El imperialismo, la contrarrevolución y el gobierno del estado burgués

El motor de la historia (lucha de clases) no se detiene ante los crímenes de lesa humanidad cometidos por el imperialismo, fruto de su clase rectora (burguesía), contra las masas trabajadoras desposeídas (proletariado) del campo y la ciudad en todo el bloque terráqueo.

IMPERIALISMO.-

El imperialismo es la fase superior del capitalismo, es la expresión concentrada del capital bancario fusionado con el industrial, convertidos en gigantes monopolios financieros que se transforma en capitalismo monopolista de Estado, fortalecido por el aparato burocrático y militar, para humillar a las naciones y aumentar la represión contra el proletariado; violando las soberanías de los países, sometiendo a sus interese los regímenes gubernamentales sean monárquicos, republicanos o democráticos supuestamente libres.

Por lo tanto, no es casual toda esta descomposición social, el aislamiento y el bloqueo comercial y financiero, más la paralización del aparato Agroproductivo e Industrial de nuestra Nación Bolivariana, en manos de la oligarquía apátrida coparticipe de la conspiración imperialista contra nuestro país. Esta conspiración arma a la burguesía, la pequeñaburguesia que usan a la delincuencia común (lumpen proletario) como instrumentos de la contrarrevolución.

CONTRARREVOLUCIÓN.-

Después de 526 años de la invasión transculturizante europea; la clase dominante (gran burguesía) siempre se ha mimetizado en los movimientos de transformación para alcanzar sus propios fines políticos, generado y aprovechando las contradicciones entre ésta y las capas medias de la pequeña burguesía. Fenómeno de su existencia social explotadora y esencia de su conciencia social expoliadora, que con argucia pseudorevolucionaria arma estratagemas para confundir y manipular a los sectores menos aventajados y desclasados del movimiento revolucionario popular, creándoles la conciencia social esquilera. Por tal razón, a la clase obrera y al proletariado revolucionario, no le ha sido fácil orientar a las masas trabajadoras del campo y de la ciudad luchar contra la hegemonía explotadora y expoliadora de las clases dominantes endógenas y exógenas del capital financiero parasitario transnacional; pero además enfrentar la felonía de sectores de las capas oprimidas que alienadas a la sociedad de cómplices apoyan a los explotadores, convirtiéndose en elementos de la contrarrevolución, contrarrevolución que no tiene la menor consideración por los derechos humanos, es decir, respetar el derecho a la vida, porque lo que prevalece es mantener su instrumento del poder político como clase dominante, en ese orden le incomoda los gobiernos que no garantizan sus privilegios e intereses.

EL GOBIERNO DEL ESTADO BURGUÉS.-

Es de preocupación y de ocupación de las fuerzas del Movimiento Obrero-Campesino-Comunero Popular, convertirse en catalizador audaz para transformar esa junta de administración de los negocios e intereses comunes de la burguesía. Presionando con energía proletaria sobre el llamado al dialogo convocado por el presidente Nicolás Maduro, que no es con la burguesía apátrida y menos aún con el empresariado proimperialista; que ese dialogo debe ser con la clase obrera manual e intelectual del campo y la ciudad, donde se permita ejercer y prevalecer la crítica y autocrítica como instrumento científico para analizar de lo general a lo particular en relación a las políticas del gobierno que el Estado burgués reformista, burocrático y corrupto, que obstaculiza, atenta y deteriora los intereses del proletariado. Es decir, los intereses del pueblo trabajador.

Entonces, todo lo que está aconteciendo en lo político, económico y social; en esta tierra de héroes y heroínas que a diario resisten toda esta calamidad antihumana del capitalismo. No es casual, tiene su causa en la avaricia y voracidad de la gran burguesía que en su afán de obtener mayores ganancias sin el mayor esfuerzo y la mínima inversión, pero con la mayor explotación de las trabajadoras y trabajadores adquirir inmensas fortunas, contaminando así al cuerpo social de la nación reproduciendo en el subconsciente colectivo el robo descarado permisado por la estructura y la supraestructura de ese aparato del poder político llamado Estado. Razón tuvieron Marx y Engels en definir en el Manifiesto del Partido Comunista que: "El Gobierno del Estado Moderno no es más que una junta que administra los negocios de toda la clase burguesa".

