Comunicado del Frente Alternativo Revolucionario Venezolano

"Es tiempo de nacionalismo por un verdadero Socialismo, participativo y protagónico" (FARV)

En Caracas a los 10 días del mes de abril de 2018


Caracterizar el proyecto de la Revolución Bolivariana de nuestro país, es rememorar la Historia Republicana desde las luchas de la Resistencia Indígena, pasando por la gesta independentista, las luchas populares, la lucha de los años 60 del siglo 20, hasta nuestros días, somos herederos de un historial antiimperialista que se desarrolló con fuerza, con un ímpetu por alcanzar la libertad, lucha inspirada en nuestros grandes héroes como Guaicaipuro, Naiguatá, José Leonardo Chirinos, Simón Rodríguez, Simón Bolívar, Francisco de Miranda, Antonio José de Sucre, Livia Gouvernier, Argimiro Gabaldón entre otros, que ofrendaron sus vidas por la liberación nacional y el Socialismo. "El espíritu de rebeldía debe vivir en cada uno de nosotros para seguir avanzando para no estancarnos" (4 de febrero de 2013, HCHF).

En el año 1999, como revolucionarios de la izquierda venezolana dimos un gran paso con el cambio de la Constitución que recogió el sentir del pueblo a través de un procedimiento establecido en la Constituyente en Consulta Popular.

Es por ello que hoy en día es necesario y es nuestra responsabilidad, hacer una crítica profunda a quienes dirigen el Proyecto Político Bolivariano; a no alejarse de nuestra Carta Magna y las leyes establecidas pues estarían violando dichos documentos.

Además de ser los grandes responsables de las circunstancias actuales que afectan directamente al pueblo venezolano, al no asumir políticas radicales y solo colocar pañitos de agua caliente para "combatir la guerra económica" a la que hemos estado sometidos en los últimos tiempos. Tristemente los objetivos y la planificación que se planteó para lograr los cambios no han sido alcanzados y se ha profundizado la corrupción, el burocratismo y la ineficiencia. Se desconocen los derechos y garantías de las clases trabajadoras; se persiguen y se excluyen a sectores revolucionarios violando los derechos establecidos en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela; además no hay transporte público, no hay alimentos en los mercados si no los bachaqueados y los que venden a altos precios por asegurar los comerciantes que son importados, mucha improvisación y falta de seriedad en la implementación de políticas públicas, no hay seguimiento, no hay planificación ni coordinación para restringir los pagos excesivos de estos alimentos de la cesta básica. Dónde están los Mercal, Mercalitos. Aquí todo el mundo pone su precio sin control, ¿de qué sirven los aumentos salariales y los bonos presidenciales cuando la cesta básica y los costos diarios de pasaje sobrepasan lo que le depositan al pueblo?.

No podemos ser complacientes, debemos criticar de manera objetiva pero contundente. Debe respetarse y darse la autocrítica del accionar político para fortalecer, avanzar y reorientar la dirección izquierdista. La prioridad es todo el pueblo, no solo sectores aislados. Si bien es cierto que existen intereses por parte de los imperios en el mundo de hacer un cerco económico y financiero en contra de Venezuela y los países de América Latina, también es cierto que la crisis se ha profundizado producto de las políticas erradas por parte de personajes que han colocado en altos cargos que solo han demostrado su incapacidad y su carencia de apego ideológico hacia el socialismo. Se le ha dado responsabilidades vitales a muchos que hoy en día han huido del país y a muchos otros que descaradamente siguen comiendo de las bondades de nuestra nación.

Los actores políticos desde el Presidente de la República, vice presidente, ministros y demás autoridades, deben enfrentar decididamente a los monopolios, los ilícitos económicos, a la especulación y al Acaparamiento, a pesar de tener una obligación de tomar medidas de protección al consumidor y penalizar severamente tales hechos, como lo establece la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en los artículos 113 y 114 (convirtiéndolos en letra muerta), el pueblo trabajador es el que está padeciendo la inflación inducida por esta guerra económica y la inflación estructural.

El estado debe asumir su responsabilidad y aplicar el peso de la ley, de no ser así, continuaremos siendo víctimas de los desafueros e impunidad en lo económico, con un impacto negativo en lo social y la salud del pueblo trabajador.

Cuando dibujamos los diferentes problemas que agobian al pueblo sabemos que debemos resolver de manera tajante;

1) lo económico, controlando la inflación, especulación y acaparamiento.

2) la imposición administrativa - política a la que hemos estado sometidos, con un gabinete que nunca cambia, que no da respuesta y es premiado por sus incapacidades, creando con ello que la izquierda se vea directamente afectada.

3) el contrabando que es permanente y sostenido a lo largo y ancho de nuestras fronteras en complicidad con algunos funcionarios irresponsables y corruptos. La extracción de alimentos, gasolina, minerales, coltan, oro, diamante son el día a día en nuestras fronteras.

4) el narcotráfico

5) ​Revisión de las políticas en relación con los derechos humanos hay que corregir la gravedad existente por parte de quienes abusan del poder, entendiendo que no es política de Estado pero que así lo hacen parecer.

6) Revisión de estadísticas: Huida de nuestros jóvenes y familias a otras tierras, hoy en día vemos como se fracturan las familias al despedir diariamente a sus hijos en los aeropuertos y terminales terrestres, muchachos que atraviesan el mundo en autobuses buscando la manera más económica de vivir y conseguir nuevas oportunidades: trabajo, estudio. El Gobierno Nacional debe hacer una revisión estadística de estos números, porque si bien es cierto que siempre ha habido salidas, en la actualidad no hay ni una sola familia venezolana que no esté desmembrada.

