Filven 2025 en Barquisimeto, la fiesta del espíritu

Demasiados libros y poco poder adquisitivo. Al menos de la gran mayoría de los visitantes, especialmente si como el suscrito pertenecemos al segmento de los trabajadores públicos y en concretos a los docentes universitarios, cuyo salario es simbólico y estamos dependiendo del bien llamado Bono de Guerra Económica que el Sistema Patria cancela cada 16 de cada mes, porque la oposición ha sido exitosa en activar sanciones económicas; de tal manera que antes o después de esa fecha estamos auts. Lo que no niega que uno pueda disfrutar de uno que otro ejemplar obsesionado por la generosidad de personas allegadas que dispone de otros ingresos, además de un sinfín de eventos paralelos como presentación de libros, conferencias y recitales poéticos, lecturas orales de relatos cortos, por ejemplo, de los los libros del poeta Nelson Ures, Félix Gutiérrez y la jornada especial y conmovedora dedicada al sufrido pueblo de Palestina.

La Biblioteca Pública José Pío Tamayo de Barquisimeto con sus espléndidas instalaciones en estos días de la Filven 2025 revive su pasado glorioso como centro de virtudes y luces sociales e Intelectuales de las décadas ya un poco lejanas de 1980 y 1990, cuando en lo personal cursamos la educación primaria y bachillerato por libre escolaridad, parasistema y también estudios universitarios en educación y pedagogía, siendo que tanto esta sede de la biblioteca, como la del Oeste Pascual Venegas Filardo y las bibliotecas centrales de la UPEl IPB, UCLA, Instituto Tecnológico Fermín Toro y la UNEXPO constituían centros nodales del dinamismo académico, principalmente por aquello de la tradicionales tareas escolares, esas que por estos días el joven ministro Rodríguez pretende regular mediante para legales como decretos o resoluciones.

Por qué no implantará medidas concretas para regular el uso de teléfonos celulares en los salones de clases e impulsar un efectivo plan lector? Aunque, con perdón, creo que el mismo presidente Maduro ya se ha referido a ello con su eslogan menos pantallas y más libros.

De hecho, en sus palabras inaugurales de esta Filven 2025 el gobernador Reyes Reyes contó varias anécdotas buenísimas del Arañeyo de Sabaneta y de una de sus nietas. A saber, que cuando él y Hugo Chávez estudiaban bachillerato, se diferenciaban en que Chávez se refugiaba en la lectura y tenía un círculo de estudio con el profesor Tirado, un formador espiritual y político que ellos tuvieron; en cambio, Reyes, contó él mismo allí, que se iba a jugar bolas; después también se incorporaría también a esas jornadas de lectura y estudios a instancias de su compañero Chávez.

Respecto a su nieta, contó el gobernador Reyes Reyes que él negocia con ella así, tú me das tu tablets un rato para yo verla y tú te lees un libro, aunque sea pequeños y, claro, adoptado a su edad e intereses. El asunto es que padres, abuelos y docentes tenemos que fomentar la lectura, generar afición por libro físico; igualmente nos contó algo similar alguien allegado de su convenio con sus hijos ahí en la Plaza de libros usados de Barquisimeto: si, el Niño Jesús te traerá una tablets, Pero que también me lean un libro y de hecho les llevó El Principito y El Quijote.

Hoy las nuevas juventudes por el cambio de época en el mundo y la nueva revolución digital en la llamada IV Revolución Industrial, desarrollan nuevas competencias en la búsqueda, procesamientos, almacenamiento y síntesis de la información o cómo la transforman en conocimiento; por lo pronto esta generación llamada de diversas maneras, milenials o z, etc., a diferencia de nosostros supuestamente de la generación de la bomba o Babe bumber (?) ya no hace colas para ingresar a la Biblioteca Pública José Pío Tamayo de Barquisimeto o de la universidad donde estudie. Internet suple muchas cosas, con sus grandes posibilidades y limitaciones.

Sin embargo, parece que no todo esté perdido en lo que Mario Vargas Llosa en un libro de ensayos reunidos de su columna Piedra de toque denominó Generación del espectáculo que no lee los clásicos directamente, sino resúmenes o fragmentos de obras universidades en internet; dado se ha podido ver grupos pequeños de niños y jóvenes visitando la edición de Filven 2025 en la Ciudad de los crepúsculos, participar de un recitar poético y cantar. El presidente Maduro suele hablar de la Generación Genial y en los días que corren marcadas por un aspecto económico, aéreo y marítimo hay sin embargo motivos de esperanza, el espíritu de la nación renace y se reafirma en tiempos de retos inventes y el libro, la reflexión y la alegría del canto y la música son factores fundamentales de hacer patria.

Esperemos que en la Filven 2026 hayan mejorado los ingresos de los trabajadores y así podamos comprar las novedades literarias a nuestro gusto, aunque lejos de aquel padecimiento denunciado por Cervantes: que del mucho leer y el poco comer nos volvamos locos.
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