A finales de los años noventa la mayoría de los países latinoamericanos recibieron recomendaciones por parte de organismos financieros internacionales, LIDERIZADO por los EEUU, aunado a los intereses internos y oscuros de cada nación para lograr dolarizar plenamente sus economías; sustituyendo de esta manera las monedas locales por el dólar estadounidense, camino que asumieron solo países como Ecuador, el Salvador, entre otros para su momento. Esta dinámica que buscaba proyectar la dolarización en toda Latinoamérica, implicaría la fortaleza de la moneda estadounidense y la dependencia de la economía de estos Estados a sus intereses.
Luego de veintisiete años después, aun persiste la visión de concretar este sombrío proyecto; con la variante de que ahora existen modos operacionales mejores planificados como la guerra blanda, construcción de escenarios belicistas, inducciones de crisis económicas en las regiones en desarrollo, entre otras medidas que provienen del mismo laboratorio y que tienen solo un eje común: quebrar las economías. Una muestra de esta realidad, se viene observando progresivamente en nuestro país, en la actualidad Venezuela representa el vértice de convergencia de una guerra que tiene un solo objetivo, el cual se busca alcanzar a costo de cualquier precio.
Para la sociedad mundial no es un secreto diplomático que Venezuela esta viviendo una guerra sin bombas, que ataca directamente el bienestar de la población. Recientemente uno de los ataques más fuertes está representado por el DÓLAR PARALELO, DÓLAR NEGRO O EL DÓLAR MALANDRO, una percepción letal que busca destruir de manera directa el desarrollo económico de la nación a través de la valoración injustificada de esta moneda en el mercado.
Esta semana se disparó inadmisiblemente su alza, produciendo nuevamente el deterioro del poder adquisitivo de la población, los atracos son constantes y prácticamente a diario, produciendo un deterioro de la calidad de vida del venezolano. Lastimosamente seguimos observando con preocupación la espera de una política adecuada que coloque tras las rejas a este vil delincuente.
Gracias al DÓLAR TODAY y algunos seres invisibles, seguimos siendo víctima de la cruda realidad que vive el país, evidentemente esta página busca distorsionar la economía; por lo que, no logramos entender como un grupito de personas que manejan o controlan tras bastidores esta dinámica cambiaria, puedan colocar en jaque a una nación con una población de más de 30 millones de habitantes. No quisiera pensar que sucedería en el supuesto contrario, si atacaran la economía de un país como EEUU u otra nación poderosa del mundo… toda esta situación se ha convertido en un problema de seguridad de estado para Venezuela.
No soy experto en el tema económico, pero es inquietante ver como esta página reorienta los costos de los productos en los principales mercados del territorio nacional; o como entender que la moneda venezolana circule libremente como segunda moneda en Cúcuta y tenga un valor más alto para el cambio en Bogotá, son distorsiones monetarias que alejan cada día mas la calidad de vida de la población venezolana, por esta razón muchos compatriotas se han visto en la necesidad de buscar trabajo fuera del país para tratar de mejorar su situación económica y para soportar la situación de la devaluación de la moneda.
Deben existir estrategias que lleven a este barco a un feliz puerto, son muchos los poderosos, empresarios o políticos con intereses de quebrar la economía de este país para sus aspiraciones personales, pero en lo que se refiere al tema económico se debe actuar con más contundencia para lograr el mundo justo y feliz como todos aspiramos. Continuamos a la espera con fe y optimismo la llegada de una actuación llena de eficiencia y eficacia para la máxima felicidad del pueblo de Bolívar que tanto lo merece.
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