La situación que hoy nos cubre, me llena de desesperanza , si voy al abasto , noto que cada día los precios son cambiados sin que nadie pueda hacer nada, al parecer el sector empresarial se considera un Dios que hace y deshace a su voluntad, se burlan en nuestra cara, y muchos comentan entre risas: "que viva la revolución".
Cuando paso por la calle y recorro algunas zonas populares, se presentan ante mis ojos innumerables operadores que integran la llamada "economía informal", convertida en esta coyuntura en otro de los tentáculos de la guerra económica; revendiendo productos de primera necesidad ,con el agravante que muchos provienen de las cajas CLAPS( subsidio entregado por el gobierno a una parte de la población más necesitada), Cuando deseamos comprar algún producto, se nos presentan dos precios, si es por medio de pago digital el precio se duplica y esto no solo ocurre en las ventas informales; pues, este modo operandis, ha sido adoptado por la mayoría del comercio considerado como "formal".
En las entidades financieras solo se puede retirar entre 20 y 40 Bs, por lo que si alguien necesita más efectivo, existe una red de trabajadores que se encuentran en las calles ofreciendo la venta de billetes colocándoles un aumento del 100%de su valor.
Los centros de distribución de alimentos propician colas interminables para acceder a productos, sus dueños participan en esta guerra al permitir que el pueblo se sacrifique durante horas en una cola, sabiendo que la cantidad de los productos que posee para la venta es limitada.
El gobierno por su parte trata de dar oxigeno al pueblo decretando aumentos, pero, Luego de cada aumento, automáticamente se disparan los precios de cada uno de los productos que existen en las cadenas de comercialización.
No se consigue ningún medicamento y quién lo ofrece, le coloca precios exorbitantes; son pocos quienes pueden comprarlos.
En las calles del centro de Caracas y en otras parroquias populares de alto transito, se pueden observar personas anunciando que compran Dólares, Pesos, Oro y cualquier otra moneda.
El transporte también aporta su cuota al caos, han aumentado de manera progresiva el precio del pasaje y si no se tiene el dinero completo; pues, no se puede abordar la unidad. No existe ningún tipo de consideraciones con las personas de tercera edad ni con las personas con discapacidad, al parecer se escaparon los monstruos de la "caja de pandora"; como producto de esta situación han venido apareciendo nuevas formas de transporte, los camiones cavas, camiones con plataformas son abarrotados por infinidad de personas que desean llegar a sus hogares,al culminar cada dia es una odisea; cada dia que termina es una batalla contra este sistema que nos roba el poco oxígeno que aun poseemos.
En el Metro, en la calle, en todos lados encontramos personas que culpan al gobierno de todo lo que sucede, mientras carniceros, panaderos, comerciantes se burlan en la cara de todos, del desastre que han realizado con la economía y con nuestro poder adquisitivo.
Como solución, se nos muestra a un Henry Falcón que nos ofrece que si gana las elecciones, dolarizará la economía y colocará el salario mínimo en 75 dólares, lo que no explica es que si dolariza la economía, todos los precios serán dolarizados, incluyendo los servicios básicos tales como: agua, electricidad, gas domestico, transporte, combustible, lo que quiere decir que cada habitante necesitara lo equivalente a dos salarios dolarizados para poder cubrir parte de sus necesidades; además, de que la dolarización hará necesario recurrir al Fondo Monetario Internacional para concretar esta medida;ya que no existe en nuestras arcas suficientes divisas para lograr este objetivo; ahora bien, ¿será que este organismo internacional firmará algún acuerdo con Venezuela sin condiciones? ya conocemos las condiciones de este ente, privatizaciones, reducción de gasto público( becas, subsidios ).
Existe otra opción, el pastor Javier Bertucci, el ofrece, abrir un canal humanitario ,lo que significaría el acceso de los "Cascos Azules", en otras palabras , la toma de una fuerza multinacional a nuestro territorio , ningún país imperialista entregará ayudas sin condiciones.
Luego de este pequeño análisis de las opciones que presenta la oposición nos permite aclarar la ruta a seguir.
Ahora bien, ¿que haremos el domingo 20 de mayo? , pues, los que realmente somos revolucionarios, los que creemos en un mañana, los que anhelamos la utopía, no tenemos otro destino que continuar avanzando; no tenemos otra opción que jugarnos el resto.
