La lista de precios para los “estudiantes” pacíficos que permanecen apostados en carpas -en las vías principales y urbanizaciones exclusivas de nuestro país- varían dependiendo de su fisionomía, actitud y disociación sicótica.
Más allá de los financistas, que según voceros del PSUV, del Polo Patriótico, incluso de analistas internacionales, son el Departamento de Estados de los Estados Unidos y sus aliados en Venezuela como Maricori, Leopoldo -Cheque PDVSA- López, Antonio -Vampiro- Ledesma, Enrique Capriles o los bellacos que conforman la Mesa de la Ultra Derecha, MUD; estos chamos tienen un verdadero ingreso mensual, que no tiene nada que ver con: “el desabastecimiento, la inseguridad personal o la autonomía universitaria”. Su trabajo, muy bien remunerado por cierto, consta de trancar vías peatonales y vehiculares, quemar contenedores basura, incendiar carros del gobierno, mientras más grande es el carro, la paga es mayor; quemar sedes del Partido Socialista Unido de Venezuela, Centros de Diagnósticos Integrales, Cantv, universidades como la Unefa o escuelistas -como preescolares- con niños dentro.
Los “estudiantes” mejor pagados son aquellos que tienen pinta de tierrúos, así como aquellos que manipulan bidones de gasolina como si se tratara de una botella de Coca-Cola o quienes se atreven a quitar las bocas de visitas, alcantarillados o lanzar bombas molotov a la Policía Nacional, esos obtienen una ganancia de 10 mil mensual, los que solo pintan carros “No + bala”, entre otras consignas fofas, reciben sueldo básico y los que hacen guardias nocturnas y fines de semana, cogen 500 bolívares, incluyendo agua potable, comida, cigarros aliñaos y una tarjeta de 120 bs., para su celular. No es casualidad que hayan intentado posesionar la etiqueta: #ElQueSeCansaPierde, debido a que hay mucho dinero en juego y no hablemos de los francos tiradores que cobran en dólares, ni de los que se encapuchan para arremeter contra la fuerza pública y contra “sus vecinos” de Chacao y Baruta en Caracas, así como los que se encuentran frente a McDonald’s en Araure en Portuguesa; urbanización del Este en Barquisimeto, Lara; urbanización Ferrominera en Puerto Ordaz, Bolívar; urbanizaciones Delicias Norte y La Marina, conocida como San Jacinto en Maracaibo, estado Zulia; Prebo I y Prebo II en Valencia, Carabobo y pare de contar, quienes devengan 12 salarios mínimos.
Estoy seguro que la República no se perderá en la manos de nuestro presidente Nicolás Maduro, hijo de Chávez, como tampoco se perderá en la conciencia de los Venezolanos que amamos la patria. Le sugiero a los padres de esos “estudiantes” que verifiquen qué están haciendo, con quiénes ser reúnen, porque después de ojo sacado no vale Santa Lucía, tan solo que esos “padres abnegados” sean tan guarimberos-terroristas que sus hijos.
PD: La muerte de Gabriel García Márquez, así como con la Mario Benedetti en el 2009, el periodismo de investigación y las letras quedaron en desolación y los periodistas que ejercemos este “noble oficio” con conciencia social, los recordaremos como los grandes maestros del humanismo. Saludos Gabo, hasta siempre tocayo Mario.
