Iniciemos este articulo con un poco de teoría, el término política proviene del latín politicus y este término del griego politiká, una derivación de polis que designa aquello que es público, o politikós, que significa 'civil, relativo al ordenamiento de la ciudad o los asuntos del ciudadano'. La palabra griega polis, cuyo significado hace alusión a las ciudades griegas que formaba los estados donde el gobierno era parcialmente democrático. El término política es un término muy amplio, y puede definirse como una actividad orientada en forma ideológica a la toma de decisiones de un grupo para alcanzar ciertos objetivos. También puede definirse como una manera de ejercer el poder con la intención de resolver o minimizar el choque entre los intereses encontrados que se producen dentro de una sociedad. (https://definicion.de/politica/).
Estoy seguro que muchos de los que leen los artículos que aparecen en este foro conocen el concepto y saben de política en términos generales, lo que es lo mismo tienen un cierto nivel de cultura política, no es mi intención dictar cátedra, ni alardear de ser un ilustrado en las ciencias políticas, solamente quiero aportar desde mi percepción y mi vivencia cotidiana algunas opiniones muy personales relacionadas a la desviación, tergiversación y lo desvirtuado en lo que se ha convertido la manera de ejercer y hacer política no solo en la República Bolivariana de Venezuela (RBV) en el último siglo, sino también a nivel mundial.
En lo particular entiendo que la política pensada y practicada con buenas intenciones; como la manera de concatenar pensamientos y concepciones ideológicas progresistas y transformadoras, apoyadas en propuestas y proyectos los cuales llevados a la práctica por un individuo o grupo de ellos (as) puedan ser establecidas en acciones y hechos concretos que benefician de manera positiva al colectivo. También la entiendo como ese andamiaje que hay que ir armando desde lo ideológico, pasando por lo discursivo hasta llegar a concretar y consolidar lo anterior con resultados, intentando alcanzar con ello la mayor suma de felicidad posible para el pueblo, tal como lo planteaba en sus discursos nuestro Libertador Simón Bolívar y lo citaba y recalcaba el Comandante Hugo Rafael Chávez Frías. Es por ello que me causa indignación lo que algunos personajes de la historia, politiqueros de oficio, pseudo líderes y gobernantes de cuestionada calidad ética y moral hayan convertido la política en una actividad clientelar, donde prevalece el amiguismo, nepotismo, el irrespeto e inclusive los que utilizan altos cargos para exigir favores íntimos a damas que posteriormente son beneficiadas con alguna de las política asistencialista o con algún trabajo dentro de la administración pública sin tener el compromiso político o capacitación técnica para ejercer esos puestos, esto último con el debido respeto que se merecen las féminas pero no se puede ocultar el sol con un dedo, hay casos puntuales pero los hay, la política es utilizada en algunos casos para satisfacer los bajos instintos de algunos personeros.
La política debería ser un accionar cotidiano de carácter pragmático y resolutivo para la sociedad, donde todos sin ningún tipo de discriminación se vean incluidos, atendidos y satisfechos en sus necesidades básicas como es la alimentación, salud, educación, vivienda, trabajo, deporte, cultura, recreación, transporte y servicios públicos. Y en un segundo plano pero no menos importante el poder acceder a algunos bienes como vehículos, viajes y turismo, etc. De igual manera el acceso a las últimas tecnologías que permita a los ciudadanos de todas las edades estar informados y capacitados para estar al nivel competitivo requerido por el nuevo orden mundial.
Se ha desvirtuado tanto la política que gran parte de la población se mofa de ella y de los que la practican, hay expresiones populares muy jocosas que dicen que si te quieres hacer rico metete a político, otras hablan del político bufón, demagogo y populista que en campañas electorales le promete al pueblo que le construirá un puente y el colectivo le responde es que no tenemos río, y el politiquero le contrapuntea diciéndoles también les hago el Río. Por otra parte también hay quienes con un discurso ambiguo e inconsistente, pregonan y proponen a los demás una vida llena de austeridad y limitaciones, mientras ellos ostentan una vida llena de lujos y placeres, son simples comentarios que la gente expresa y sirven para ejemplificar como el politiquero se bula del pueblo y les falta el respeto.
Es por ello que se necesitan lideres coherentes con su pensamiento (Ideología), lo que dicen (discurso) y lo que hacen (praxis) para rescatar desde su concepto original la forma de concebir y hacer política, es justo, necesario y urgente retomar a las sendas de la Política con "P" mayúscula, de otra manera estaríamos permitiendo que cada vez más se desacredite y se desmejore la forma de ejercerla y por ende un mayor deterioro e incremento de la descomposición social que hoy embarga a la sociedad. Por último la Política debería estar orientada al servicio de la sociedad y no la sociedad subyugada a los designios y caprichos de los que ejercen la política.
*INGENIERO DE PROFESIÓN, HUMANISTA E INTERNACIONALISTA POR VOCACIÓN Y REVOLUCIONARIO POR CONVICCIÓN.
Pablo.vitola@gmail.com