Usted me va perdonar salsero chimbo

¿Con cuál raciocinio el aprendiz de trombonista Willie Colón agrede al Presidente venezolano tildándolo de Dictador? A ustedes lectores, no digan que soy una persona que ofende; eso nunca. Confieso que me gusta el respeto, pero recíproco. ¿Qué le ha hecho Hugo Rafael Chávez Frías a este aprendiz de trombonista para que lo agreda en su debilucha escritura?

A este obeso pesonaje le pasa los mismo que a los otros artistuchos: quiere aprovecharse de su condición de personaje popular para poner en entredicho la obra del mandatario venezolano. Por ejemplo nunca he escuchado que Hugo, el pana, ha hablado despectivamente de ese que tiene "el corazón partío" y quizás otra cosa, llamado Alejadro Sanz, empero este mediocre gritador de baladas, se mete con Chávez.

Sucede lo mismo con el berraco que nació en uno de los países que más droga produce llamado horriblemente Juanes, Juanes es plural, este bicharango igualmente abre su bocota de cachaco subdesarrollado para arengar contra el líder de la revolución venezolana. ¿Qué les pasa? ¿Tienen problemas de orden biológico del cual nada quieren decir? ¿fueron alumnos de esos curas pederastas que hoy andan más callados que muerto en urna?

Willie, nombre eunuco, quien como músico es lo que yo soy de astrofísico nos recuerda la cita bíblica que advierte sobre ver la paja en el ojo ajeno. Nada dijo cuando Manuel Noriega presidente de Panamá fue secuestrado por uncle Sam. Nada espetó cuando en Chorrillo los imperialista probando su avión fantasma mataron a centenarse de niños, que evidentemente, nada sabían de las trampas que hacían juntos Norierga y el imperio. Pero así son los eunucos. Ven la candela que no es otra cosa que una figura utópica, pero obvian el fuego que les quema las botas y les achicharra la ignorancia.

¿Quién le dijo a este atropellador de la "salsa" que atacara a Chávez? ¿Serían los mismos productores de cine "jolivundenses" que les dan papelitos de cipayo en esas películas de superhombres e imbéciles tipo "suatzeneguer?" Es muy posible. Una de las características de los lamemsuelas sin personalidad, es dejarse manejar, sumirse a las botas del amo, para escuchar la retahila de ofensas que ha de darle a quienes ellos, los dueños, decidan.

Yo a través de este texto me gustaría recomendarle a Willie, vaya nombre de esclavo, que en vez de inmiscuirse en lo que hace un líder, se dedique a enteNder que significa un pemtagrama, una composición, el manejo del trombón u algo que tenga que ver con música, cosa que este talabartero de las semi corcheas no ha aprendido en los centenares de años que lleva ofendiendo los oidos de la gente.

La única cosa buena que ha hecho este panameño paisano de Noriega es haber logrado que el otro, es decir, Héctor Lavoe lo sacara de la pobreza de cuchitril donde habitaba, porque de no haber sido llevado por la voz y la popularidad de Lavoe, por ahí andara en un "ventetú".

Chávez le queda grande a este soplador sin rítmica, porque como todos sabemos "águila no caza mosca", menos si éstas son asi con ese color nausebaundo que cierra los agujeros de la flauta. Y es más, al líder no le hace falta que alguien le escriba panegíricos, poque lo que está la vista no LE hace falta anteojos.

Es evidente: cada día que pasa a estos bochornos del canto y de la ejecución de instrumentos musicales, la envidia les corroe el pobre cerebrito de oruga. Willie, 'vaya nombre de sirviente! que busque en las partituras, en los esquemas musicales, en la clave, la panacea que ha de enseñarle que es un músico del montón, un sin oido, una pamtomima de aquellos genios que nos daban sus creaciones espectaculares.

Wiillie, el de nombre de eunuco, debe respetar a nuestro Presidente, porque Panamá aun no alcanza la estatura que anheló darle Simón Bolívar, menos ahora que tiene un mandatario millonario manejando al pueblo. Willie, el de nombre de esclavo, no tiene que meterse en los problemas que sólo nos atañen a los venezolanos en su mayoría, para mantener al líder en la cresta de las olas..."zapatero a tu zapato, músico malo"


aenpelota@hotmail.es


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Ángel V. Rivas

Limpiabota, ayudante de pintura, articulista, Productor Nacional Independiente, editor de El Irreverente. Animador del programa Gigantes del Romance, autor del libro Pacto Satánico y poeta en estado de frustración.

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