Desde mi punto de vista considero que la sociedad de la información tiene ya rato desenvolviéndose en la era de la tecnologías, a raíz de todo este manejo se ha desarrolla una serie de mitos sobre sus poderes, beneficios y grandezas. Considero desde mi punto de vista lo mitos más significativos son los siguientes:

Mito de la libertad de expresión y la participación igualitaria de todas las personas en la red. Es cierto, que una vez superada la limitación del acceso a la red, esta se nos presenta como que puede propiciar la libertad de expresión y la participación igualitaria de todas las personas, entre otros motivos porque el hecho de la falta de referencia física, puede aliviar las limitaciones personales y sociales para comunicarnos con los demás. Pero también es cierto, que no debemos de confundir que tener acceso a la información, en nuestro caso al canal de distribución de la información, significa tener conocimiento, y en ninguna medida desarrollar pautas y propuestas de acción.

En definitiva no debemos confundir, estar conectado con participar y tener la libertad de intervenir en la red. Acceder todos a un teclado no significa que desaparecerán las diferencias culturales, sobre todo si no sabemos que tenemos que demandar, y cómo utilizaremos lo solicitado. Como lo plantea

Wolton (2000,37): "la igualdad de acceso al conocimiento, no es la igualdad ante el conocimiento".

Mito de la amplitud de la información y el acceso ilimitado a todos los contenidos. Esta de nuestra parte nosotros los docentes, de reflexionar que en la actualidad se hace necesario formar al estudiante para que sean capaces de evaluar y discriminar la cantidad de información que existe en las redes, para que sea pertinente a su problema de investigación o a su temática de estudios.

Las tecnologías como manipuladoras de la actividad mental. Desde mi punto de vista es cierto que las tecnologías no solo transmiten información, sino que a su vez por sus sistemas desarrollan habilidades cognitivas específicas. Cabe destacar que las tecnologías, sus contenidos y sistemas, pueden servir como elementos reforzadores de actitudes y predisposiciones, pero nunca ser las determinantes directas de actitudes y conductas.

La existencia de una única tecnología. Este mito que ha sido constantemente a lo largo de la evolución de la historia de la tecnología, es decir la existencia de una supertecnología que pueda unir a todas las demás y sea la más potente y por lo tanto la más significativa para conseguir metas y objetivos de aprendizaje. Por ejemplo tenemos la televisión, que maneja de video, sonido, imagen, color y muestra un gran parecido con la realidad. Luego le siguió la computadora, que además de poder ofrecer los elementos de la televisión, permite una adaptación del usuario; y tiene la facilidad de tomar decisiones con los cuales desearía interaccionar con su formación.

Mito de la sustitución del profesor. Cada vez que aparece una nueva tecnología, existe alguien proclamando que la escuela desaparecerá y que los profesores serán sustituidos. Hasta aparecen estudios validando este mito. Desde mi punto de vista, los profesores no van a ser reemplazados por las tecnologías por muy potente y sofisticadas que sean, lo que si está ocurriendo es que tengamos que cambiar los roles y actividades que actualmente desempeñamos.

La presencia de las nuevas TIC nos van a llevar, a que los profesores desempeñen nuevos roles, tales como: consultor de información – facilitador de información, diseñador de medios, moderadores y tutore virtuales, evaluadores continuos y asesores, orientadores y administradores del sistema.

Mito de las tecnologías como la panacea que resolverá todos los problemas educativos. Creo que ya debe de quedar lo suficientemente claro que para nosotros los docentes, las tecnologías, independientemente de lo potente que sea son solamente instrumentos curriculares, y por tanto su sentido, vida y efecto pedagógico, vendrá de las relaciones que sepamos establecer con el resto de componentes del curriculum. Y posiblemente, por no decir casi seguro, los efectos que se consigan vendrán más de las interacciones que se generen entre todos los elementos de las metodologías que se apliquen sobre el estudiante, y del diseño concreto que se realice. El poder no está en la tecnología, sino en las preguntas y respuestas que nos hagamos sobre ella para su diseño, y utilización en investigación en la enseñanza.

En conclusión, no dejemos que los mitos se realcen y las realidad se obvien, ocasionando a la población estudiantil inseguridad a la hora de estudiar. Los profesores somos corresponsable de formar profesionales, que tenga capacidad de discernir, de transformarse y resolver problemas.

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