¡No!, me niego a aceptarlo! No son hombres, son eunucos, castrados, ninfas y nenúfares, delicados efebos de piel tersa y delicada, voz en sol mayor, y piernas de balletista, que hacen cabriolas por el espacio y luego pernoctan en límpida nubes de suaves y húmedas pieles ¡Qué pena dan! Y para terminar de ponerla, de apellidos, por ejemplo Montaner, Cisneros, Romero etc.
Los utiliza el imperio y ellos, sumisos al fin, se ponen contra sus pueblos. Qué desvergüenza señores.
Todo comenzó cuando Fidel, llegó con sus barbudos a Cuba desde la Sierra Maestra e implantó una revolución social, que echó de allí, a todos los sinvergüenzas inmorales bellos, que se vieron con los tacones de los revolucionarios marcados en sus inmundos traseros y se fueron como en la diáspora israelí, con sus tablas de…surf, a Miami, al cual convirtieron en una escena de Sodoma y Gomorra.
Usted los escucha hablar pestes de la pequeña isla de la dignidad. Hace poco armaron tremenda pachanga, porque creyeron que Fidel estaba muerto, Izaron copas de aguardiente, elevaron sus ridículos ropajes de marca, porque para ellos, quien no use esas indumentarias, no merece vivir, porque es la orden del imperio consumista. Son los llamados GUSANOS MAYAMEROS, ex cubanos a quienes la vida de la humildad, de la sencillez, no les gusta, porque en “la riqueza está el sabor”, droga, dinero, orgías, viajes, licores, bancos, chequeras, tarjetas doradas, pornografía en vivo y en video, pederastia, prostitución infantil y juvenil, mientras en África los niños caen por los caminos víctimas del hambre, ¿qué no es tu problema? ¿Entonces dime, vándalo de la mierda, porque cree en un Dios, que arenga al “Amaos los unos a los otros? “Compartid tu pan con el hermano” “Primero entra un camello por el ojo de una aguja, que un rico al reino de Dios”, ¿te contradices idiota de las miles de enfermedades venéreas? Te he visto en la plaza San Pedro escuchando al Papa y el Ángelus.
Son parias, no tienen patria. Van al ejército y Mr Bush lo coloca en la primera línea de fuego y el mundo los observa, hablando “spanglish, muriendo por la patria que los aceptó como modernos esclavos del ídem Apocalipsis. Gusanos mayameros. Indolentes e insensatos PARIAS, atacan su propio suelo, regando la sangre de los que fueron sus compatriotas allende el tiempo. Son los esclavos del imperio, quien les cobra el arrendamiento de Miami. De allí se han ido los verdaderos gringos, los negros y los blancos que fundaron esa geografía. Se han ido hacia el Norte, porque sienten asco de estos GUSANOS MAYAMEROS, hombres sin dignidad, sapos de avenida, traidores de poca monta. Nada les importa los 45 y cinco años de bloqueo que el imperio le tiene a Cuba, porque ellos odian a Fidel y eso es más grande que el dolor de un niño, de un pueblo.
Pobre infelices, ¿serán parte de la naturaleza?
Andan por Latinoamérica haciendo grafitis con un spray venenosos. Defendiendo la actitud del imperio, jalando bola, riendo las idioteces de Bush y Condoleezza, cuando envía a uno de ellos a envenenarle el cerebro al patriota que se niega a seguir soportando el yugo impuesto por los Monroe, los Kenneddy, los Johnson, los Nixon, los Ford, los, los Clinton, los Bush.
Hace poco el esclavo CARLOS MONTANER estuvo en Panamá. Allí se dio a la tarea de hablar pestes contra Chávez y la REVOLUCIÓN. El infeliz arengaba que la riqueza no debe estar en manos del Estado, como sucede con PDVSA en Venezuela, porque eso es malo, malito y Dios castiga a quienes se pongan con eso. Carlos Montaner, el inválido cerebral, advertía a los panameños que “El Canal no puede ser administrado por el Estado, como lo hace Chávez con el petróleo en Venezuela, porque eso no genera riquezas para el pueblo” (gringo) El sirviente, el esclavo de fino ropaje, el payaso del circo imperial haciendo su trabajo con toda la fidelidad a los dictámenes del imperio. Así ha sido siempre. Bestias sumisas, cazadores de palomas, al servicio del capitalismo gringo. En Venezuela también pululan estos habitantes del duodeno. Por aquí anda el “Matacura Romero”, insecto inhalador de feca, habitante perenne de inodoros y cloacas, a quien la CIA le paga el pan, la pensión y la curruña, para que desde una estación de televisión, exhale microbios contra el pueblo venezolano. Estos miserables un día tendrán que pagar sus culpas, por VENDE PATRIA, imposibles de ser llamados HOMBRES, por la razón y la inteligencia.
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