Es más que evidente la complicidad de la ONU, sobre amenaza y agresiones de EE.UU. en contra del pueblo venezolano, el Herodes Donald Trump, Llevan más de 27 semanas de locura imperial, agrediendo al pueblo venezolano. La actuación de EEUU es para desestabilizar los países, que no se alinean con ellos, en este caso el que sufre es el pueblo venezolano, y la ONU no dice nada hemos denunciado y denuncio que: la Organización de las Naciones Unidas, ha permanecido sin ejercer alguna acción ante la amenaza de Estados Unidos, en contra de Venezuela. No han hecho caso la ONU, han mantenido un “silencio cómplice”. Esta acción de EE.UU. forma parte de una estrategia para desestabilizar a las naciones que no se alinean a los intereses norteamericanos. La situación de asedio estadounidense, contra Venezuela, aunque en un punto elevado durante las últimas semanas, no es un hecho aislado, sino un episodio más de la política de intervención que “Washington ha desplegado sobre América Latina y el Caribe”.
Desde la época de la independencia a nuestros días, los círculos de poder estadounidenses, buscan, con sanciones económicas, presiones diplomáticas, intervenciones directas, amenazas militares y apoyo a golpes de Estado, doblegar la soberanía de las naciones de lo que el héroe cubano José Martí denominara Nuestra América. Así, el cerco a Venezuela, se confirma como parte de una tendencia histórica, acentuada con la presencia del ultraderechista Donald Trump en la Casa Blanca. Esta administración ha endurecido su postura de rechazo a la Revolución Bolivariana, encabezada en los últimos años por el presidente Nicolás Maduro. Lo ha hecho desde el plano simbólico, con un discurso cada vez más hostil, y con acciones concretas, que superan con creces a las tradicionales sanciones y que ponen en peligro la estabilidad de la región.
Tras argumentos falaces sobre democracia y seguridad nacional, y acusaciones infunda mentadas sobre presuntas relaciones del gobierno venezolano, con el narcotráfico, lo que realmente existe es la pretensión del demente terrorista Herodes Donald Trump y sus acólitos de poder controlar los recursos naturales de una nación rica en ellos. Igualmente podemos afirmar que el verdadero propósito de EEUU “va más allá del control de los recursos naturales venezolanos”, incluido el petróleo y gas. “Alguna gente piensa que solo quieren robarse esos recursos, pero también yo creo que quieren ir más allá. A ellos no les gustan los pueblos dignos, los pueblos que se hacen respetar y que exigen respeto”. Y defiende su independencia y soberanía. A ellos les gustan los sumisos, los arrastrados y el pueblo venezolano, no nació ese día. Nació en el día de los libertarios, rebeldes, que luchan y no se cansan”.
EL FRACASO DE LA POLÍTICA DE AISLAMIENTO INTERNACIONAL Durante décadas, EE.UU. y sus aliados locales han apostado a la política de aislar internacionalmente a Venezuela. El propósito explícito ha sido siempre que el Gobierno Bolivariano, sea tratado como la cabeza de un Estado fallido. Parcialmente lo han logrado, sobre todo durante el anterior período de Trump, mediante la patraña del gobierno interino. Sin embargo, esa estrategia fue derrotada y en este último tramo (desde que comenzó la operación naval en el Caribe) ha colapsado casi por completo. En este momento, quienes aparecen como parias internacionales son Trump y su pandilla, que andan por el mundo matando civiles, hundiendo pequeñas embarcaciones y asaltando tanqueros llenos de petróleo, ya el mundo no es el mismo. “Descaradas” las afirmaciones de Stéphane Dujarric, representante del secretario General, António Guterres, ante la ONU, quien instó a Venezuela y EEUU a “desescalar las tensiones”.