En medio de escenarios de amenazas, de sangre, de muerte, en medio del monitoreo de la situación, colaboradores y patriotas cooperantes nos hicieron llegar una información que nos hace respirar un tanto tranquilos.
El imperialismo nos amenaza, nos agrede. Quiere venir a saquear, a destruir. Quiere venir a robar nuestras riquezas, nuestros recursos.
Lo ha explicado muy bien recientemente el Presidente Nicolás Maduro en una reunión de balance con Comunas y Circuitos Comunales: Los gringos quieren venir en primera instancia para robar nuestro petróleo y demás riquezas. En segundo lugar, quieren venir para destruir de raíz al proyecto bolivariano.
No les conviene que el modelo que construimos en Venezuela se consolide y que el mundo volqué su mirada y se demuestre que más allá de un modelo capitalista, otro mundo es posible.
Hemos montado nuestra propia sala situacional. Además de contar con nuestras propias fuentes de información, que nos permite desarrollar temas, muchas veces que no son tratados por nuestro Sistema Bolivariano de Información y Comunicación, y producto de nuestros análisis de entorno y prospectivos.
Hace varios días, los medios hegemónicos proclamaban que el 24 de agosto tres "destructores" estadounidenses se acercarían a Venezuela para realizar una operación contra los carteles. En realidad, hubo solo uno y ni siquiera allí: nunca se aproximó, sino que estuvo estacionado en Georgetown (Guyana). En cuanto a los otros dos, uno estaba en reparación tras el bombardeo en el Mar Rojo y el otro navegaba en el Pácifico.
Estamos en una fase de guerra psicológica donde los aquelarres y show mediáticos, pero las Operaciones de Falsa Bandera y "falsos positivos" estarán a la orden del día.
Además de las acciones de distracción que libra la administración de Donald Trump, para que la gente no le pare a los indultos que concedió el actual mandatario por el famoso caso y la lista de Epstein.
También distracción porque el objetivo no es la lucha contra los carteles sino además el apoyo gringo a las elecciones en Guyana, donde todo apunta a que Mohamed Irfaan Alí, actual mandatario será ratificado, por un margen muy estrecho (eso no les importa a los gringos) por cinco años más al frente de los destinos de ese país. Y en ese contexto, en Guyana se inflama la histeria colectiva sobre una supuesta invasión venezolana. En este caso la histeria funciona como factor en la carrera presidencial en el vecino país. Y el actual aliado de Estados Unidos en Guyana se encuentra en una posición inestable, por lo que no se descarta un nuevo fraude como el de hace cinco años en Guyana. Y este ha sido un espectáculo montado en los medios globales está destinado, en realidad, a los votantes guyaneses.
Pero nuestros patriotas cooperantes nos hicieron llegar una información, que es el principal motivo que nos obligó a elegir el tema que desarrollamos el día de hoy
Y es que un amigo que trabaja en una contratista petrolera en el oriente del país nos ha informado que en los próximos días llegarán al país unos nuevos barcos de la empresa estadounidense Chevron al puerto de José, en el estado Anzoátegui, a extraer petróleo en el marco de las licencias otorgadas por el gobierno estadounidense.
Por lo que no solo sería estúpido, sino además inconveniente, invadir a Venezuela, o aplicar lo que algunos "influencers" de extrema derecha señalan, de un bombardeo a infraestructura crítica en Venezuela, ante la creciente demanda energética del que pretende ser el hegemón del mundo.
Y no conforme con ello, luego de los barcos de la Chevron, entrará un petrolero ruso y uno chino. También sería de imbéciles o de estúpidos una agresión a Venezuela cuando dos superpotencias rivales a EEUU también ejercen y tienen intereses estratégicos y energéticos con nuestro país.
Por eso es que de acuerdo a esta información y a nuestros análisis, que una invasión en Venezuela por ahora queda postergada. Los intereses por el petróleo venezolano son muchos por parte de EEUU y no le conviene que Venezuela se torne inestable cuando en estos momentos es el proveedor confiable y seguro de energía a EEUU y a menos de una semana de los puertos de la costa Este y Oeste de EEUU.
Por eso es que no hayamos una manera más pintoresca y coloquial como nuestro pueblo, de titular como titulamos: Se jodió la invasión, porque el sonar lo que muestra son unos barcos, los barcos de la Chevron que vienen a buscar petróleo venezolano que necesitan. Pero que para llevárselo, tienen que pagarlo.
Ya saben.