8 de Abril - Recientemente, un grupo de científicos en Singapur han logrado vincular la vegetación a electrodos capaces de detectar alertas eléctricas débiles que la vegetación emite de forma natural.
El hallazgo se observó al “ordenarle” a una planta carnívora, a cerrar sus "mandíbulas", formadas por dos lóbulos, después de una señal emitida por un teléfono inteligente. Luego conectaron uno de los muchos lóbulos a un brazo robótico, donde experimentaron pequeñas tareas como sostener un alambre de medio milímetro, por ejemplo. Los científicos han conseguido estimular las "mandíbulas" de la planta para que se cierren, sin embargo, lograr que estas abran, aún está por verse.
El descubrimiento está en sus primeras etapas, pero parece despertar altas expectativas en los científicos, ya que esperan que su implementación, tarde o temprano se use para diseñar "plantas-robot" capaces de lidiar con objetos demasiado frágiles para los brazos inflexibles de los robots estándar. “Estas especies de robots naturales podrían interactuar con otros robots artificiales para crear sistemas híbridos”, mencionó Chen Xiaodong, el creador de una investigación revelada por Nanyang Technological College (NTU) en Singapur.
Detección de vegetación enferma
El sistema puede incluso detectar alertas débiles emitidas por la vegetación, dando lugar a la posibilidad de que los agricultores sean alertados en una etapa temprana cuando su vegetación está enferma. “Al monitorear las señales eléctricas de las plantas, podemos detectar posibles señales de socorro y anomalías”, señala Chen. "Los agricultores pueden darse cuenta de que una enfermedad se está propagando, incluso antes de que aparezcan síntomas claros".
Los científicos han reconocido desde hace mucho tiempo la existencia de alertas {eléctricas} emitidas por la vegetación, sin embargo, su suelo irregular y cómodo dificulta la adaptación de los sensores. Los investigadores de NTU College han diseñado electrodos que tienen la textura cómoda de una película de plástico y se pueden atar alrededor de una planta para detectar alertas de manera más confiable. Se pegan con un "termogel", un líquido a baja temperatura que gelifica a temperatura ambiente.
Diferentes investigadores están siguiendo este camino. Recordemos que en el año 2016, un equipo del Instituto de Expertos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), utilizó hojas de espinaca como detectores capaces de enviar un correo electrónico a los científicos cuando se detectaron explosivos en el sótano. Los investigadores habían colocado nanotubos de carbono que podrían emitir un signo fluorescente cuando las raíces de las plantas detectaran nitroaromáticos, una sustancia generalmente presente en los explosivos. La señal fue detectada por una cámara digital de infrarrojos que envió un mensaje a los científicos.