Quien pensaba que era fácil, nos alzamos ante el imperio mas poderoso de este mundo,; por supuesto que vendrían con todo su poder contra nosotros, es que somos rebeldes, es que somos indomables, es que somos caribes.
Para ese imperio decadente somos una prenda, por eso junto a sus aliados del concierto internacional , nos tratarán de frenar, intentaran penetrar nuestras nuevas formas de participación; sin embargo, no existe otro camino, solo existe el camino de la revolución.
Cuando se inició el proceso revolucionario, muchos de nosotros éramos unos chamos, éramos unos jóvenes llenos de sueños, llenos de ímpetu y contra todo pronóstico, contra toda fuerza de este sistema que aun impera, dejamos familia, dejamos sueños personales, dejamos el calor de un hogar, y nos fuimos por allí, nos fuimos a la calle, nos fuimos tras ese líder llamado Chávez, y nos fundimos en ese pueblo sufrido, en ese pueblo que dijo: "ya basta", y aun no hemos regresado, y no regresaremos hasta que hayamos hecho realidad la razón por la cual nos fuimos y no es otra; que romper las cadenas que por más de 500 años nos ha colocado el imperio.
Las razones que hoy nos atañen no es por la dirigencia, es imposible ocultar la cantidad de errores que han cometido; pero, era imposible no cometerlos, somos una sociedad contaminada con todo tipo de anti valores, nacimos dentro de un sistema que tiene como pilares y principios lo amoral, lo anti ético. no se puede ocultar los enormes focos de corrupción, sin embargo , la revolución deberá trascender y superar el partidismo y el oportunismo .
Ya la revolución se hizo pueblo, se hizo calle ,se hizo fuerza indetenible.
Y solo por una razón, la revolución está en la calle, en la gente, en el pueblo, en ese niño que crece con dificultad, en esa madre que lucha para encontrar el sustento que la guerra económica le ha robado, en ese abuelo que tiene en sus canas los rastros de una lucha por cambiar un presente y que sueña con un mañana mejor.
Por ellos , por nuestros hijos, claro que voy a votar, y no estoy contento, estoy indignado, estoy dolido, pero no con Maduro, que ha recibido una arremetida descomunal por parte de la dictadura imperial mundial, este coraje es hacia nuestra hermosa ,santa y dulce burguesía, quienes son los que controlan los medios de producción, que malandros son, que malvados son, que desgraciados son, cuantas lagrimas nos han hecho derramar, cuantos familiares han fallecido, cuántos niños mal alimentados, cuantos viejitos, cuantas madres angustiadas por no tener que cenar, ustedes que pensaron, ya los derrotamos, ya están de rodillas, ya les robamos lo que habían logrado durante el proceso revolucionario. como subestiman al pueblo de bolívar, saben algo, claro que hemos tenido bajas en esta cruenta guerra, y como nos duele estas pérdidas; pero, este dolor nos fortalecerá para remontar estas adversidades provocadas por ustedes, sepan algo, vamos por ustedes y haremos justicia.
Estamos claros que el lunes 21 no cambiará nuestra realidad de manera mágica; pero, nos secaremos las lagrimas de frustración, de dolor, de rabia y seguiremos luchando, esta burguesía criminal, no puede seguir controlando los medios de producción. Y no se trata de expropiarle sus viejas maquinarias que solo sirven para hacer cabillas, es un deber ineludible de quienes nos consideramos revolucionarios crear una nueva clase de industriales honestos, nacionalistas , que tomen en cuenta a sus semejantes por encima del capital.
Que nadie se confunda, que nadie se equivoque, que nadie se canse, que nadie se rinda, cansarse es cobardía, rendirse es traición.
Hoy a pesar de los pesares seguimos teniendo patria, que toda esta experiencia nos sirva para aprender que con la burguesía no se puede pactar, que todo este transe nos sirva para fortalecernos, para resurgir con más fuerza y demostrar que por nuestras venas corre sangre de gigantes, que somos herederos de libertadores.
Aun no ha terminado la película, que nadie se equivoque; ahora el problema de los gringos no es Maduro; ahora su problema somos nosotros, somos todos, somos los que aún decimos: "patria o muerte, carajo.
QUE VIVA CHÁVEZ,CARAJO
SOCIALISMO O MUERTE.
ORANGEL DELFIN MARQUEZ
orangelcultura@gmail.com