Venezuela es y será un país de paz

El 10 de abril de 2000, el artículo escrito en The Washington Post por el Senador PAUL COVERDELL titulado STARTING WITH COLOMBIA (Comenzando por Colombia) señaló: "Para proteger los intereses petroleros de los Estados Unidos en Venezuela es necesario intervenir militarmente a Colombia". La ocupación militar se produjo en el año 2009, en forma pacífica, mediante un acuerdo militar entre el Canciller colombiano Jaime Bermúdez y el Embajador de EE.UU., en Bogotá, William Browfield.

Coverdell para entonces Presidente de la Sub-Comisión de Relaciones Exteriores del Senado sobre asunto del Hemisferio Occidental, en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, dijo: "Chávez es un líder elegido libremente que aplasta la democracia, progresivamente, en Venezuela", señalando igualmente: "Estados Unidos debe ir más a fondo ahora y lidiar con los golpes en cámara lenta".

Los asesores de Bush padre, Brent Scowcroft, ex-Gobernador de Florida, y Bob Graham, ex-Senador, en su artículo escribieron: "Rápido ayudar a Colombia, por nuestro bien".

La providencia nos reservó estas tierras desde el 27 de marzo de 1.528 cuando fue creada la Provincia de Venezuela, su capital fue Coro. Los límites se extendían desde el Cabo de la Vela en la Guajira Colombiana hasta Maracapana en el Oriente. Por decisión del Rey Carlos III, en septiembre de 1.777, la Provincia de Venezuela pasa a ser una Capitanía General.

La Nueva Granada, Venezuela y Ecuador nacieron a la libertad del genio y espada de Bolívar quien les dio un nombre único: COLOMBIA y nos representó en una misma bandera tricolor, la bandera de tres barras horizontales: AMARILLO, AZUL Y ROJO.

Como puede evidenciarse, en ningún momento los Estados Unidos actuó a favor de la Independencia de: Venezuela, Colombia, Ecuador y Perú; muy por el contrario, apoyó a España remitiéndoles armas y provisiones. Dos goletas cargadas con armas y vituallas fueron apresadas en el Orinoco y el representante de los Estados Unidos, Juán Bautista Irvine, llegó a Angostura y reclamó airadamente a Bolívar la liberación de las goletas. Bolívar respondió: "Lo mismo es para Venezuela combatir contra España que contra el mundo entero si la ofenden"

Las tres declaraciones escritas supra son muy elocuentes y reveladoras de una intención manifiesta: azuzan / incitan el poder militar norteamericano para que protejan lo que ellos llaman los intereses de los Estados Unidos en Venezuela, dando entender que, en mano de Venezuela como custodio, están en peligro los haberes que "son propiedad" de los Estados Unidos, como son: los metales, no metales, metaloides, petróleo y gas; es decir, el oro negro (petróleo), el oro amarillo, el oro azul (coltán), esmeraldas, diamantes, minerales estratégicos, las fuentes hídricas, bosques, otros.

Es decir, los parágrafos afirman que esos recursos son de ellos. NO, SON DE VENEZUELA DE PLENO DERECHO y estamos dispuestos a protegerlos cualquiera que sea el enemigo y cual fuere el precio.

Colombia y Guyana tienen fronteras con Venezuela, al occidente y al oriente, y siempre las tendrán (lo fueron ayer, lo son hoy y lo serán mañana) por lo cual, deben hilar fino para mantener las mejores relaciones, y, cualquier situación se resolverán en las cancillerías.

Las pretensiones de los Estados Unidos sobre nuestros recursos naturales las están realizando mediante simulación de conflictos y ofrecimientos de premios por el éxito de la empresa que acometerán los países, cuyos gobernantes están sometidos al imperio.

Los gobernantes son elegidos por sus pueblos para su desarrollo y engrandecimiento, y para evitar situaciones incómodas con los vecinos que rompan la paz de sus pobladores y coloquen en riesgos sus fronteras, ya que, los conflictos que degeneran en guerras, en general, son de larga data y productoras de odio por los daños a las personas y a los bienes; como ejemplo: las constantes y prolongadas guerras, con masacres y destrucción, que mantienen los árabes e israelí por más de 3.000 años.

Los pobladores no son responsables por los hechos inadecuados de sus gobernantes cuyos valores están mal definidos y orientados a otros fines, y por desgracias son los que sufren, son las víctimas de las guerras.

Los pueblos deben evitar que sus gobernantes actúen impropiamente ya que se reflejará en contra del bien común y de la patria.

PEDRO HERNÁNDEZ CASTELLANOS



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1777 veces.



Pedro Hernández Castellanos

Economista. Docente universitario. Especialista en Finanzas.

 pedrohernandezcastellanos3546@gmail.com

Visite el perfil de Pedro Hernández Castellanos para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Pedro Hernández Castellanos

Pedro Hernández Castellanos

Más artículos de este autor


Notas relacionadas


Revise artículos similares en la sección:
Ideología y Socialismo del Siglo XXI