porque Dios estaba con el Monarca. Hasta que Bolivar, con sus arengas logró la unidad de ese reducido número de voluntarios entre los cuales habia mulatos y negros que habían logrado salir de la esclavitud, hasta convertirse en el poderoso e invencible ejercito que logró nuestra emancipación, vilmente traicionada en pocos años.
Desde la acera de enfrente nos siguen atacando con todos los hierros. Especialmente el yanqui de gringolandia y sus Halcones, con apátridas y lacayos. No nos asustan. No nos asustarán. Si ya una vez, nos deportaron por ser comunistas y nos enfrentamos a ellos con Dignidad, en una corte en Dallas, Texas, menos podemos tenerles miedo ahora que estamos en nuestra propia casa. Y quienes lo hacen, son cobardes. Hablan en nombre de la Libertad y la Democracia y arremeten contra su propio pueblo cuando sale a protestar.
Por eso, lo mantienen en la ignorancia y drogado con todo tipo de alucinógenos: Químicos, Radioeléctricos y Digitales. Aprovechan todo tipo de herramientas para mantenerlo fuera del contacto con la realidad sociopolítica de su país. Especialmente las que puedan influir en los estados de animo de las personas con débiles mentes. En nuestro caso, seguirán estrellándose contra el muro de la Verdad y de nuestra DIGNIDAD. Palabra que les causa risa a ellos porque saben perfectamente lo que en el fondo significa.
Nunca olvidaremos aquella mañana que íbamos a la Universidad. Una señora norteamericana, estaba de pie a un lado de la carretera, pidiendo ayuda y nadie la socorría. Nos detuvimos y fuimos a ver que sucedía. En la noche, habían caído treinta centímetros de nieve y el frío calaba hasta en los huesos. Al llegar nos presentamos y preguntamos a la señora que le pasaba. -"Tengo uno de los cauchos "espichados" y no tengo fuerzas para poner el de repuesto"-. Inmediatamente, le pedimos las llaves del carro, abrimos la maletera, sacamos gato y cruz y levantamos el carro. Luego nos dispusimos a sustituir el caucho vacío. Y ella nos preguntó: ¿ "De donde es usted"? Y le respondimos: ¡Del mejor país del mundo, Venezuela¡ Y la señora volvió a preguntar: ¿En que parte de África queda su país? -Señora- le dijimos. Venezuela esta en este mismo continente. Es el primer país exportador de petróleo del mundo. La gasolina que usted tiene en el tanque de su carro, es venezolana. Toda nuestra industria de refinación de petroleo en Venezuela, se diseñó para satisfacer el mercado de combustibles de su país. ¿Como es que usted no sepa eso, no fue a la escuela? Y la señora respondió: "Ese tipo de temas no lo enseñan en nuestras escuelas".
Estaba apretando los últimos "espárragos" del caucho ya montado, cuando de repente llegó una vehículo. Era la patrulla de caminos que llegó hasta donde estábamos, porque desde el interior de la misma el agente no nos veía. La señora le explicó lo que estaba sucediendo y el policía volvió a preguntarnos- ¿De donde es usted? Y volvimos a responderle como a la señora. Y el policía volvió a cometer el mismo error: ¿Es asiático? Después de explicarle, el policía preguntó de nuevo: "Dígame una cosa: ¿En su país la gente se detiene en la carretera a ayudar a personas como a esta señora"? Y le respondimos. -En cualquier parte de nuestro país, hay gente sensible que no solo le ayuda a cambiar el caucho, sino que se asegura de que no quede aislado o desamparado en una situación como esta. Al menos en nuestro pueblo natal, todos somos así".
Este relato es verídico. Lo que afirmamos porque lo vivimos en carne propia. Son muy grandes las cantidades de norteamericanos que no saben donde está Venezuela. A ellos no se les enseña nada de geografía universal. No le conviene al imperio. A los compañeros de la universidad, en muchas ocasiones, les preguntábamos sobre sucesos internacionales relacionados con las graves injerencias del imperio y su respuesta era la misma: "No me interesa".
Mientras más analfabeta sea su gente, mejor. ¿Porque la tasa de gente que no sabe leer ni escribir, en los Estados Unidos ha llegado actualmente a las 47 millones de personas, de los cuales, más de 17 millones son niños y niñas? No hay sensibilidad para ayudar a los más débiles socialmente. La práctica del "Darwinismo social" es su más perverso instrumento equivalente al "Sálvese el que pueda". Por eso para el imperio es mejor manipular ignorantes, que a personas educadas. Solo educan a los hijos de las élites de reemplazo en el poder. Igual a los que por razones de hegemonía imperial, deben ser condicionados y limitados en conocimientos. Son los necesarios en la práctica de su agenda de violencia para colonizar o recolonizar territorios. Son los ejecutores de sus perversos planes de saqueo y explotación de recursos.
Si nos tratan de golpear, nos defenderemos. Si pretenden aislarnos del resto del mundo, les va a resultar una tarea muy difícil. Ni Rusia, ni China, ni Irán, ni Turquía, ni Vietnam, ni ninguno de los países que tiene formales convenios bilaterales y/o multilaterales, va a renunciar bajo presión a hacer negocios exitosos con nosotros, la nación que tiene las más grandes reservas de petroleo del planeta. No habrá ejercito de paramilitares, guarimberos, sicarios o mercenarios contratados ni "quinta columnas" que salgan ilesos si osan violar nuestras fronteras. Nuestra unión cívico-militar es monolítica y homogénea. Y más temprano que tarde, volveremos a la normalidad. Las estrategias están sobre el tapete de la coyuntura económica que se esta abordando con sabiduría y el concurso de las mejores mentes pensantes de la revolución para dar al traste con las pretensiones de querer someternos con la inflación inducida. Las propuestas ya están en manos del presidente y el pueblo sabe que este obrero no le dará la espalda nunca, para no fallarle al Comandante eterno. Por ese grado de confianza en él depositado: Ni pueden ¡Ni podrán contra Nosotros¡
(*) Ingeniero Químico. Agroecologista
lewman277@gmail.com