Ponerle unos litros de gasolina a un vehículo en Ciudad Guayana es todo un drama, Las bombas dolarizadas que se esperaban que iban a flexibilizar el servicio, colapso también. El gobierno nacional tiene que amarrarse los pantalones y poner orden en la pea. La ciudadanía que tiene que provisionarse de ese servicio está pasando la de Caín. Son horas interminables pasando noches enteras, que de repente son desalojadas por la guardia nacional cumpliendo órdenes de "arriba". En algunas bombas zagaletones marcas puestos en las colas que son divididas por cuadra, donde cada uno tiene su cacique, quien es el que imparte las ordenes, luego venden, en otras hacen circular listas. En fin, son extenuantes esperas movidas por la incertidumbre, sin van o no van a ser atendidas. En una cola hay 600, que al final solo atienden a 250; otro grupo de cien y dele pasan a través de una cola paralela bajándose de la mula con algunos guardias nacionales, que estimulan estas practican, recibiendo montos por vehículos de cinco dólares en adelante.
Otro ingrediente que se le une a este detestable modus operandi, es con los funcionarios que controlan el funcionamiento de las bombas; con su trato nada amistoso, provocador y amenazante, que en oportunidades llegan a suspender el servicio. Estamos claros que ese funcionario lleva horas, sorteando dificultades, poniendo orden aquí y allá y, eso desestabiliza. Yo considero que vivimos momentos de excepción, pero tiene que prevalecer el respeto mutuo y la cordura. Ese funcionario que está en esa bomba llámese guardia nacional, policía municipal o estadal debería haber sido preparado con un mínimo normas de cortesía y trato a la ciudadanía. También tenemos que considerar que está atendiendo a un público; que ha abandonado su quehacer diario, su familia, su trabajo y el riesgo de contraer el Covid – 19 para meterse en una cola que no le ofrece garantías si va a llenar su tanque o no y que muchas veces suplirse del servicio depende del estado de ánimo de un funcionario que lo saca de la cola o por cualquier motivo, que la huella dactilar no corrió o aparece que su cupo se le agoto. Refiriéndonos al cupo de los 120 litros tenemos que no se están cumpliendo, muchos que solo han consumido 20 40 litros aparecen de repente que consumieron el cupo mensual. En algunas bombas dolarizadas o premium la cantidad de libros a consumir lo establece el que lleve el control, basándose en el criterio "si le cae bien o no" le surten la cantidad a convenir. El pago a través del petro no se está cumpliendo. Recordemos que el ministro Tareck El Aissami, dejo muy claro que no iba a poner impedimentos en el pago de la gasolina.
Otro caso detestable y condenable es la práctica que han asumido el transporte del servicio público que tienen una bomba para aprovisionarse de gasolina, lo hacen, pero luego se les ha visto que la venden; ocasionando dos penalidades, uno que la reciben de gratis como un aporte del Estado, para minimizar la crisis y evitar el alza de los pasajes; cuyo objetivo no se cumplen, puesto que aumentan a su libre discreción el incremento del pasaje. Provocando deficiencias en la prestación de su servicio al publico. No se están tomando medidas.
De la bomba de los Olivos DE Puerto Ordaz, publicaron en las redes sociales a alguien que amaneció en ese bomba y le correspondió el numero 46, el pasado día 13, es una bomba dolarizada; duro más de 30 horas, no alcanzo a cargar el tanque, lo que le paso es para coger palco. Venta de cupos en la cola, bandas organizadas que venden los cupos, presencia de colas paralelas, pagos furtivos a los militares en dólares para surtirse, la cola nunca avanzo…
El gobierno debe implementar la presencia en cada bomba de un grupo multidisciplinario de miembros de los Consejos Comunales, Alcaldía, FANB, UBCHE, PSUVE, policía estadal que vele por este caos que impera impunemente en las bombas; tenemos por delante a un pueblo sometido a estas privacidades y con unas elecciones por ahí cerquita. O hacemos ALGO O LA ANARQUIA NOS DEVORARA.
