Siglo XXI, ¿los mismos pensamientos?

No se puede obviar que desde el Mayo Francés no ha ocurrido algo que resulte atractivo para la juventud irreverente, más allá de la unión de los pueblos latinoamericanos, caribeños y centroamericanos. El Mayo Francés fue algo inolvidable. Fue una lucha tenaz realizada contra el tinglado de unos patrones obsoletos. La anciana política del destiempo, que fungía de rector dominante y a la cual la juventud francesa, apoyada por intelectuales de la talla de Jean Paul Sartre enfrentó para recordarle que la historia para ser escrita debe pasar primero por el génesis.¡Claro!, no me refiero a jóvenes como Yon Goicoechea o a los de Santacruz en Bolivia; esos pertenecen a los genes de imperio criminal, quien los defeca vía oral para que no crezcan las moléculas de la inteligencia.

Pero la década del sesenta se fue y la brisa tapó de arena el camino que hizo ebullición en Francia. Algunos nostálgicos aducen que el nacimiento del conjunto musical The Beatles, la aparición del guitarrista Iimi Hendrix, interpretando el himno nacional de ese país en su instrumento, la presencia de la escandalosa Janis Joplin, la realización de grandes conciertos, por ejemplo Woostok, fueron parte de una rebelión anti sistema que se supuso atacó las bases de una sociedad sumida en lo medieval; lo arcaico que sometía con sus conceptos engominados a aquella juventud que solamente servía para seguir al pie de la letra lo que los viejos arengaban.

Fue una mentira histórica creada por el sistema capitalista, imperial, cuyo fin siempre ha sido drogar a los jóvenes para que sigan durmiendo. The Beatles resultó ser un medio publicitario que se proyectó por el mundo, atrapando con sus vapores a quienes vivían ignorando a los pueblos que se incendiaban. Recuérdese que mientras los chicos de Liverpool seducían con sus cantos, vestimentas y declaraciones, otros jóvenes de esa misma generación eran enviados a Vietnam, a una guerra de donde no regresaron vivos más de medio millón de ellos.

The Beatles fue la continuación del Elvis Presley de la post guerra. Esa es la manera con la cual el imperio estadounidense y sus socios de Europa, hacen que “una cosa tape otra”. Sí hacemos un breve análisis de la vida de esos personajes que en momentos de conflictos aparecen para “tapar el sol con un dedo”, descubrimos entonces, sólo para dar un ejemplo, que “”Elvis Presley, Iimi Hendrix y Janis Joplin murieron bajo los efectos de las drogas, ¿qué ejemplo pudo resultar para una sociedad mundial que aparentemente siempre ha luchado contra el flagelo?

¿Recuerda usted cuáles canciones hablaban del dolor de los niños vietnamitas atrapados en los arrozales bajo la furia mortal del Napal lanzado por los gringos? ¿Existió uno de esos rokeros, incluido Joe Cooker que lanzara al viento contaminado de marihuana en Woostok un lamento a la injusticia de la guerra provocada por Estados Unidos? Solamente Muhamad Alí, en ese tiempo Cassius Marcellus Clay, declinó ir a combatir a Vietnam, aduciendo que “a mi esos chinos no me han hecho nada para ir a matarlos”, lo cual le costó ser despojado de su título de campeón mundial del peso completo e ir preso. Así actúa el imperio. ¿Le recuerda algo más reciente? Vea, cuando Clinton se encerraba con Monica Lewinski en la oficina oval de la “casaguai”, el chivo expiatorio fue siempre Michael Jackson. Clinton cometía adulterio en la oficina oval, pero la noticia era que Michael estaba “violando” niños en Neverland.

Por eso cuando escuchamos que algunos andan por ahí pregonando que “los comunistas se comen a los niños”, que “Estados Unidos es lo máximo”, “ Qué si no trabajo no como y no me importa lo que suceda en Venezuela”, “Que la ropa da caché”, “Qué deseo que rctv regrese para ver sus telenovelas”, que “ojalá seamos invadidos”, “qué me importa un carajo que un millón y medio de venezolanos haya salido de las tinieblas del analfabetismo”, qué “esos tierrúos de los cerros no son gente”, “qué me voy a meter unos biyuyos para irme a vivir al este”, “ qué adoro al rey y a la reina equis”, “qué tengo que poseer un auto de lujo para ser alguien”, QUE ME IMPORTA UN CARAJO LA REVOLUCIÓN”, entonces uno se inserta en la nostalgia del Mayo Francés, mientras dos lágrimas se les resbalan por los pómulos del honor, ¿qué significado tiene ser hombre o mujer con esa actitud de falsos valores intelectuales, irreales y pitiyanqui?

PD. John Lennon, The Beatles, pudo escapar de la mentira imperial. No se prestó para seguir el engaño y eso suscitó que el grupo se desintegrara. Para eso se valieron de Yoko Onno, hija del imperio del Sol Naciente.

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Ángel V. Rivas

Limpiabota, ayudante de pintura, articulista, Productor Nacional Independiente, editor de El Irreverente. Animador del programa Gigantes del Romance, autor del libro Pacto Satánico y poeta en estado de frustración.

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