El norte nunca nos ha gustado a los saharauis y a los Venezolanos; (El subrayado es mío) preferimos mirar hacia el sur. Del norte nos ha venido todo el dolor, toda la miseria, la traición, la esclavitud; del sur, el sol, la vida, la raíz. ("El beso del Sáhara" (2006), Gonzalo Moure,)
Después del terrible daño que el secretario de Estado Mike Pompeo le hizo a Venezuela durante su gestión, pues él fue responsable directo de las sanciones, amenazas militares, invasiones, mentiras y toda una cantidad de suciedades esparcidas por el mundo sobre la Revolución Bolivariana y ahora que su apestosa tarea culmina con más pena que gloria, el felón Carlos Vecchio quien finge como embajador en Estados Unidos no desperdicio un instante para agradecerle y despedirse del funesto personaje y esto escribió en su Twitter el innombrable de Vecchio: "En nombre del pueblo venezolano y del gobierno interino del presidente Juan Guaido, gracias, secretario Pompeo, por su fuerte y constante apoyo durante los últimos años desde el Departamento de Estado hacia nuestra causa de restauración de la libertad, la democracia y el bienestar en Venezuela",
¿Pero cuál es su agradecimiento?, Obviamente que no es un reconocimiento del pueblo venezolano, ni del gobierno de Nicolás Maduro, jamás el pueblo puede corresponder a quien le golpea su patria, sus instituciones y su democracia. No obstante, de la derecha extrema, de los traidores y alacranes que se autodenominaron funcionarios y funcionarias del Estado si constituye un agradecimiento muy especial para quien desde la Secretaria de Estado de Estados Unidos movió todos los hilos del poder imperial para robar y saquear los bienes que posee Venezuela en el exterior e intentar aniquilar al gobierno legítimo que se dió Venezuela en elecciones libres y soberanas, y que los apátridas y ambiciosos aprovecharon para lucrarse y enriquecerse con el erario público que le pertenece a todos los ciudadanos de la República Bolivariana .
Este gratitud muy sentida por Vecchio demuestra la bajeza moral de un grupúsculo muy servil y arrastrados que sin tapujo alguno ofrenda ante el altar del victimario de la patria, de quien y quienes ensombrecieron y trataron de liquidar el sueño de nuestros libertadores. ¡INMORALES¡ que cobran recompensa por anteponer los intereses imperiales por encima de los beneficios de su propio país y que sin miramiento alguno como decía Emiliano Zapata: " … por complacer a tiranos, por un puñado de monedas, o por cohecho o soborno están traicionando y derramando la sangre de sus hermanos".
Personeros como este, son la calaña de politiqueros que se ofrecen como el cambio y los rehabilitadores del país, y que encuentran eco en algunos gobiernos de la región y del mundo, que anuncian que en Venezuela no hay democracia, pero que en el seno de sus instituciones y actos de gobiernos reina la descomposición moral y antidemocrática que escandaliza a cualquier mortal.
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