La terrible pandemia del Coronavirus ha servido para desenmascarar lo que ya se sabía a voces. Gobiernos irresponsables y colonizados en este continente. A estos gobernantes de pacotilla les quedó grande llegar a esas instancias de poder, y simplemente se quitaron la máscara al responder a tesis neoliberales y mercantilistas para enfrentar este drama. Cómo ya se ha dicho; a ellos no les importa el ser humano, la vida, sino las ganancias de los bancos, seguros y las grandes Corporaciones. Ya vendrá el momento en que los pueblos de esos países le pasen factura a esos títeres del imperio de los EE.UU; por tanta traición e inconsecuencia. Debemos señalar que muchos de esos Presidentes cuando asumieron, lo primero que hicieron fue desmantelar todo el sistema social y de salud pública y expulsar a las misiones cubanas; y ahora claman en silencio por su presencia.
Estos mamarrachos de Presidentes hicieron caso omiso a las recomendaciones de la Organizacion Mundial de la Salud (OMS), O.P.S, Cruz Roja Internacional, entre otras; y aplicaron la "Cuarentena" cuando la pandemia ya se había expandido y ahí están las consecuencias (Alto nivel de personas infectadas con el Covid 19) y un número alarmante de personas fallecidas. No sé atrevieron a dar un primer paso porque lo que importaba era el mercado y las ganancias de los capitalistas. Fue tanta la ridiculez de estos rufianes del neoliberalismo, que vimos a un Jair Bolsonaro de Brasil diciendo que: "Es una simple gripe; no hay que hacer cuarentena. El que se muere es un débil". Hizo caso omiso a los planteamientos de Gobernadores y movimientos sociales de Brasil. Vimos a un Duque peleando con los gobernadores y alcaldes argumentando: "es muy apresurado iniciar la cuarentena; hay que esperar". Hemos visto a un Lenin Moreno (Ecuador) desaparecido del mapa; mientras en Guayaquil y otras provincias de esa nación incineran cadáveres en las calles, ante la carencia de una eficaz política pública sanitaria. Y no hablemos de la usurpadora golpista de Bolivia Jeanine Añez, que ha aprovechado de la pandemia para hacer proselitismo político ante su desgastada imagen. Y el sátrapa de Chile Sebastián Piñera no se queda atrás, y aprovecha la Cuarentena para inyectarle recursos a la banca privada y para poner en libertad a personas involucradas en violación de los derechos humanos.
Pero el bochorno neoliberal lo ha puesto el psicópata supremacista de los EE.UU Donald Trump, quien desde un primer momento dijo: "Esa gripe es pasajera; ¿por qué tanto miedo?... Si llegamos a 200 mil muertos en los EEUU sería una victoria... la gente debe pagar su tratamiento". En este dilema histórico, a consecuencia de la pandemia #Covid 19 se ha puesto de manifiesto; se quiera o no la confrontación de dos modelos de sociedad: El modelo del capitalismo salvaje y su expresión del neoliberalismo; dónde privan los valores del egoísmo, mezquindad, sálvese el que pueda, explotación del ser humano y donde todo es una mercancía; y el modelo de la solidaridad, amor al prójimo, justicia social y donde el ser humano es lo que priva (Socialismo). Esta última expresión se manifiesta en hechos concretos y con logros tangibles por Cuba y Venezuela; en esta región latinoamericana y a nivel internacional por las experiencias de China y Rusia. A la heroica y solidaria Cuba no le ha temblado el pulso para salir con hombres, mujeres e insumos médicos a llevar SOLIDARIDAD a más de 20 países del mundo que ante la tragedia se lo han solicitado. Igual conducta de desprendimiento y solidaridad han tenido China y Rusia. Hasta el imperio USA que solo piensa en pisotear e invadir pueblos, han recibido la ayuda de China y Rusia. Mientras países en Europa (España e Italia) son arrasados por esta terrible pandemia, y el mismo EE.UU ocupa el primer lugar de contagiados en el mundo; está potencia (estados unidos) haciendo gala de su carácter supremacista e imperial no ha parado un minuto en presionar y bloquear de manera coercitiva e ilegal a países soberanos y emergentes como Irán, Cuba y Venezuela.
Es la propia desesperación capitalista, en su expresión más peligrosa. Como lo dice Néstor Kohan: "Una especie está en peligro de extinción: ¡la especie humana! El depredador se llama capitalismo. Cruel y senil; este asesino lleva cinco siglos infatigables de perversa faena. Antes de culminar su agonía y morir de una buena vez; pretende arrastrar a su tumba a toda la humanidad". Amenazas reales de una incursión imperial de los EE.UU laten sobre el hermoso y victorioso proyecto Bolivariano en Venezuela. Este imperio asesino y malvado no nos perdona que hayamos decidido ser libres y soberanos para siempre. Dice de manera elocuente la camarada Pasqualina Curcio: "Mientras una pandemia aflige al planeta, quedó en evidencia la condición inhumana y criminal del imperio estadounidense al arremeter con medidas coercitivas y bloqueos económicos contra pueblos del mundo, impidiéndoles importar alimentos y medicinas: Cuba, Venezuela, Irán, Rusia, entre otros. Asunto tan evidente que la propia Unión Europea, el Secretario General de las Naciones Unidas, la alta comisionada para los Derechos Humanos; se han visto en el deber moral de hacerle un llamado de atención al gobierno de EE.UU y solicitarle el cese de las mal llamadas sanciones".
Ese es el triste panorama del momento: gobiernos irresponsables y cipayos al servicio de una potencia miserable y asesina (EE.UU) en medio de esta terrible pandemia; dónde Venezuela, con el liderazgo del presidente Nicolás Maduro avanzaremos en los próximos días hacia un escenario de normalización vigilada y controlada. Aunque no podemos todavía cantar Victoria, podemos decir que de nuevo estamos demostrando ser buenos hijos de Bolívar y Hugo Chávez. Por supuesto todo cambiará a partir del #Covid 19. Ya lo ha dicho el presidente Maduro: "Después de esto seremos una nueva y mejor humanidad". ¡Que así sea camarada presidente! O como lo dijo alguien por ahí:... "Puede ser, solo es una posibilidad; que este virus nos haga más humano y de un diluvio atroz surja un pacto nuevo; con una rama de olivo desde donde se empezará de cero".