Pues bien, como vemos la evolución, desenvolvimiento y desarrollo dialectico e histórico de este proceso de cambio que experimenta en esta etapa la población venezolana, no es un capricho de Y o X grupo o individualidad en particular. No, es el reflejo acondicionado de la forma y contenido de una sociedad contaminada por la existencia social de un modelo de producción de explotación del propio ser humano y expoliadora de los recursos naturales. He ahí, la conducta y actitud impune de todo el andamiaje de la supraestructura del Estado que mantienen a raya cualquier manifestación cuando se trata de los intereses del pueblo trabajador; pero permisivos a favor de los intereses de la burguesía que violando la Carta Magna, cometen atropellos contra las y los campesinos; contra las y los obreros de las fábricas, los comercios y las industrias.

El proletariado y la intelectualidad revolucionaria están en el deber de avanzar en esa construcción de la Dirección Colectiva Revolucionaria, sin ambigüedades para dar el salto cuantitativo al cualitativo para salir de esa arcaica modorra que nos advierte Marx: "El proletariado, capa inferior de la sociedad actual, no puede levantarse, no puede enderezarse, sin saltar toda la superestructura formada por las capas de la sociedad oficial." Ya basta que la existencia social de dominación del pasado siga imponiéndose sobre la nueva existencia social de liberación que se viene construyendo.

La lucha es hasta vencer, unir a todo el movimiento obrero-campesino-comunero-popular con el propósito de continuar construyendo la plataforma ideopolítica hacia el SOCIALISMO CIENTÍFICO; frenando la contrarrevolución que se expresa no solo en la conspiración imperialista, sino en la burocracia, el reformismo y la corrupción del Estado burgués que heredamos.

Debo cerrar tomando unas palabras del Libertador Simón Bolívar, para graficar la complejidad política que enfrentó y la que debemos que enfrentar ante la diversidad del impulso que se debe asumir: "Habiendo ya cumplido con la justicia, con la humanidad, cumplamos ahora con la política, con la sociedad, allanando las dificultades que opone un sistema tan sencillo y natural, más tan débil que el menor tropiezo lo trastorna, lo arruina. La diversidad de origen requiere un pulso infinitamente firme, un tacto infinitamente delicado para manejar esta sociedad heterogénea cuyo complicado artificio se disloca, se divide, se disuelve con la más ligera alteración."

La burguesía es astuta y conoce esta heterogeneidad heredada y por eso está empeñada en alterar el orden social, para hacer retroceder la rueda de la historia, lo hicieron en Guatemala 1954, en Chile 1973, siguen intentando con Cuba; en Honduras 2009; continúan boicoteando las gestiones en Bolivia, Nicaragua y Venezuela.- Argentina, Brasil, Ecuador pasaron a manos de la contrarrevolución internacional. Colombia es el proxeneta de los Estados Unidos, Perú lo secunda; ojo, no hablamos de sus pueblos, sino de sus lacayos gobiernos de esos Estados burgueses.

Necesitamos concretar en la praxis revolucionaria la UNIDAD BOLIVARIANA o la anarquía nos devorara; rompamos con ese estigma de inferioridad y no sigamos ayudando a la burguesía y a la pequeñaburguesia a mantener el poder; recurramos también al llamado marxista de la solidaridad proletaria internacional. ¡Proletarios de todos los países, uníos!…

¡VIVA LA UNIDAD OBRERA-CAMPESINA-COMUNERA—POPULAR!

¡VIVA LA CLASE OBRERA!

 

siempreclaseobrera@gmail.com



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