7) Repatriación de capitales, fortalecimiento de nuestra moneda, introducir una sola banda de cambio que permita demarcar la oferta – demanda para buscar el equilibrio económico.

8) Regreso de militares a sus cuarteles para la defensa de la Patria y de la Soberanía; si tanto se habla y se asegura que pudiese darse una intromisión imperialista entonces lo correcto es que estos estén dentro de sus batallones entrenando y entrenándose para estar en constante alerta

9) Construcción de un partido netamente revolucionario, dejar los guetos que no conducen más que a la desviación del pensamiento ideológico. Evitar las divisiones del movimiento popular y de la izquierda revolucionaria inventando nombres nuevos pero que son más de lo mismo, porque son comandados por las mismas cabezas.

10) Reimpulso de la Escuela de Cuadros de Chávez a fin de formar y adiestrar desde el punto de vista ideológico a nuestra juventud

11) Elaboración de un Plan de Emergencia Nacional que permita la producción nacional y la reactivación del empleo con las garantías sociales que merecen los trabajadores. Restablecer el Estado de Derecho

12) Desarrollar un Plan Estratégico que permita generar confianza a la inversión nacional y extranjera con la seguridad jurídica del Estado.

13) Inclusión a las políticas de Estado que favorecen al pueblo sin menospreciar a las distintas clases sociales, es un derecho de todos los venezolanos el recibir atención y ayuda por parte de sus dirigentes y funcionarios públicos.

14) Incentivar a los profesionales venezolanos al trabajo productivo eficiente dentro de nuestras regiones y en la capital a fin de detener la fuga de cerebros que captan otras naciones al ofrecerles mejor calidad de vida.

15) Entendiendo que el mundo es multipolar debemos tener aliados, esto no significa que entreguemos nuestras riquezas naturales a otros imperios distintos al de los EEUU, que también atenten en contra de nuestra soberanía e independencia bajo la figura de aliados socialistas, pues también nos boicotean internacionalmente contra nuestra estabilidad económica.

​ Es importante dejar claro que se inició un Proyecto Político Revolucionario de la mano de Hugo Chávez Frías al cual nosotros los de izquierda apoyamos y avalamos; entendemos que con el Socialismo se transita a través de un camino largo y difícil; pero también sabemos que en la actualidad no vemos a una revolución popular y menos socialista.

Aquí no hay ni Socialismo y muchos menos una oposición seria. Aquí vemos opositores mandando a muchachos a guarimbas como carne de cañón y a otros montándose en grandes cargos. No entendemos cómo se les suma responsabilidades a gente que se sabe que viene de la derecha rancia y no se les da oportunidades ni se abren espacios de discusión para escuchar los planteamientos de izquierda. Sin embargo, si se hacen discusiones públicas a través de cadenas con gente de la derecha y de sectores rancios de la oligarquía. Tenemos y debemos construir una plataforma de unidad revolucionaria de izquierda que permita reconstruir la Venezuela que todos queremos, defendiendo nuestra identidad, nuestra cultura, nuestro territorio y las riquezas que pertenecen a todos para sacar adelante a nuestra nación.

Dónde están los que lucharon aquel 4 de febrero como parte del poder popular, qué cargos tienen, a cuáles de ellos se les escucha.

Los círculos de Poder y entorno han hecho mucho daño al proceso por sus vicios y desviaciones, han desilusionado a una gran parte de la población que aún mantiene las esperanzas de aquel febrero Rebelde; que entiende que aún está a tiempo de recuperar los espacios conquistados por la corrupción, el burocratismo y todas aquellas desviaciones existentes dentro del propio seno de Gobierno.

Rectificar es posible, si se aprende a escuchar las críticas y autocriticas que sean necesarias para reorientar y corregir los errores que se han cometido. Presidente Nicolás Maduro, apoyamos y creemos en la democracia, somos de izquierda y usted nos conoce, sabe quiénes somos. Por ello le pedimos que reflexione. Nuestro afecto es a la Constitución del 99, pues ella nos garantiza PAZ, gobernabilidad, tranquilidad y vida.

Es su responsabilidad buscar nuevos liderazgos alternativos dentro de la izquierda revolucionaria para renovar a las actuales autoridades que en honor a la verdad, han carecido de una política sistemática para reprimir a aquellos sectores antinacionales que aúpan una intervención del imperialismo, que especulan, acaparan y mantienen los monopolios, de allí lo fundamental de hacer una crítica objetiva en señalar los aciertos y desaciertos, las vacilaciones de quienes dirigen el proceso revolucionario y exigirle que depuren y tomen medidas urgentes conjuntamente con el pueblo para poder derrumbar las estructuras burguesas del Estado que se han mantenido intactas, sin cambio aparente desde el inicio de este proceso.

Es pertinente insertar un pensamiento del Gran Mariscal de Ayacucho Antonio José de Sucre "Siempre insisto en que, sin medidas radicales, no remedian nuestras desgracias, estamos completamente perdidos continuando un sistema vacilante, ya la experiencia ha convencido al más ciego de esta verdad, y los desastres sobre desastres que lamentamos, son el fruto de conductas a medias" (carta dirigida al Libertador Simón Bolívar, Quito 27-10-1828).


Si es necesario que nosotros los revolucionarios convencidos del Legado de Chávez tengamos que cortar caminos y abrir trochas para seguir con nuestra lucha ideológica por mejorar la calidad de vida de nuestro pueblo, seguiremos nuestra línea de lucha incansable con la espada de Bolívar como una oposición de izquierda revolucionaria en contra de quienes hoy vestidos de rojo usan nuestro discurso ideológico en vano

"Es tiempo de nacionalismo por un verdadero Socialismo, participativo y protagónico" (FARV).

Lic. Reinaldo A. García B.



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