Las sanciones de EE.UU. que afectan a la importación de medicinas por Irán son “crímenes de lesa humanidad”, denuncia el ministro iraní de Salud, Said Namaki.
“Los embargos y las restricciones impuestas por Estados Unidos que afectan al suministro de medicamentos y al sector de la salud de Irán constituyen crímenes de lesa humanidad”, ha subrayado este lunes el responsable persa.
A pesar de ello, ha proseguido Namaki, Irán ha logrado producir más del 97 por ciento de las medicinas necesarias en el país, empero, los embargos “ilógicos e inhumanos” de Estados Unidos han creado problemas para ciertos enfermos.
El ministro iraní de Salud ha destacado que muchas empresas y científicos iraníes están contribuyendo a los esfuerzos del Gobierno para producir todos los medicamentos que requieren los pacientes iraníes.
Hablando en una conferencia de prensa conjunta con su homólogo libanés, Yamil Yabak en Teherán, la capital persa, Namaki ha expresado la disposición de Irán para suministrar medicamentos a El Líbano, e incluso proceder a la transferencia de su tecnología médica.
La Casa Blanca reimpuso los embargos a Irán tras salirse en mayo de 2018 del acuerdo nuclear de 2015 suscrito con Teherán y el Grupo 5+1 (entonces integrado por EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania).
Desde entonces, ha ido aplicando una política de “máxima presión” contra Irán, amenazando con castigar a otros Estados, si continúan comerciando con el país persa.
La Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya ordenó en octubre de 2018 a EE.UU. suspender las sanciones relacionadas con bienes humanitarios, medicamentos y aviación civil.
EE.UU., sin embargo, sigue sin acatar el fallo de la corte sobre los embargos. Irán denuncia que las sanciones están siendo utilizadas como una herramienta de presión y están afectando, en realidad, al sector de la salud iraní al restringir el acceso del país a los servicios médicos y sanitarios.
