(Caracas, 08 de febrero de 2017) El Ministerio Público acusó a siete funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), adscritos al Destacamento de Zona Nº 53, por su presunta responsabilidad en la desaparición de Julián Salazar Rodolfo, Marluis Hernández Larosa y Geovanny José Lozada.
Tal hecho ocurrió el 06 de octubre de 2016 en el barrio Playa de Sal de Carúpano, municipio Bermúdez del estado Sucre.
Los fiscales 49º nacional y 8º de la mencionada jurisdicción, Joenny Hernández y Nickson Salazar, respectivamente, acusaron al mayor Eduardo Charelli Rojas; los sargentos primeros Renny Hidalgo Bastardo, Ansoni Sánchez Rivas y Eusebio Vegas Patiño por los delitos de desaparición forzada de personas y simulación de hecho punible.
Asimismo, los sargentos segundos Jefferson Mota Rozo y Jhoymer Tovar Mora, y el sargento mayor de tercera Pedro Blanca Campos fueron acusados por los mencionados tipos penales.
Adicionalmente, los siete efectivos fueron acusados por el delito de violación de domicilio.
En el escrito presentado ante el Tribunal 3º de Control de Carúpano, los representantes del Ministerio Público solicitaron la admisión de la acusación, el enjuiciamiento de los militares y que se mantenga la medida privativa de libertad, la cual cumplen en el referido destacamento, ubicado en Carúpano.
A las 7:00 de la noche del citado día, los efectivos ingresaron armados, sin orden de allanamiento, en una vivienda y se llevaron a Salazar Rodolfo, Hernández Larosa y Lozada, a bordo de una unidad militar.
Luego, los funcionarios habrían alegado un supuesto enfrentamiento para justificar la detención de las víctimas.
La madre de uno de los hombres desaparecidos acudió el 7 de octubre ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas para denunciar lo ocurrido.
Tras el inicio de la investigación, los uniformados fueron aprehendidos el 21 de diciembre por funcionarios del Comando de Zona número 3 del mismo cuerpo castrense.
