Desde Caracas y Bogotá hasta Quito

Lo siento UNASUR y CELAC… pero Juan Manuel Santos no me convenció

Creo fehacientemente que en los conflictos de cualquier índole entre las naciones la primera y mejor vía para solucionarlos es y debe ser la diplomacia, creo incondicionalmente que los verdaderos colombianos son nuestros hermanos hijos de un mismo padre y un tricolor del mismo color, creo irremediablemente en la paz por encima de la guerra, creo en mi ingenuidad como en la falsedad de Juan Manuel Santos porque nunca utilizó la diplomacia sino para ofender y amenazar de ir a los organismos internacionales para acusar a Venezuela de violadora de derechos humanos, como buen fariseo y como bien lo dijera el Gran Jesús ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que de fuera, a la verdad, se muestran hermosos, más de dentro están llenos de huesos de muertos y de toda suciedad. Y todo porque en el pasaje de las sagradas escrituras sobre los fariseos, ellos no cumplían la ley, solo fingían cumplirla.

Hoy lunes 21 de septiembre de 2015, día Internacional de la Paz, la historia de nuestra América la del Siglo XXI, ha registrado un hecho que en el futuro será irrefutable para demostrar la hipocresía bogotana. Hoy 21 de septiembre el presidente obrero Nicolás Maduro partió de Caracas y al llegar al aeropuerto internacional Mariscal Sucre en Quito, le declaró al mundo que Venezuela es territorio de paz y lo manifiesta diciendo "Venimos con la mayor de las voluntades, no va a ser fácil, pero estamos obligados a que de esta reunión salgan buenas noticias de paz". Que así sea y que el tiempo lo demuestre.

Si por algo debo comenzar es por la "primicia" que Juan Manuel Santos inició sobre un hecho histórico conversado con el Gigante de América Hugo Chávez en el 2010 cuando Nicolás Maduro era canciller de Venezuela y el suscrito del conflicto había sido elegido como presidente de Colombia, argumentando que Chávez reconocía que ambos países tienen modelos diametrales… y otras alusiones más o más bien, otras alucinaciones de Juan Manuel Santos, y muchos nos preguntamos ¿Qué disparate es este? Si Tabaré, Correa y Maduro fueron precisos y concisos en los planteamiento, argumentos y acuerdos, porque Santos divagó en la repuesta. Comento esto porque la repuestas de Juan Manuel Santos están alineadas o en concordancia con el lenguaje gestual que manifestó durante su intervención, si hubiera estado conforme, alegre como se esperaba, sus gestos hubieran sido otros, pero es indudable que el lenguaje gestual habla más que mil palabras y a Juan Manuel Santos nos comunicó con su lenguaje corporal lo que piensa del acuerdo, el subconsciente no lo dejó actuar con diplomacia, ni cuenta se dio que actuó con hipocresía y no podía ocultar su impotencia.

Que alma puede negar en nuestra progresista Suramérica, en la UNASUR de Tabaré Vázquez y en el CELAC de Rafael Correa los 7 acuerdos que convinieron en Quito.

1. Construir un acuerdo que solucione los problemas de la frontera común

2. Fortalecer el diálogo bilateral

3. Retorno inmediato de embajadores de Venezuela y Colombia

4. Realizar investigación profunda de la situación en la frontera

5. Reunir equipos de ministros para tratar temas sensibles el miércoles 23

6. Progresiva normalización de la situación en frontera

7. Continuar trabajando con el acompañamiento de Ecuador y Uruguay

Acaso ¿no fue esto lo que siempre pidió el obrero mayor de Miraflores -con algunas variables-? ¿Qué es lo novedoso en estos acuerdos? Con razón Juan Manuel Santos estuvo incomodo todo el tiempo, que ni siquiera aplaudió una sola vez al presidente de la República Bolivariana de Venezuela mientras que su homologo respondió con la diplomacia que corresponde en un encuentro de esta magnitud continental. Ojala y Juan Manuel Santos pueda cumplir los acuerdos y no sea un hipócrita fariseo de este siglo

Para mí, Juan Manuel Santos no le hizo honor ni mucho menos un favor a la diplomacia, por el contrario. Juan Manuel Santos no le hizo distinción al lenguaje corporal, más bien lo enturbió. Juan Manuel Santos no le dejó inclusive esperanza a los colombianos que salieron a protestar en ambas naciones hermanas, solo la distancia de los hechos en el "futuro" dirá si estoy equivocado. El golpe duro que le dio el obrero mayor de Miraflores Nicolás Maduro lo obligó al dialogo de Quito, no tenia de otra. El tiempo es el mejor testigo, el mejor juez y mejor aliado para demostrar la verdad.

En honor a lo que creo, en este encuentro de Quito, el único que ganó fue el obrero mayor de Miraflores Nicolás Maduro, es decir solo su verdad, la que pregonó desde que se inició el conflicto fronterizo, porque quedó reflejada en los 7 acuerdos, pero la solución por parte del modelo de gobierno neoliberal de Colombia serán pañitos de agua tibia para que el inquilino de la Casa de Nariño se oxigene en un nuevo plan del imperio gringo en esta crisis que se le escapó de las manos creyendo y creyendo que al obrero de Miraflores le temblaría el pulso para tomar las medidas de Estado de Excepción que afectaron considerablemente la estabilidad de Colombia o quizás pensaría Santos que a Maduro le faltarían las esféricas para sostenerlas por tiempo indefinido y tuvo que correr a Quito desde Bogotá.

 

Nuestro legado… también es sagrado

ivanmendez2006@cantv.net



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Ivan Méndez

Ingeniero. Articulista, productor/locutor y conductor radiofónico. Escritor

 ivanmendez2103@gmail.com

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