En el mes de marzo, el 96 por ciento de los miembros del sindicato de conductores de trenes de Reino Unido (Aslef) votaron a favor de retomar las jornadas de lucha en defensa de sus derechos laborales.
En ese sentido, su secretario general, Mick Whelan, afirmó que los criterios mostraban “un claro rechazo por parte de los trabajadores de trenes a la ridícula oferta que nos hizo en abril del año pasado el organismo de los operadores de trenes, Rail Delivery Group”.
Los servicios de ferrocarril se ven afectados por las operaciones de las compañías Avanti West Coast, CrossCountry, East Midlands Railway, London Northwestern Railway y West Midlands Railway.
Estas entidades ya comunicaron que no trabajarán todo el viernes, y a la vez advirtieron que los servicios del sábado también podrían verse afectados.
Este paro se suma a una prohibición sindical de las horas extraordinarias para todos los operadores que comenzó el jueves y se prolongará hasta el sábado. Asimismo, hay otra prevista para el lunes y el martes próximo.