Del país profundo: José Raimundo Vaquero entrelazado a Caicara de Maturín

En las orillas de los ríos Orinoco, Caroní, Cuyuní, Caura, Caris, Pao y Guarapiche todavía quedan rasgos de identidad entre los descendientes de importantes grupos caribanos que resistieron por siglos la conquista española en nuestras regiones del oriente y sur de Venezuela.

La oralidad se mantiene. Al menos se escucha narrar algún tipo de historia que viene dando sacudidas desde un pasado remoto al tiempo actual. De eso nos habla José Raimundo Vaquero Guevara al relacionar a la población de Caicara de Maturín y su gente con la localidad anzoatiguense de Santa Rosa, vecina al río Guanipa. Santa Rosa es un asentamiento de indígenas ubicado más al sur y próximo a otros sitios donde se practica una lengua secreta y se habla de los ancestros inmortales que transitan por senderos de Cachama, Bajo Hondo, Tascabaña, Las Potocas, región actual de Kariñas, descendientes directos de Caribes.

Nuestro encuentro con José Raimundo Vaquero Guevara no tenía otro propósito que el de apreciar una visión distinta sobre las tradicionales celebraciones del día de los santos inocentes, cada 28 de diciembre en Caicara de Maturín, mejor conocida como Santo Domingo de Caicara, misión fundada por capuchinos evangelizadores a comienzos del siglo XVIII a orillas del río Guarapiche, pero la conversación tuvo un giro distinto y torcimos hacia el descubrimiento de sitios escondidos y muchas veces lejanos, donde terminaron mezclándose los habitantes de un lugar y otro lugar para dar origen a lo que somos hoy.

DE YAVIRE A PARIAGUÁN

“Aquí nos sentimos caribes. Si yo hubiese conservado el apellido mío yo fuera Yaguare, porque mi bisabuelo era Yaguare y pasó ese apellido a Guevara por mi abuela que no era hija legítima y tuvo ese apellido Guevara porque se lo puso un dueño de hacienda. Un dueño de hacienda le decía al indígena te voy a regalar mi apellido y allí se perdía la historia. Los Yaguare son de Anzoátegui, porque esta población de Caicara estuvo muy hermanada con Santa Rosa, de donde trajeron gente para acá a trabajar como peones para los españoles y muchos huyeron. Pero hay caribes que se hicieron célebres como indios rebeldes, entre ellos se puede mencionar al cacique Yavire que está enterrado en alguna parte de esta sabana de Caicara. El cacique Yavire es conocido como organizador de las tribus del Caroní y dominaba entre los actuales estados Anzoátegui, Monagas y Sucre. Era de sangre Caribe y era manco. El perdió el brazo izquierdo en una batalla del sitio de Caicara, mucho antes de que se fundara esta población. El decía, “a los españoles no se les combate con los brazos, sino con el corazón”, esa es una de las máximas de Yavire que tuvo un lugarteniente llamado Pariaguán, triunfador de la gran batalla de Guanta. A ese Pariaguán que era su seguidor, los españoles le hicieron una operación tenaza para matarlo en la batalla de Los Cardones a menos de media hora de aquí de Caicara, pero no pudieron, se dice que huyó hacia Guayana…” 

LA FAMILIA RICARDO.

“Aquí entre los celebrantes de la parranda del 28 de diciembre hay descendientes de ese otro héroe conocido como Ricardo, un indio rebelde de esta población de Caicara que liderizaba a la indiada. Un descendiente de él, José Manuel Ricardo murió metido en una cueva que estaba en Los Barrancos. Allí se enfermó y murió después de ver tanto maltrato y violaciones que le hacían los criollos a los indígenas. Tenía ese rencor guardado y como se había ido a los ejércitos aprendió a matar y después a su regresó entró en contacto con los peones de las haciendas que eran humillados y juró venganza, de tal manera que le preparó una emboscada al jefe civil, pasando por la hacienda San Pedro y la hacienda de los Bermúdez y la subida de los Rangel, donde se le adelantó en el camino y le dijo “por aquí no pasas” y lo arponeó con su flecha matándolo en esa subida de los Rangel. Entonces hicieron grandes redadas buscando a Ricardo, pero no lo encontraron nunca por que estuvo escondido en una cueva el resto de su vida. Allí entre los Barrancos murió. Su familia quedó regada entre Caicara, Bajo Grande y Guayana…”

LA PARRANDA DEL 28 DE DICIEMBRE.

“…Yo nací un 7 de enero de 1938 y le puedo decir a esta edad de 79 años que una de las cosas más grandes que tenemos es nuestra rebeldía caribe que nos llevó muy lejos, porque con esa sangre de guerreros pudimos defender a toda América del Sur y ganar batallas y libertad. Eso lo siento yo como hijo de Berta Guevara y de Sebastián Vaquero que era de Areo, pero la familia Vaquero venía del llano. Un abuelo mío, Pedro Corvo era el que representaba a la parranda todos los 28 de diciembre. La fiesta empezaba en los caseríos el 27, esos caseríos eran La Meseta, Bajo Grande, Canaguaima y Los Zanjones, donde quedaba la hacienda San Pedro a las orillas del río Guarapiche. Nosotros le decíamos a toda esa zona Los Zanjones. La Meseta es solo una parte, una explanada rodeada de barrancos, cerros y sabanas. Allí se aglomeró la gente que fue desplazada del pueblo de Caicara, eran los que se negaban al sistema de producción español y cogían los montes para guarecerse, zonas muchas veces inaccesibles, donde los descendientes de indígenas Chaimas, Parias y Caribes podían conservar sus costumbres. Hacían sonar los cachos y las guaruras en la época de las grandes crecientes del Guarapiche que inundaban a Caicara, la ciudad donde había muchas ceibas. Por eso se dice que esas parrandas del 28 de diciembre que ahora la llaman la parranda del mono se celebró por primera vez debajo de una gran ceiba y fueron los religiosos quienes decidieron darle cabida en su calendario todos los 28 de diciembre. Allí se toca y se baila la Marisela que se llegó a interpretar en tiempos de las luchas independentistas y la música indígena de pitos que es el Maremare, el más auténtico que se conserva todavía en los zanjones por el contacto con los caribes de Santa Rosa. Antes en esas fiestas se encontraba mucha caballería y mucha diversidad cultural…”

José Raimundo Vaquero en Caicara. 2017
Credito: Rafael Salvatore

 



Esta nota ha sido leída aproximadamente 2684 veces.



Benito Irady

Escritor y estudioso de las tradiciones populares. Actualmente representa a Venezuela ante la Convención de la UNESCO para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial y preside la Fundación Centro de la Diversidad Cultural con sede en Caracas.

 irady.j@gmail.com

Visite el perfil de Benito Irady para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: