33Una práctica magistral del capitalismo es el uso recurrente de eufemismo, un ejercicio habitual de banalizar la carga histórica del lenguaje para encubrir su verdadera connotación de clase. Todo ello a objeto de perpetuar la dominación y asegurar el control de los medios de producción y el sometimiento de la clase obrera trabajadora. El uso repetitivo de frases huecas, la concepción vocabular de mezclar mentiras con verdades para parecer estar sin ser. En ese esfuerzo, se intenta "modernizar" viejos pero claros conceptos utilizados en el marxismo y por las viejas pero vigentes luchas del socialismo. ¿Cómo permea esto a la naciente revolución Bolivariana?
El Estado burgués instalado en nuestra periferia ha manejado este universo semántico para garantizar la perpetuación de una clase sobre otra. Ocurrió en tiempos de la colonia, esa guerra por el control político entre blancos, mantuanos y españoles "puros". Posteriormente continuaría en tiempo de Zamora y la burguesía que se levantó después de la postguerra de independencia, allí caben los logreros prestamistas y usureros con atinente calculo económico. Mas adelante vendrían los lacayos a continuar su dominación hasta la aparición del petróleo, donde ahora se agudizaría la lucha de clases por el control del codiciado mineral. Ya corriendo en la historia y por los años cuarenta aparecería Fedecamaras a objeto de tener el control del Estado y asegurarse el botín del negocio de los hidrocarburos yel inicio de parasitismo petrolero.
¿Donde queda atrapado el "pueblo" en todo este maremagno de luchas? ¿Quien pone los muertos y con qué promesas van a la guerra?
En primer lugar, el partido político refiere a una necesidad de la toma del poder, requisito fundamental para hacer revolución. Sin ambages hablamos de una base doctrinal, una ideología, con proyecto u oferta política a la masa. Un partido tiene estatutos, normas y líneas estratégicas a seguir que mayormente la encarna un líder, en un coyuntura de ganar una elección. Básicamente el PSUV, ha jugado magníficamente este rol con su maquinaria propagandística e ideológica. Con Chávez, no era necesario mucho esfuerzo mediático porque él lo representaba todo, el inicio, el desarrollo y la meta de lo esperado: El Socialismo.
El partido político cumple su rol tanto para las derechas como para las izquierdas, pero en la tradición latinoamericana se convierte en una camisa de fuerza, una línea vertical donde en muchos casos no hay discusión ni debate, solo la línea de mayor jerarquía (que acapara el poder y se asume la encarnación absoluta de los ideales). Esta situación se ha hecho evidente en las pocas liberaciones o debates (por lo menos públicos) de la Asamblea Nacional Constituyente donde existe una sospechosa unanimidad que no le hace nada bien a una revolución. En todo caso lo que intentamos dilucidar es que el partido político está sujeto a lo que es la tradición en la Política; el tráfico de influencia, la aplanadora, la mano levantada, entre muchas otras malas prácticas.
Por otro lado, los movimientos sociales suponen mayor amplitud y necesario debate en el seno de sus contradicciones. Hay un aire de mayores libertades y la autocrítica se asume como una fortaleza para enderezar los entuertos y redirigir el rumbo (Chávez nos habló de la 3R). Los movimientos sociales se aglutinan no con bases programáticas solidas sinomás bien bajo el manto de esperanzas que incluyen un necesario inconformismo con el Estado constituido (aun siendo un supuesto estado revolucionario).
Sugiere el DRAE, que un movimiento es una cambio de lugar y posición. En Política significa cambio de perspectiva para mirar un problema. Ubicarse (criollamente hablando) en los zapatos de los demás. Esto nos permite una mirada más amplia de los problemas de una revolución, creados algunas veces por ineficiencia interna y otras por ataques externos(imperialismo). Otra acepción del DRAE refiere que un movimiento implica desarrollo y propagación de una tendencia religiosa, política, social, estética, etc., de carácter innovador. Esto supone la claridad de lo que se defiende. Más claro, los revolucionarios hablamos de la igualdad social, la justicia, el amor, la solidaridad, la fraternidad de los pueblos y la toma de los medios de producción para evitar la explotación del hombre por el hombre.
Así, los movimientos sociales aun cuando gozan de una concepción clara que los pudiera definir, acogen el debate y la reflexión permanente como herramienta para profundizar las auténticas transformación. Dichos movimientos ya sean en el ámbito, educativo, industrial, agrícola, manufacturero, etc., tienen un lugar común: si son revolucionarios no podrían ser complacientes con el sistema porque su compromiso no es con personas, ni con prebendas de cargos o cálculos políticos a posteriori. Por el contrario, el movimiento social se desarrolla primera en la mente del hombre nuevo, empodera al ciudadano de sus derechos universales, preeminencia lajusticia y parafraseando a Bolívar la moral y las luces.
