El jueves 15 me dediqué a ver en Facebook la Rueda de Prensa Internacional del Presidente Maduro y una foto bien romántica de él y su esposa Cilia con motivo del Día de los Enamorados. No soy muy facebooksera; sólo me inicié como usuaria para conocer información (única existente) sobre el impago de las pensiones al Exterior del cual soy una acreedora y víctima más, ante el silencio al respecto de las autoridades venezolanas. Así que sólo subo fotos tontas y estos artículos que me publica Aporrea. Pero de repente uno encuentra cosas buenas como conciertos, chistes, trucos de cocina, vídeos sobre las bellezas de nuestra geografía venezolana, y cosas infartantes como que nuestra pensión al exterior con el Dicom flotante, alguien sacó la cuenta y arroja 8€. Yo no. Soy mala con los números como he dicho en anteriores oportunidades.
Escucho al Presidente hablando sobre la protección a los compatriotas venezolanos en el Exterior, víctimas de xenofobia, y no entiendo muchas cosas, porque pareciera que este rechazo comparte su génesis con el mismo gobierno venezolano y con otros muchos compatriotas que afirman que no nos quedamos a defender a la Patria; que quienes se han ido son terroristas, raspa cupos, traidores a la Patria y guarimberos y otros calificativos que nadie quiere en ningún país. Por eso recibí con sorpresa las declaraciones del Presidente Maduro:
"APOYAMOS A NUESTROS COMPATRIOTAS
"Rechazo las campañas xenofóbicas contra los venezolanos y venezolanas. "Apoyaremos a nuestros compatriotas en el exterior, les digo a todos ellos que no están solos."
Y el Presidente da instrucciones a Embajadas y Consulados para cumplir con ese mandato y ahora, con las elecciones presidenciales, el REP servirá para saber cuántos venezolanos están en el exterior.
Pero resulta que, una vez más, estoy fuera de mi país como una proscrita pensionada en el Exterior y, cuán difícil resulta demostrar la integridad nacionalista cuando te espetan: -"Pero si Maduro no paga las pensiones a ustedes los viejos desde hace 2 años y mintió cuando dijo que lo resolvería en Diciembre"; "Si su propio gobierno los llama traidores a la Patria....". Entonces dime, Nicolás: cómo nos vas a proteger si nos tienes desprotegidos a los ancianos pensionados fuera de Venezuela desde hace 26 meses y si Évole no te pregunta hubiesen continuado en el silencio que retomaron ahora?
He escrito tanto sobre lo mismo que Aporrea me expulsara en algún momento, pero es que sólo puedo hablar por el grupo de viej@s pensionados en el Exterior muchos a quienes conozco gracias a estos artículos y que me escriben al menos para tener a alguien que les responda.
La protección podría comenzar desbloqueando los correos del IVSS Exterior; que no le respondan por teléfono a un pensionado que solicita información: "-No sabemos nada. Búsquese la vida"; que los Consulados y Embajadas respondan el teléfono; que no continúen los suicidios de ancianos a causa de la ruina económica, moral y física por el abandono y desproteccion de nuestro gobierno; que hablen, lo hagan claro y, sobre todo, que paguen lo que deben e informen qué será de nosotros en el corto futuro que nos queda.
Como te podrás dar cuenta Nicolás, estamos solos. Muy solos. Ya has oído, leído y conocido el aislamiento de los ancianos; así que no nos digas que "no están solos", porque tu gobierno nos tiene más solos que un retrato y, además, engañados. Si no nos quiere nuestro gobierno, cómo nos van a querer otros?
Y los embajadores y cónsules? Bueno, ellos no necesitan instrucción alguna. Clarita es la Convención de Viena al imponerles la obligación de garantizar la seguridad e integridad de sus nacionales en el pais receptor; pero parece que algunos no la han leído porque ni atienden el teléfono. Entiendo que los pensionados fastidiamos mucho exigiendo nuestro Derecho, pero todo funcionario público también debe entender que ellos son nuestros empleados temporales y uno no debe andarse con tanto miramiento, siempre desde el respeto, claro. Como cuando uno también fue un empleado cualquiera y tenía que aguantarse con su mejor sonrisa al público fastidioso.
Cuando nos vayas a otorgar el Carnet de la Patria, porfa, avísanos, porque si tenemos que enterarnos por Facebook la cosa resulta un pelin informal. No nos vendría mal un Clap.
De paso, no podré votar Nicolás. No he recibido mi pensión desde hace más de dos (2) años y no tengo dinero para viajar a Tenerife dos veces: una para el Registro Electoral y otra para votar. Todavía debo el dinero que me costó enviar a Caracas la Fe de Vida. Así que cuando saquen la cuenta de los venezolanos en el exterior, súmale +1.
GERONTOFOBIA, Nicolás. Se llama Gerontofobia.