El ejército de Estados Unidos es uno de los mayores contaminantes de la historia

Un estudio realizado por la Royal Geographical Society, afirma que el ejército estadounidense es uno de los mayores contaminadores de la historia, pues consume más líquidos y emite más gases que la mayoría de los países.

Un estudio realizado por la Royal Geographical Society, afirma que el ejército estadounidense es uno de los mayores contaminadores de la historia, pues consume más líquidos y emite más gases que la mayoría de los países.

Credito: Agencias

Si se mide la huella de carbono del ejército de Estados Unidos el resultado es alarmante: contamina más que otros 140 países del mundo.

Un estudio realizado por la Royal Geographical Society, afirma que el ejército estadounidense es uno de los mayores contaminadores de la historia, pues consume más líquidos y emite más gases que la mayoría de los países.

Está organizado en una extensa red global de buques, transportes terrestres y aviones de carga para abastecer sus operaciones, desde bombas hasta ayuda humanitaria y combustibles.

El combustible es la "sangre de los militares" …
y es fundamental para la vida del teatro de operaciones.
(Departamento de Petróleo y Agua del Ejército de EE. UU., Fort Lee

En 2017, las Fuerzas Armadas norteamericanas compraron alrededor de 269 mil 230 barriles de petróleo por día. En la quema de estos hidrocarburos se emitieron más de 25 mil kilotoneladas de dióxido de carbono a la atmósfera.

Estas emisiones no son contabilizadas como parte de las emisiones agregadas de los Estados Unidos luego de una exención otorgada en la negociación del Protocolo de Kyoto (que la Administración Bush se negó a firmar en 2001). Esta brecha debía ser rectificada por el Acuerdo de París, del cual Estados Unidos se ha retirado.

Para tratar de mitigar su huella, el ejército ha invertido en fuentes alternativas como los biocombustibles y las energías renovables. Pero su aporte representan sólo una pequeña fracción de su gasto en combustibles.

Un ejército "verde"?

Las guerras resultan una de las acciones humanas más catastróficas para el medio ambiente. Por ello, la acción contra el cambio climático exige el cierre de varias ramas militares.

Las reducciones en el presupuesto del Pentágono y de su capacidad para la guerra causaría una enorme caída en la demanda del mayor consumidor de combustibles.

Asimismo, los recursos para obtener y distribuir el combustible se podría gastar en acciones por la paz y para financiar un nuevo acuerdo ecologista. Pero todo ello dependerá de las elecciones presidenciales de 2020.

Según el estudio, también es necesario comprender cómo organizan y operan las cadenas de suministro del ejército de Estados Unidos para reducir su huella de carbono. Además de realizar cambios en la burocracia militar que hacen posible el uso masivo de hidrocarburos.



Esta nota ha sido leída aproximadamente 8581 veces.



Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Notas relacionadas

Revise noticias similares en la sección:
Por los Derechos Humanos contra la Impunidad



Revise noticias similares en la sección:
Internacionales