Como decíamos en el artículo anterior, tanto la dirigencia gubernamental como la de la oposición mantienen sobre la población venezolana una continua manipulación usando todos los medios de comunicación e información a su alcance. De esta manera mantienen a la población alienada con información falaz, banal, sin importancia y superficial distraído y alejado de todo tipo de discusión de los problemas que son de importancia para la sociedad, hasta el punto que le hacen perder la noción de la diferencia entre lo importante y lo banal. Veamos lo que más resaltan ambos bandos:
1. -. Lo que el gobierno siempre menciona: Generalmente son los logros sociales de la Revolución Bolivariana,(salud, educación, pensiones, pago de la deuda social acumulada, Grandes Misiones) que indudablemente son muchísimos a lo largo de estos quince años, todos atribuidos a ese gran líder que la promovió e impulsó, a pesar de todos los obstáculos de una oposición inconsciente, cobarde, apátrida, traidora, apoyada por Estados Unidos y la oligarquía internacional y a la falta de colaboración de muchos "supuestos revolucionarios y colaboradores" del comandante, algunos grandes traidores (puesto que actuaron de mala fe). No hay ninguna duda que se iniciaron grandes obras y proyectos, muchos de los cuales están inconclusos, o abandonados. Se unificó la FANB, se fortaleció la Unión Cívico Militar. En el Concierto Internacional, Venezuela se posicionó extraordinariamente, se crearon muchas universidades, renació el deporte de competencia, se eliminó, con la valiosa ayuda de Cuba, el analfabetismo. En fin son tantos los logros, que para enumerarlos tendríamos que hacer muy extenso este artículo. El gobierno permanentemente nos los está recordando. No hay duda que la CRBV es de todos estos logros, el más importante.
2. -. Lo que la oposición quiere mencionar: Nada de lo que mencionamos en el párrafo anterior existe para la oposición. Lo primero que afirmaron fue que Chávez dividió a Venezuela. Que antes todo era mejor. Que vivíamos felices en democracia, pero no lo habíamos notado. Que había una perfecta alternabilidad entre AD y Copey. Que Estados Unidos nos tenía en gran estima y nos compraba todo el petróleo que pudiéramos extraer de nuestro suelo; que era un comprador seguro. Que era "amigo de Venezuela" porque era muy democrática. Que todos en el gobierno actual son unos ignorantes. Que Venezuela es una colonia de Cuba. Que el socialismo ya fracasó en todas partes. Que el capitalismo es el único modelo que permite progresar a todos. Que el que no progresa es porque no quiere. Que la escasez que existe en el país se debe exclusivamente a que el gobierno no les da los dólares que piden para poder importar y activar la economía. Que ellos sí saben de economía. Que los pobres son pobres porque son flojos.
3. -. Lo que el gobierno siempre calla: Su incapacidad para manejar la economía, la desaparición de Alcedo Mora, el clamor popular por una auditoría pública que permita esclarecer el enorme desfalco de más de 260 mil millones de dólares causado a la nación por empresarios y funcionarios públicos, cuyos nombres conocen, el descontento del pueblo causado por la corrupción y el desgobierno general, la ineficiencia en las empresas recuperadas y expropiadas debido a la injerencia del gobierno y las juntas interventoras oficiales. El abandono a que se encuentra sometida la agricultura, la falta de infraestructura agraria, de vialidad rural, de energía eléctrica, de pozos, lagunas, de maquinaria, de fertilizantes. La pérdida del poder adquisitivo del salario de los trabajadores venezolanos, la escasez de casi todos los productos, la gran corrupción que existe en PDVSA, en la CVG, en los ministerios, en las gobernaciones, alcaldías y paremos de contar. La cúpula del gobierno no quiere escuchar la crítica, no quiere ver la basura que inunda a todas las ciudades y poblaciones del país. Oculta la necesidad de hacer valer el Poder Popular para realizar colectivamente la Auditoría Publica Ciudadana, única manera de parar este desastre. Para nada habla sobre el ajuste del precio de la gasolina, ni de las mafias de civiles y militares que permiten el contrabando de productos hacia Colombia. También teme que el pueblo exprese libremente su opinión por los medios públicos.
4. -. Lo que la oposición no quiere mencionar: La oposición siempre se ha negado a aceptar que durante muchas décadas se mantuvieron regalando los recursos naturales, especialmente el petróleo a los Estados Unidos y solo acusan a la Revolución Bolivariana de hacerlo a los países del Caribe, especialmente a Cuba, sin reconocer que los servicios médicos, de salud y educación que hemos recibido a cambio son de valor incalculable. De igual manera, ocultan las causas del "Caracazo" y el enorme número de muertos y desaparecidos durante los gobiernos "democráticos" entre 1958 y 1998. No quieren recordar que los niños pobres y muchos adultos se alimentaban con "perrarina", pues sus ingresos económicos no permitían algo diferente.
Que el Seguro Social estaba ya prácticamente eliminado. Que las prestaciones sociales del trabajador venezolano ya las habían desconocido. Que las universidades públicas estaban a punto de ser privatizadas y que ya estaban comenzando a cobrar la inscripción de los niños y niñas en las escuelas públicas. En los hospitales, los enfermos tenían que llevar las sábanas y las almohadas para tener acceso a una destartalada cama. La pobreza y el analfabetismo alcanzaron niveles alarmantes en un país que gozaba de una bonanza petrolera como nunca antes había existido, mientras los "empresarios" afiliados a Fedecámaras se encargaban de absorber todos los dólares que ingresaban por concepto de la exportación del petróleo.
