"Locura es hacer lo mismo una y otra vez, esperando obtener resultados diferentes".

Frase erróneamente Atribuida a Albert Einstein

Esta frase genial, atribuida erróneamente al físico Albert Einstein, no solo aplica para el gobierno bolivariano en su nuevo propósito de hacer una "renovación parcial y profunda", sino también para el PSUV, en el marco de su cuarto congreso.

No basta con colocar "nuevas" personalidades en los ministerios, ni mucho menos rotar las personalidades del primer círculo de confianza u otros que estén por postulación de uno de los grupos de poder dentro del chavismo. Me atrevo a decir que ni siquiera, colocando puros jóvenes, como viceministros, tendremos alguna posibilidad de cambio o nuevos resultados. Es idealismo pensar que la juventud es garantía indefectible de eficiencia, eficacia y honestidad. El asunto de la transformación del estado, va mucho más allá de la política del juego de las sillas. Los ministerios son estructuras precisamente diseñadas para que nada cambie, para mantener la burocracia, el clientelismo y la corrupción a la máxima potencia. Ninguna persona que se coloque como ministro podrá lograr resultados diferentes a los actuales; solo logrará en el mejor de los casos, mantener la inercia procedimental o tramitadora del proceso general del ministerio. Es más, en muchos casos (por no decir en todos), la misma estructura, los manuales de normas y procedimientos y el personal que lleva años perpetuado dentro de las oficinas (carrera administrativa), terminan en menos de un año quebrando al ministro; y este termina sus días de ministro como ineficiente hablador de paja, jalabola adulador del presidente o corrupto.

Para una transformación de los ministerios, debemos demoler la estructura ministerial. Los ministros deben surgir desde propuestas acordadas y discutidas según cada sector; por ejemplo: los médicos y trabajadores de la salud deben postular los candidatos a ministro de salud; los maestros y trabajadores de la educación deben hacer lo propio, al igual que los cultures y trabajadores de la cultura, los deportistas, entre otros. El ministro de trabajo, por lógica debe surgir de los sindicatos y los consejos de trabajadores. El ministro de la comuna, también debe surgir como propuesta de los comuneros. Es decir, de esta forma, los ministerios serían del "poder popular", más allá del nombre. Ahora bien, cada ministro deberá trabajar guiado por un proyecto o metas concretas que puedan ser evaluadas en el tiempo por el mismo sector que lo postulo. Este sector en asamblea podrá revocarlo al constatar que no ha cumplido las metas propuestas.

Por medio de una página web con acceso diferenciado, todas las personas que pertenezcan al sector postulante del ministro, podrán verificar el avance, estatus y seguimiento de las propuestas, proyectos y metas; igualmente podrán hacer recomendaciones y denuncias. También se deberá escoger un día por quincena, para una interacción y discusión en vivo por una herramienta de chat, entre el ministro y los postulantes del sector.

Por otro lado, la gestión ministerial debe descentralizarse geográficamente de Caracas. Se deberán establecer dos o tres núcleos nacionales de ministerios que funcionen en diferentes regiones del país; occidente, centro, llanos u oriental. Es un error, que cada ministerio tenga un funcionamiento diferenciado. Deben existir taquillas únicas según agrupación de ministerios, es decir, todos los ministerios del área económica o productiva, deben manejar tramitación similar bajo una misma taquilla y hasta lograr formatos y planillas unificadas.

Todos los trabajadores del ministerio y demás entes del gobierno, deben hacer trabajo voluntario productivo un día cada quincena. Una de estas actividades voluntarias debe ser la inspección y supervisión de especulación, acaparamiento y otros delitos económicos. Los días de trabajo voluntario productivo, deben establecerse de tal forma que todos los días esté un ministerio o ente del gobierno diferente en la calle protegiendo al pueblo.

Por otro lado, el cuarto congreso del PSUV, corre el mismo riesgo de anegarse en discursos, propaganda y deseos que no empreñan. En este caso, aplica la misma crítica; no se va dan a dar los cambios necesarios, si seguimos haciendo lo mismo y con las mismas personas de siempre. Todavía están pendientes las cinco estrategias de acción política que propuso el comandante Chávez en enero del 2011, para la transformación del partido. Es evidente compañeros, que hay un grupo numeroso y con las más altas responsabilidades, que no quiere que el partido cambie o se transforme, por temor a perder su poder y afectar sus intereses.

Si de verdad hay intensiones serias de transformar el PSUV, se deben observar las siguientes propuestas recogidas de reuniones, discusiones, peleas y debates, entre militantes de base:

"El PSUV, debe apoyar al gobierno, pero no puede ser un apéndice de éste".

"El PSUV, debe vigilar, controlar y criticar".

1) NINGÚN MILITANTE EN FUNCIONES DE GOBIERNO O EN CARGOS DE ELECCIÓN POPULAR, PODRÁ OCUPAR NINGUNA RESPONSABILIDAD DE DIRECCIÓN DENTRO DEL PARTIDO, EN NINGUNO DE LOS NIVELES, NACIONAL, REGIONAL, MUNICIPAL O PARROQUIAL.

2) Transformación de la estructura del partido. El partido, para que sea orgánico, debe organizarse en sectores políticos de lucha, como el campesino, indígena, funcionarios, trabajadores, mujeres, juventud, profesionales y técnicos, empresarios, cultura, entre otros. Estos grupos deben seleccionar sus mejores cuadros políticos para asumir las direcciones desde lo local, hasta lo nacional.

3) Las formas de organización del partido como las patrullas y unidades de batallas, deben estar activadas de forma permanente y no solo en elecciones.

4) Superar el método cuantitativo virtual y adeco del 1x10, y avanzar hacia una estrategia de promoción electoral basada en lo territorial, georeferenciada y geopolítica. (Punto y círculo político)

5) Activar y promover un proceso continuo de formación para la militancia y reglamentar la obligatoriedad de pasar por esos procesos formativos para ocupar cualquier de dirección dentro del partido y dentro del gobierno, como lo expresa el artículo 11 del estatuto del PSUV.

6) Reglamentar y obligar a los compañeros militantes del PSUV, que se encuentren en funciones de gobierno, en instituciones y empresas públicas, que deben seguir las direcciones del partido, sobre todo la de su entorno geográfico o ámbito de acción inmediato.

7) Establecer comités disciplinarios parroquiales y municipales.

8) Ningún militante del PSUV, podrá asumir dos responsabilidades de gobierno o de partido, simultáneamente. (Superministros)

9) Establecer un sistema de logros para militantes destacados.

 

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