Así, así, así que se gobierna

DECRETO.

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SIMÓN BOLÍVAR, Gefe Supremo de la República de Venezuela, Se.Se.Se.

Habiendo cesado las críticas y extraordinarias circunstancias en que el Señor General Páez, privado de recursos en la Provincia de Barinas, aislado y sin un signo de conversión para el comercio, se vio obligado a acuñar Moneda por el Molde, aunque muy imperfecto de la Macuquina que hizo romper el Gobierno de Venezuela en la segunda época de la Independencia; y deseando evitar la circulación de una Moneda que puede ser contrahecha con mucha facilidad, y de que se vería el País inundado, careciendo además de la Ley, y peso necesario; he tenido a bien decretar y decreto lo siguiente:-

ARTICULO 1.-La Moneda acuñada en la Provincia de Barinas no circulara en ninguna de las otras Provincias de Venezuela, en atención a que le falta la Ley, el peso y la perfección del signo.

ARTICULO 2.-Tanto en aquella Provincia, como en las demás de la República se prohíbe la circulación de otra Moneda que la de cordón de oro y plata: la macuquina del antiguo régimen Español, y la Macuquina acuñada en Caracas en la segunda época de la República.

ARTICULO 3.-Sin embargo de lo dispuesto en el Artículo precedente, en beneficio del crédito de la Provincia de Barinas, y para evitar los perjuicios que sufrirían los individuos que posean la Moneda expresada en el Artículo 1. correrá está dentro de aquella Provincia en clase de provincial, mientras se amortiza por el Gobierno.

Publiquese, fixese, circulese a las Autoridades a quienes corresponda, e insértese en la Gazeta.

Angostura Junio 18 de 1818. 8.

SIMON BOLIVAR.

j.g. perez, Secretario

Tomado del CORREO DEL ORINOCO, ANGOSTURA SÁBADO 27 DE JUNIO 1818. 8. N. 1, Tom. I.

Aja, amigos, a través de este decreto del Libertador Simón Bolívar, podemos destacar la autoridad firme que ejercía, no solo en el ámbito militar, organizando ejércitos y pertrechos, campañas, alianzas, repúblicas, si no también tomando decisiones de gran relevancia para superar la delicada economía

Nuestra revolución nos convoca a leer a Bolívar, alimentarnos de sus ideas, sus acciones, ante situaciones extremas de convivencia social y política. Cuánta energía gastamos al frente de un ordenador criticando a Maduro, a sus aliados e instituciones, nos vaciamos de ideas inútiles, nos irritamos la vista, se nos sube la tensión, se nos sube el azúcar y el colesterol y detrás de un artículo comenzamos con otros dos... hasta que nuestra señora nos dice:-Papito, mire para acá mijito, su merienda favorita que le prepare hoy.

Se imaginan ustedes la responsabilidad para un gobierno revolucionario asumir una circunstancia de guerra interna como la que debió vivir Bolívar, y si es en esto tiempos de cibernética avanzada la vaina es mas jodida. Por eso admiro al presidente Bashar Al- Asad de Siria, quien lleva seis años de guerra enfrentando a la maquinaria militar gallapera de Estados Unidos, Israel, Francia, Inglaterra, Alemania y los hermanos árabes musulmanes, desde las grandes Monarquías y bandas mariguaneras

Ese liderazgo de Bolívar y del Presidente Bashar de Siria, se fortalece cuando tiene un pueblo en perfecta comunión con su ideales; un pueblo consciente de su deber histórico. Un líder valiente, firme, con talento, que no descuide un sólo elemento que pudiera romper el círculo de seguridad por dentro.

Cuando Bolívar toma la decisión sobre la «Moneda» que hizo acuñar Paéz, ante una coyuntura determinada, bien sabía las consecuencias que tarde o temprano acarrearía a la maltrecha economía. La tomó en su justo momento.

Cuántas veces hemos oído decir que estamos enfrentados a una guerra económica, como forma de desestabilizar para acabar con esta nuestra revolución, y nos dicen que es producto de un dólar paralelo, las mesas de cambio de Cúcuta y Bogotá, con el contrabando de extracción, etc, etc, etc...

Cuántas veces hemos escuchado las recomendaciones de connotados economistas y otros «guate perro» como yo, que recomendamos a toda prisa se cierre la frontera con Colombia, acabar con el convenio cambiario para proteger nuestra divisa. Cuántas veces, ha dicho usted, que no es un «guate perro» como yo acabar con el monopolio de los grandes importadores que se roban nuestra divisa. Cuántas veces, han dicho los más atrevidos y radicales comunistas que se nacionalice la banca, mandando pal carajo a los grandes capitalistas. Que te cobran por el mínimo servicio mostrándote los dientes amarillos con una sonrisa

Bueno, si el imperio nos amenaza, si los capitalistas joden y joden, entonces aprovechemos la Constituyente, hagamos como Bolivar, tomemos nuestras más severas decisiones y pelamos la dientera con una gran sonrisa

Hernán José Brito Córcega, 17-08-2017

 



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