Ellos sí tenían dinero suficiente para tener propiedades en Estados Unidos y Europa y depósitos fabulosos en los bancos extranjeros, mientras el pueblo venezolano sufría los enormes padecimientos económicos que le obligaban a llevar una vida de miseria. Tenemos más de cien años en que nuestra clase dirigente, hoy en la acera opositora, ha estado permitiendo el saqueo de nuestras riquezas de manera continuada y pretenden hacernos creer que no son culpables de lo que ha ocurrido durante tanto tiempo. Durante estos últimos quince años, su actuación a toda acción del gobierno que pretenda favorecer al pueblo ha llegado a los niveles más bajos y perversos, pues ha estado caracterizada por la violencia, el sabotaje, la obstrucción al avance y al bienestar de los venezolanos. El sometimiento y el entreguismo a las directrices del gobierno de los Estados Unidos han sido sus intensiones con tal de poder acceder al gobierno de Venezuela. En síntesis, su actuación ha estado signada por la traición a la patria.
Por eso es que tanto los unos como los otros pretenden distraernos con comentarios y discusiones vacías y faranduleras, con chismes sobre cadáveres políticos de derecha, con opiniones sobre Venezuela expresadas por personajillos extranjeros sin importancia, en fin con excusas para evitar plantear la verdadera preocupación del pueblo venezolano como lo es el dilema entre el capitalismo depredador y el socialismo constructivo.
Lo único que le ha preocupado a nuestra clase dirigente, con muy pocas excepciones, es disfrutar el poder y enriquecerse. En realidad el pueblo venezolano también es responsable de esta situación, pues ha permitido a esa clase dirigente actuar a sus anchas y hacer de este país lo que les ha venido en gana.
Pero podemos enmendar la plana. Aun hay tiempo y espacio, pero ante todo, debemos corregir nuestros errores antes de pedirles "que se vayan todos":
Primero que todo, tenemos que dejar de ser tan tolerantes con los funcionarios públicos. Desde el más bajo nivel hasta el presidente de la república. Tienen que entender que son empleados públicos, que son servidores públicos, que somos nosotros quienes pagamos sus salarios, que el pueblo es quien debe ser obedecido, que cuando se enferman deben acudir a los centros asistenciales del pueblo y no a clínicas privadas, que sus hijos deben asistir a las escuelas públicas, que el pueblo no tiene que aplaudirlos cuando inauguran una obra. Es su obligación y para eso se les paga. Que el pueblo es primero, que él es quien manda. Que lo prometido en campaña electoral se tiene que cumplir, que los privilegios se acabaron.
El gobierno tiene que gobernar o renunciar!
Cuando el Presidente se dirija al país en cadena nacional, esperamos que sus palabras sean orientadoras y se refieran a temas trascendentes.
No podemos seguir aceptando que empresas del estado, como PDVSA, PEQUIVEN, CVG, sean tan ineficientes y no produzcan la suficiente materia prima que la agricultura y todas las otras industrias del país requieren para producir con normalidad. Acaso es culpa solamente de Fedecámaras, Dollar Today, los Pelucones, el Imperio, o los bachaqueros?. O es que tenemos un gobierno que no gobierna!.
Debemos deshacernos del fanatismo político, que nos hace cómplices de su ineptitud, de su incapacidad y de su irresponsabilidad. Que cumplan sus promesas o renuncien si no pueden cumplirlas en el plazo estipulado. Que cumplan las leyes como todos los venezolanos, sin excusas, sin solidaridades automáticas, con transparencia. Ya basta de tantas disculpas y dilaciones. Ya basta de que una decisión tarde meses y hasta años sin ninguna justificación. Debemos defender la inexorabilidad de las leyes, pues como decía Rousseau y repetía a menudo Chávez: "Entre el débil y el fuerte, la libertad oprime, solo la ley libera". Que se apliquen para todos, no solo para los pendejos!. La ley no es solamente para atropellarnos, también debe protegernos!.
En segundo lugar, tenemos que fortalecer el Poder Popular: Ya tenemos, gracias al Comandante Eterno, el marco jurídico necesario para construir dicho Poder. Dicho marco jurídico nos lo proporcionan las Leyes del Poder Popular recientemente aprobadas. Tenemos que fortalecer los Consejos Comunales, las Comunas, las Ciudades Comunales, el Estado Comunal, la Economía Comunal, la propiedad comunal de los bienes de producción, la solidaridad, el Trabajo Productivo y en equipo, disminuir los eslabones de la cadena de comercialización, mejorar la eficiencia, la Contraloría Social, el conocimiento para crear conciencia, etc., es decir, practicar la verdadera Democracia Participativa y Protagónica. No hay duda de que el Socialismo es la única vía para superar el capitalismo, pero debemos tener claro que el Poder Popular es la única vía que nos conduce al Socialismo.
En consecuencia, solo el pueblo organizado y consciente puede encontrar el camino correcto y realizar el Golpe de Timón que anhelaba Chávez y que el pueblo hoy está reclamando.
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