Entre los obstáculos de dichos movimientos están; ajustarlo a los caprichos de dirigentes, (algunos de los cuales hacen sus cálculos a largo plazo,), la promoción interna del sectarismo, la peligrosa tentación del protagonismo o la complacencia al líder del sistema burgués. Pero aun así, estos obstáculos se quedarían pequeños si no contamos con la impronta del estudio permanente para fortalecer la conciencia revolucionaria. Decía el Che, la conciencia del Deber social para evitar el egoísmo, caballo de Troya del capitalismo.
Ya caracterizando un movimiento social con pertinencia política, en el caso venezolano apunta como eje central al pensamiento del Comandante Chávez, sus necesarios referentes éticos, inclusive su crecimiento en concienciarevolucionaria que comenzó con el libro azul y culminó con un plan de la patria ya elaborando lo mejor de sus ideas. Así, un movimiento social debe apuntar a la construcción del socialismo, con una actitud inexpugnable antiimperialista y con un obligado "horror a la oligarquía" bandera de Zamora defendida por Chávez.
Para fortalecer y valorar este debate en su seno se permite el debate franco y directo sin charreteras, con profundas reflexiones de las desviaciones en los procesos de transformación. También en el seno del movimiento se permite la crítica, se acompaña al camarada si está confundido, se le apoya, se le estimula a la argumentación para alejarnos de la colonización de nuestras ideas. Movimiento cambia perspectivas, convence con argumento, mueve las ideas, las propias y la de los países hermanos que tienen ejemplos para mostrar. Movimiento social reconoce la diversidad en su seno, no etiqueta ni califica a sus integrantes, no hay jerarquía sino profundorespeto por los debates y posturas firmes a la hora que se necesiten tomar en colectivo ante los atropellos, desviaciones e injusticias.
Ahora bien, estos permanentes cambios dentro del movimiento, no implican un acomodo circunstancial para beneficios propios. Esdecir aquí no se defienden hechos materiales sino concepciones de la vida, visiones del capitalismo neoliberal que nos condicionan para no percibir las necesidades del hermano y así no compartir el pan y el vino.
Finalmente, la lucha de clases no como ejercicios de crear parcelas sino en un acto irreverente de justicia para visibilizar al explotador, al egoístas, al aprovechador del débil, al que naturaliza la explotación en frases tan perversas como decir que para que existan los pobres tienen que existir los rico y cosas así. Tamaño insulto a un revolucionario resultaría defender al explotador, ser su servil instrumento para que el cada día tenga mas poder y así someter al mas débil, que solo es visto por él como una mercancía.
Más aun, la lucha de clases define los bandos, debiera de hacer visible a los opresores cuando es auténtica. Larevolución ha sido muy sutil con los explotadores, aquellos que han parasitado de la renta petrolera y han sido consentidos por el Estado burgués recibiendo dólares preferenciales en una supuesta condición natural de que ellos reactivarían la economía. Bien, solo nos han llevado a la quiebra del país, a la chatarrización de la industria nacional puesto que lo menos que han hecho es generar inversión productiva para el país.
Lalucha de clase le pone nombre y apellido a los opresores, llámense Los Mendoza, Los Vollmer, las Machado Zuloaga, Los Cisneros, entre muchos otros. Son los mismos apellidos de la Colina que desde tiempos de Zamoragravitan al lado del poder para asegurar la transferencia de la renta a sus bolsillos.
Del otros ladode la lucha de clases estamos la mayoría, los invisibilizados de siempre, a los que a ellos le dan por goteo, las migajas. Aasí fue la cuarta república y es precisamente eso lo que nole perdonan a Chávez: la democratizacióndel Capital y la transferencia del recursos que antes le robaban a las grandes mayorías. Igual lo sigue haciendo el Presidente Maduro, sigue repartiendo la torta entre su pueblo con las grandes misiones, los Claps y el Carnet de la Patria. Pudiera llegar la hora si lo permitimos que la burguesía intentará decomisarnos ese carnet de justicia y esperanza.
Movimientos sociales, les toca el turno de defender lo legado por un Gigante que te empodero antes de partir. Tú eres Chávez, yo soy Chávez, todos somos Chávez, actuemos pues en consecuencia.